domingo, 31 de agosto de 2014

Lamento de Ariadna – Fiedrich Nietzsche


Quizás la mejor poesía de Nietzsche no esté en sus poemas explícitos, sino en sus escritos filosóficos, empezando por Así habló Zaratrustra, tan profundo como bello. La dimensión poética se halla sin dificultad en toda la producción intelectual de este filósofo-artista, como Dionisios, aunque se conozca muy poco su obra propiamente poemática. Quizás por eso Nietzsche puede convertirse en ese dios de la embriaguez que habla de su amada Ariadna como si fuera él mismo.
La transmutación de su identidad es parte de ese baile de máscaras que tanto lo sedujo como posibilidad misma de la desnudez. Cierto que hay una filosofía no poética y una poesía no filosófica. A riesgo de confundirme irremediablemente, confieso que sólo cuando los poemas tienen esa modulación propia de la auto-reflexividad siento que la escritura acaricia lo real, aproximándose ya no sólo al abismo del ser, sino como decía Castoriadis, al ser como abismo. A pesar de un cierto tono declamatorio, lo que irrumpe aquí quizás no sea más que la gestualidad del dolor –dolor indesterrable del laberinto- y es ese dolor, más que la sabiduría, lo que nos acerca a ese núcleo insondable que llamamos Nietzsche.
A.B.

¿Quién me calienta, quién me ama todavía?
¡Dadme manos ardientes!
¡dadme un brasero para el corazón!
Tendida en la tierra, estremeciéndome,
como una medio muerta a quien se le calienta los pies,
agitada, ay, por fiebres desconocidas,
temblando ante glaciales flechas agudas de escalofrío,
cazada por ti, ¡pensamiento!
¡Innombrable! ¡Encubierto! ¡Aterrador!
¿Tú, cazador entre las nubes!
¡Fulminada a tierra por ti,
ojo sarcástico que me mira desde lo oscuro!
Así yazgo,
me doblo, me retuerzo, atormentada
por todos los martirios eternos,
herida,
por ti, el más cruel cazador,
tu desconocido, dios...

¡Hiere más hondo!
¡Hiere de nuevo!
¡Pica, repica en este corazón!
¿A que viene este martirio
con flechas de dientes romos?
¿Qué miras otra vez
sin cansarte del tormento humano
con malévolos ojos de rayos divinos?
¿No quieres matar,
sólo martirizar, martirizar?
¡Para qué martirizarme a mí,
malévolo dios desconocido?

¡Ah, ah!
¿Te acercas sinuoso
en semejante medianoche?...
¿Qué quieres?
¡Habla!
Me estrechas, me oprimes,
¡ah, ya demasiado cerca!
Me oyes respirar,
acechas mi corazón,
¡celoso!
-¿pero celoso de que?-
¡Fuera, fuera!
¿para qué la escala?
¿quieres subir
adentro, hasta el corazón,
subir hasta mis más
secretos pensamientos?
¡Impúdico! ¡Desconocido! ¡Ladrón!
¿Qué quieres sacar robando?
¿Qué quieres sacar escuchando?
¿Qué quieres sacar atormentando?
¡tú, atormentador!
¡tú, dios verdugo!
¿O como el perro debo
refregarme contra el suelo ante ti?
¿Sumisa, embelesada fuera de mí
menear la cola por amor?
¡Es inútil!
¡Punza otra vez,
aguijón el más cruel!
No soy tu perro, sólo tu presa,
¡cazador el más cruel!
tu más orgullosa prisionera,
bandido tras las nubes...
¡Habla al fin!
¡Tú, encubierto con el rayo! ¡Desconocido! ¡habla!
¿Qué quieres, salteador, de mi?... 
¿Cómo?
¿Un rescate?
¿Qué quieres de rescate?
Pide mucho, ¡lo aconseja mi orgullo!
Y habla poco, ¡lo aconseja mi orgullo!

¡Ah, ah!
¿a mí es a quien quieres? ¿a mí?
¿a mí entera?...
¡Ah, ah!
¿Y me martirizas? ¡Loco que eres un loco!
¿Requetemartirizas mi orgullo?
Dame amor, ¿quién me calienta todavía?
¿quién me ama todavía?
dame manos ardientes,
dame un brasero para el corazón,
dame, a la más solitaria,
a la que el hielo, ¡ay!, siete capas de hielo
enseñan a añorar enemigos,
da, sí, entrega,
enemigo el más cruel,
dame ¡a ti!..

¡Se acabó!
Entonces huyo él,
mi único compañero,
mi gran enemigo
¡mi dios verdugo!...
¡No!
¡vuelve!
¡Con todos tus martirios!
Todo el curso de mis lágrimas
discurre hacia ti,
y la última llama de mi corazón
para ti se enardece.
¡Oh, vuelve,
mi dios desconocido! ¡mi dolor!
¡mi última felicidad!...

Un rayo. Dionisyos aparece con esmeraldina belleza.

Dionysos:
Sé juiciosa, Ariadna...
Tienes oreja pequeñas, tienes mis orejas:
¡mete en ellas una palabra juiciosa!
¿No hay que odiarse primero, si se ha de amarse?...
Yo soy tu laberinto...




Canciones con historia: “Slave to Love” Bryan Ferry


Slave to Love” (O “Esclavo del amor”, un tanto libremente traducido) fue uno de sus temas más triunfales como solista. Publicado en la primavera de 1985, permaneció durante nueve semanas en los charts del Reino Unido, llegando a alcanzar la décima posición. Escrito por el propio Ferry y coproducido junto a Rhett Davies, se convirtió muy pronto en una canción de culto, “Versioneada” por otros artistas y utilizada en varias películas y series de televisión, aunque seguramente su más popular presencia en esos medios sea formando parte de la banda sonora de “Nueve Semanas y Media” (Nine ½ Weeks, Adrian Lyne, 1986), el conocido título “Softcore” protagonizado por Kim Basinger y Mickey Rourke, la pareja de amantes posmodernos, marchante de arte y “Broker” de “Wall St”, respectivamente. 

Espléndida muestra del “Pop” más sofisticado, compuesta en plena era del “Yuppismo” y el diseño, en ella la voz un tanto desvalida e implorante de Bryan Ferry, aliñada con unos suntuosos arreglos muy ochenteros (Es decir, “Jazzísticos” y en su punto de fusión, con punzantes saxos de videoclip lujoso o spot de perfume del caro), desgrana una historia de “Amour Fou” punteada por la percusión, que va in crescendo. La pasión amorosa, metafóricamente identificada con la más dulce de las esclavitudes, aparece como una prisión de la que no se puede escapar, y que “Vuelve débil al fuerte” y al rico “Lo convierte en pobre”, es decir, que actúa por encima de las diferencias personales y las barreras sociales, produciendo en todas sus víctimas los mismos y devastadores estragos, porque los protagonistas permanecen ajenos a todo mientras aman, aunque a su alrededor el mundo explote en mil pedazos y “El cielo se queme en un mar de llamas”. 

Balada de un exacerbado romanticismo urbano, más allá del correcto video oficial para el consumo televisivo resulta inseparable de las imágenes de Basinger y Rourke viviendo su amor a través de la ciudad, como en una vieja película sesentera de Claude Lelouch, y retozando en la intimidad con jueguecitos que hoy, casi 30 años después, nos parecen de una inocencia candorosa y de lo más light, aunque entonces fueran el “Summum” del erotismo e incluso los espíritus más mojigatos los calificasen de “Pornografía”. Un buen ejemplo, en todo caso, para explicar lo que fueron los años 80, musical, estética, y hasta moralmente. Y Brian Ferry estaba también allí, para levantar acta. 


http://cineultramundo.blogspot.com.ar/2014/02/recordando-slave-to-love-bryan-ferry.html


Yo prefiero el amor (semblanza de Pablo Neruda)

"Yo prefiero el amor. La política es una obsesión para otros. No es la mía...". Así contestó Pablo Neruda a L'Express, cuando le preguntaron sobre sus inquietudes más evidentes: la poesía y la política. Y no podía ser de otra manera, porque su obra arranca precisamente de ese profundo amor por todas las cosas. Es que el verdadero poeta es capaz de desentrañar los misterios del universo con su sola intuición y por ello, su capacidad de amar lo creado es tan enorme que sólo puede tener cabida en la poesía, que posee profundas raíces, pero, a la vez, poderosas alas.
Neruda amó hasta la obsesión la lluvia y los bosques; el mar, las gaviotas y los barcos. Amó también los frutos de la tierra y a su gente; amó la epopeya americana y el placer de los besos. Amó, sobre todo, a los hombres, a su pueblo, con ardiente paciencia y esperanza. Amó, más que nada, al amor: "Amor que puede ser eterno / y puede ser fugaz. / Amor que quiere libertarse / para volver a amar. / Amor divinizado que se acerca / Amor divinizado que se va".
Nacido en Parral, pequeña ciudad en el centro-sur de Chile, el 12 de julio de 1904, fue en Temuco, la pujante capital de la Araucanía, donde Neruda plasmó sus recuerdos de infancia. A los ocho años descubrió "un ansia profunda, de un sentimiento hasta entonces desconocido, especie de angustia y tristeza. Era un poema...". Y nunca más se separó de dicha ansia. En sus viajes por Europa, Asia, Oceanía y su América entrañable, la poesía siempre lo acompañó. Estuvo con él en consulados y embajadas, en ateneos y universidades, en su patria y en el exilio.
Su obra, variada y fecunda, va desde la pasión de Crepusculario (1923) y Veinte poemas de amor y una canción desesperada (1924), hasta la brillante sencillez de sus libros de odas, pasando por esos libros poderosos, de alto vuelo, épicos y telúricos, como Canto general (1950) y Las uvas y el viento (1954). Más de cincuenta libros y millares de traducciones a diversas lenguas.
Neruda, a diferencia de otros escritores de Chile, tuvo la fortuna de que su patria reconociera temprano sus virtudes y quilates literarios. Su primer galardón lo obtuvo en 1919, fue el tercer lugar en los Juegos Florales de Maule; luego, en 1920, el primer puesto en el Concurso Literario de la Fiesta de la Primavera de Temuco. En 1944, el Premio Municipal de Poesía de Santiago de Chile y en 1945, el Premio Nacional de Literatura (ese mismo año fue electo senador por las provincias nortinas de Tarapacá y Antofagasta). Además de diversas distinciones universitarias en Chile y en el extranjero. No obstante, hubo un premio que su fama —ya universal— reclamaba desde principios de la década del 60 y que, inexplicablemente, llegó once años después, cuando ya no lo esperaba. No fueron años fáciles...
Cada vez que se acercaba la fecha de entrega de los premios Nobel, debía esconderse para evitar a la prensa que deseaba acompañarlo en el momento en que conociera la noticia de su éxito o de una nueva postergación (en una ocasión, incluso, el propio embajador sueco en Chile fue a felicitarlo y a brindar con él, pero el elegido fue otro).
En 1971 estaba en París, al frente de la embajada chilena en la capital francesa, cuando recibió la noticia de su Premio Nobel, la Academia Sueca calificó su obra de "poesía, que con el efecto de una fuerza natural, hace revivir el destino y los sueños de un continente".
Pablo Neruda falleció en Santiago de Chile el 23 de septiembre de 1973, víctima de un implacable cáncer. Sus restos reposan hoy en Isla Negra, en su casa frente al mar (hoy convertida en hermoso museo), en compañía de Matilde Urrutia, su tercera esposa.

Hoy, nosotros, recordando su canción desesperada, digámosle a él: "De ti alzaron las alas los pájaros del canto / Todo te lo tragaste como la lejanía / Como el mar, como el tiempo / Todo en ti fue naufragio".


EL LAMENTO DE ORFEO -Poema mitológico.

Orfeo y Eurídice eran amantes. Una serpiente mordió en el bosque a Eurídice y la muchacha murió. Orfeo vagó desconsolado buscándola y no dudó en bajar a los Infiernos para recuperarla, a pesar de que sabía que quien entraba en los dominios de Hades, ya no podía salir de allí. Con los acentos de su lira conmovió a criaturas y almas de esos reinos, e incluso al mismísimo dios Hades, quien accedió a que Eurídice volviera con él. Pero hubo una condición: la muchacha caminaría tras Orfeo y él no podría mirarla hasta que no se hallasen en el mundo de los vivos. Muy cerca ya de la luz del sol, a Orfeo le traicionaron las dudas, las incertidumbres, los miedos, y quiso saber si Eurídice realmente lo seguía. Volvió la vista y contempló cómo Eurídice desaparecía como una sombra ante sus ojos.
¿Se trata, quizás, de la historia de amor más enternecedora de la mitología griega?

Lamento de Orfeo

Maldigo el momento en el que no tuve la convicción necesaria.
Maldigo el momento en el que me dominaron la debilidad y el miedo.
Maldigo el momento en el que me olvidé de seguir confiando en tu amor.
Maldigo el momento en el que tuve dudas.
Maldigo el momento en el que miré atrás.

Ese momento fugaz en el que te perdí…
No puedo ya volver por ti allá donde Tú estás.

Ahora, de ti nada me queda.
Sólo tengo mi lira,
que llora sin consuelo tu ausencia,
como lloro yo, Orfeo.


http://griegoantiguo.wordpress.com/2008/02/17/el-lamento-de-orfeo-poema-mitologico/

REQUIEM DE MIME

Zeus, Dánae y la lluvia de oro


La mitología griega nos ofrece amores exuberantes, y pocas veces ortodoxos. Tal es el caso de la historia de amor de 
Zeus, el que amontona las nubes, y la cautivaDánae; madre del héroe Perseo.

Dánae, cuyo nombre significa "sedienta" (Δανάη) era la hija más hermosa de Acrisio, señor de Argos. Su padre, atribulado por la falta de herederos varones, solicitó una entrevista con un oráculo para conocer el futuro de su estirpe. Allí se le informó que el hijo de Dánae lo asesinaría al alcanzar la madurez.

Acrisio, golpeado por la noticia de su futuro infortunio, pero más aún por la certeza de que moriría a manos de su nieto, resolvió encarcelar a Dánae para que jamás tenga contacto con hombre alguno. La encerró en lo alto de una torre inaccesible, donde era atendida por doncellas vírgenes y dos o tres eunucos. Los años fueron pasando en un lento olvido de la profecía. Dánae creció en cautiverio, ajena a las posibilidades del sexo. Incluso se dice que desconocía por completo el procedimiento por el cual una mujer queda embarazada.

Pero 
Zeus, el Señor del Olimpo, tenía otros planes.

Encantado por la belleza virginal de la joven, 
Zeus resolvió que debía poseerla. Descendió de los cielos en alas de la tormenta, y pronto supo que no podría acceder a la torre sin ser detectado. Una corte de doncellas vigilaban día y noche el paso a las habitaciones deDánae, que pasaba sus días en un perfecto desconocimiento de las intenciones lascivas del dios.

Cierto día, agotado por la espera, 
Zeus resolvió ingresar en el cuarto de Dánae como una ligera nube dorada. La joven dormía desnuda, con la piel blanquísima sobre un lecho inapelable. Podemos pensar que era hermosa.

Para no despertar sospechas, 
Zeus descendió sobre ella como una fina lluvia de oro. La amó de ese modo licuefacto, al igual que el viejo Urano sobre el vientre lúbrico de Gea, humedeciéndola suavemente como un rocío celestial que cae sin apresuramientos innecesarios.

Nueve meses después de aquel encuentro prodigioso, 
Dánae dio a luz a Perseo, el matador de la gorgona Medusa.

Turbado por el nacimiento del héroe, 
Acrisio arrojó a Dánae y a su hijo al mar, encerrados en un cofre de madera. Pero las aguas profundas, que responden a los deseos de Poseidón, calmaron su furia, y tanto la madre como su pequeño alcanzaron a salvo las costas de Serifos.

El muchacho se crió como un gran guerrero, tal como lo reclamaba su estirpe divina. Mató a 
Medusa y rescató a la enigmática Andrómeda. Acto seguido, el oráculo se confirmó en toda regla.

Perseo partió rápidamente hacia Larisa, donde se celebraban competencias atléticas.Acrisio estaba allí, y Perseo, accidentalmente -o fatalmente-, lo golpeó con su jabalina, cumpliendo de este modo la profecía del oráculo.

Poco se sabe sobre lo que sucedió entre 
Dánae y Zeus. El dios siempre fue inconstante en sus amoríos ilícitos, y sus amantes, casi siempre ilegítimas, solían encontrar un final indigno. En este sentido, Robert Graves, exégeta poético de los mitos griegos, señala una posibilidad menos divina para la gestación de Perseo, la cual habría sido mitificada para dar cierta legitimidad a su vinculación con Zeus.

Según Graves, aquella delgada lluvia de oro no sería otra cosa que el símbolo de un pago en monedas de oro por parte de Preto, rey de Tirinto y tío de Dánae, que semanalmente sobornaba a las doncellas que custodiaban la torre para saciar su lascivia en la virginidad de la muchacha, acaso demasiado aislada como para advertir algo ilícito en los abrazos innobles de su tío.

Zeus, por su parte, jamás inició litigio alguno por esta infamia; tal vez temiendo la ira implacable de la celosa Hera.


http://elespejogotico.blogspot.com.ar/2012/06/zeus-danae-y-la-lluvia-de-oro.html













The Bangles - Camina como un egipcio

Todas las antiguas pinturas en las tumbas,
hacen el baile de la arena, ¿no lo conoces?
Si se mueven demasiado rápido,
se caerán como un dominó.

Todos los hombres del bazar al lado del Nilo,
tiene su dinero metido en una apuesta.
Cocodrilos de oro,
chascan los dientes sobre tu cigarrillo,
Tipos (personas) extranjeros con cachimbas dicen: oh...

Camina como un egipcio.

Las camareras rubias se llevan sus bandejas,
giran y cruzan el suelo,
tienen la atención (the move),
se te cae la bebida,
entonces te traen más.

Todos los chicos de colegio, tan hartos de libros,
les gusta el punk y la banda de metal,
cuando suena el timbre,
caminan como un egipcio.
Todos los chicos en el mercado dicen: Oh...

Camina como un egipcio.

Desliza tus pies calle arriba, dobla la espalda,
tuerce tu brazo, luego lo echas para atrás.
La vida es dura, lo sé,
así que adopta la pose sobre un Cadillac.

Si quieres encontrar a todos los policías,
están pasando el rato en la tienda de donuts,
cantan y bailan,
hacen girar las porras, bajando la manzana (cruise down)

Todos los japoneses con sus yenes,
los chicos de fiesta llaman al Kremlin,
y los chinos lo saben,
caminan en línea como un egipcio,
todos los polis en la tienda de donuts dicen: Oh...

Camina como un egipcio,
camina como un egipcio.


Las Indias Galantes (suite), de Rameau



 Escuchemos Las Indias Galantes, una ópera-ballet que fue, de algún modo, una novedad por su temática y su estructura… La música es amable, ingeniosa, lógicamente bailable, variadísima… realmente deliciosa, en fin, cuarenta minutos del tipo de música necesaria para triunfar en los salones de la corte más ceremoniosa y protocolaria de que se tenga noticia, una música evocadora de otros tiempos y otras costumbres…
Vamos a seguir la Suite de las Indias Galantes en la versión de La Orquesta del Siglo XVIII, dirigida por Frans Brüggen. Se trata de una “Suite”, es decir, una selección de números de la obra, no la obra entera. Sí, ya sé que yo siempre pongo obras completas, pero en esta Suite se han eliminado los números cantados (en realidad, la mayoría son recitativos acompañados del clave), dejando sólo los números instrumentales, es decir, los dedicados al ballet.
En cuanto a la orquesta, se trata de una de tantas orquestas fundadas en toda Europa en los años setenta del siglo pasado, siguiendo las nuevas tendencias “historicistas”. La orquesta toca con instrumentos originales (o copias lo más perfectas posibles de los originales, porque originales-originales de verdad del Siglo XVIII… pues no hay tantos). En algún otro artículo anterior comenté que no tenía postura sobre si es mejor la música de los historicistas o los de tradición romántica… hay ocasiones, y obras, en que me gustan más las versiones de los unos, y otras, las de los otros. En este caso, el resultado de esta Orquesta del Siglo XVIII es excepcional. La música es deliciosa, el fruto de una época despreocupada, refinada, feliz y dedicada en cuerpo y alma a la galantería y el protocolo.
El argumento es sencillo: tras un prólogo de estructura muy formal y convenientemente mitológico (Hebe y Bellone, el amor y la guerra, tienen una confrontación muy educada que sirve como excusa a lo que viene a continuación), la obra se divide en cuatro actos que nos cuentan cuatro historias de amor galante que ocurren en “Las Indias”, lugar exótico y genérico que en el Siglo XVIII venía a significar “cualquier cosa fuera de Europa”. Los actos están ambientados respectivamente en Turquía, Perú, Persia y América del Norte; cuatro jóvenes de cuatro naciones “civilizadas” (y aliadas en la época): Francia, Italia, España y Polonia, son arrastrados a la guerra y acaban de no sé qué forma, supongo que por mediación de los dioses olímpicos, en “las Indias”, dando origen a cada uno de los cuatro actos.
La obra está dividida en tres videos con fotos fijas del Palacio de Versalles y sus jardines, fotos que al menos son adecuadas al tema. El primer video tiene el Prólogo, el segundo, los actos primero y segundo, y el tercer video, los actos tercero y cuarto.
Prólogo:
Comienza comme il faut, con una bella Ouverture, que, como toda buena obertura que se precie, da entrada a la obra; en el minuto 2:50 termina esta obertura y se produce la “Entrée des quatre nations” (Entrada de las cuatro naciones) donde los cuatro jóvenes de las cuatro diferentes naciones se presentan solemnemente al público.
Vienen a continuación una serie de piezas bailables, muy bailables. La primera, en el minuto 5:25, Air pour les esclaves africains (Aire para los esclavos africanos).[6] En el minuto 6:55, el Air vif (Aire vivo), donde el metal responde en canon a la cuerda en un alarde muy típico de Rameau. Sigue con una Musette en rondeau (Musette en corro; una musette es un tipo de danza barroca) en el minuto 8:55, pieza con una curiosa intervención de gaitas escocesas o irlandesas. En el minuto 10:10 viene el tranquilo Air pour les amants et les amantes (Aire para los amantes y las amantes) y en el minuto 11:20, un Air pour deux Polonais (Aire para dos polacos) en el que es fácil imaginarse a los susodichos polacos ataviados con sus chorreras y sus pelucas empolvadas haciéndose reverencias el uno al otro.
En el minuto 13:05 viene un minueto: Menuets I-II (Minuetos I-II; un minueto, o minué, es quizá la más característica danza barroca, ésa tan conocida en que las parejas van tomados por los deditos de la mano y se mueven por el salón como en un desfile y tal), y por fin, en el minuto 15:35, la vigorosa Contredanse final (la contradanza es otro tipo de danza barroca ejecutado por muchas parejas a la vez).
Tras esta última contradanza termina el Prólogo, y con él, el video. Para ver los dos actos siguientes (Le Turc généreux yLes Incas du Pérou), debemos cambiar de video:
Le Turc généreux (El Turco generoso) ocurre en cierta isla turca, y comienza con un corto Ritournelle pour le Turc généreux(Ritornelo para el Turco generoso, es decir, una especie de obertura para el acto). En el minuto 1:00 comienza la Forlane des Matelots (Forlane de los marineros; una forlane es otra danza barroca, claro está, que esta vez ejecutan los marineros turcos… no me imagino yo a los galeotes del Gran Turco bailando semejante danza, pero a los cortesanos franceses les debía parecer normal y todo…), y en el minuto 2:55, la última pieza de este acto, Tambourins I-II, una nueva y alocada danza de brillante factura que finaliza el acto, y que, para mi gusto, es de lo mejorcito de toda la obra. Oídla. Si conseguís no mover los pies mientras lo hacéis, enhorabuena. Bueno, o no.
En el minuto 4:30 comienza, sin solución de continuidad en el video, el tercer acto, Les Incas du Pérou (Los Incas del Perú, obviamente), el acto de mayor dramatismo de la obra, entendiendo “dramatismo” en el sentido wagneriano del término (aunque aún faltaran ochenta años para que naciera Richard Wagner) es decir, como “espectáculo total”, con los mayores alardes musicales y escenográficos posibles para representar la adoración del Sol y la erupción de un volcán en plena fiesta inca. Cómo se podría representar la erupción de un volcán en un escenario en 1735 es para mí un misterio.
El acto empieza inevitablemente con el inevitablemente corto Ritournelle pour les Incas du Pérou, de obvia traducción. En el minuto 5:33 está el Air des Incas (Aire de los Incas), con la gran solemnidad que el desfile del Gran Inca que se dirige al Templo del Sol requiere, y en el minuto 7:45, el Air pour l’adoration du soleil (Aire para la adoración del sol), con el ambiente necesariamente íntimo y recogido que es preciso para la ocasión. La última pieza del acto, en el minuto 10:05, es una nueva y espectacular gavota, otra danza barroca más: Gavottes I-II, que finaliza de forma brillante el acto… y el video.
Por fin, para ver los dos últimos actos (Les Fleurs y Les Sauvages), hay que cambiar de video:
Este tercer acto, Les Fleurs (Las Flores), tiene lugar durante la “Fiesta de las Flores” en algún lugar de Persia, y de forma sorprendente comienza con un nuevo ritornelo: Ritournelle pour la fête persane (Ritornelo para la fiesta persa), seguido en el minuto 1:05 de una Marche o Marcha para ambientar el desfile de los persas en su fiesta, y en el minuto 3:05, de un Air pour Zéphire (Aire para Zéphire, la protagonista del cuadro), donde la melodía de la flauta piccolo solista representa a la tal Zéphire enamorando a su amado. Apenas un minuto más tarde viene el Air pour Borée et la Rose (aire para Boreas y la Rosa), mucho más movido, que da fin al acto.
En el minuto 5:30 comienza el cuarto y último acto: Les Sauvages (Los Salvajes), acto que fue añadido con posterioridad a la obra, pues se estrenó ocho meses después del estreno de la obra en sí, para el que Rameau reutilizó música compuesta previamente. Sólo dos números tenemos de este acto en la Suite, pero ¡qué números, de lo mejor de toda la obra! En el minuto 5:30 está el magnífico Air pour les Sauvages (Aire para los salvajes), maravillosa pieza cuya base musical servirá para la Gran Danza de la Pipa de la Paz que cierra la obra y que no está en esta Suite, pues es una pieza cantada (la única de las piezas para voz realmente espectacular de la obra). A falta del canto de esta Gran Danza, el video se cierra con otra estupenda danza barroca, una chacona: Chaconne I-II, que comienza en el minuto 7:10. Cinco minutos perfectos de chacona para cerrar brillantemente la obra, y el video con ella.
Espero que os hayáis engalanado convenientemente para marcaros unos pasitos de baile, un baile muy galante, con la música de Rameau…

. http://eltamiz.com/elcedazo/2012/06/17/historia-de-un-ignorante-ma-non-troppo-las-indias-galantes-suite-de-rameau/

Carlos III, Amalia de Sajonia y el Himno español

Permitidme un pequeño off-topic, una curiosidad sobre el rey Carlos III y el abuelo de Federico Guillermo II de Prusia, también rey prusiano y con su mismo nombre: Federico Guillermo I de Prusia, apodado “El Rey Sargento”. Con ocasión de la boda de Carlos III con María Amalia de Sajonia, en 1738 (Carlos era por entonces Carlos VII de Nápoles, y María Amalia sólo tenía catorce años de edad), le regaló una pequeña marcha musical para pífanos y tambores, hay quien dice que compuesta por él mismo aunque no hay seguridad el respecto, conocida como la “Marcha de Granaderos”. A Carlos III le gustó, más por motivos sentimentales, por ser un regalo a su esposa, que musicales, y le gustaba oírla.

El matrimonio de Carlos y María Amalia era un matrimonio concertado, como casi todos los de la realeza, pero el caso es que se enamoraron perdidamente el uno de la otra y viceversa. Tras darle nada menos que trece hijos, de los que sólo siete llegaron a la edad adulta, Maria Amalia falleció en 1760, a los 36 años de edad, de tuberculosis. Carlos llegó a decir que “en 22 años de matrimonio, éste (su fallecimiento) es el único disgusto serio que me ha dado”.

A Carlos, la Marcha de Granaderos regalada por su tío político le recordaba siempre que la escuchaba a su querida difunta esposa, por lo que, para dar gusto al monarca, que para eso era monarca, se interpretaba cada vez que entraba o salía de Palacio… y de esta manera, de simple Marcha de Granaderos se convirtió en Marcha de Honor y, con el tiempo, en Marcha Real. En la actualidad es el himno nacional español, y ése es el motivo por el que es uno de los poquísimos himnos nacionales del mundo mundial que no tienen letra. Ninguna, pese a algunos loables esfuerzos para ponérsela.

Aún recuerdo, sonriéndome, las caras de los waterpolistas españoles cuando, tras ganar la medalla de oro en el Campeonato Mundial de Waterpolo de Fukuoka, Japón, en 2001, y tras la ceremonia de imposición de medallas, el locutor anunció por megafonía que “había un problema técnico con el sistema de reproducción de himnos”, y solicitaba amablemente, en inglés, claro, que “los propios jugadores entonaran el himno nacional”… Naturalmente, tras unos instantes de confusión (seguramente debido al endémico escaso conocimiento de la lengua de Shakespeare que tenemos los de aquí), los jugadores se arrancaron, entre visibles muestras de chufla y chirigota, con un “chunda-chunda-tachunda-chunda-chunda-chúuun….”.

Los educados y siempre protocolarios japoneses, lo mismo que los yugoslavos y rusos que compartían podio con los españoles, todos ellos se quedaron perplejos, y me imagino que todo aquel desconocedor de la circunstancia que vio aquello debió colegir que “estos españoles están locos”. Que también, pero esta vez había sus motivos.

http://eltamiz.com/elcedazo/2011/12/19/historia-de-un-ignorante-ma-non-troppo%E2%80%A6-quinteto-de-guitarra-num-4-%E2%80%9Cfandango%E2%80%9D-de-boccherini/

Tributo a mi segunda patria, gracias a mi abuelo Venancio, leonés, nacido en Tombrio de Abajo...


Quinteto de guitarra núm. 4, “Fandango”, de Boccherini

Un Quinteto de Guitarra es una composición de cámara escrita para un conjunto de cinco instrumentos, de los que cuatro de ellos son normalmente el típico cuarteto de cuerda (dos violines, una viola y un cello), y el otro es una guitarra. No es un concierto para guitarra y cuarteto de cuerda, es decir, la guitarra no tiene en general un papel preponderante en la obra, sino que es un instrumento más en la composición, que en ocasiones se trata como un instrumento puramente armónico y rítmico acompañando a la cuerda de arco, en ocasiones amalgamándose con las cuerdas para aportar su especial cualidad tímbrica, y en ocasiones, por fin, como instrumento puramente solista… Ahora bien, como en cualquier caso tiene una sonoridad completamente distinta del resto de instrumentos de cuerda frotada, la guitarra da bastante juego en el marco de la obra. Ahora lo veremos.
De los ocho Quintetos de Guitarra que han llegado intactos hasta nuestros días, los dos más conocidos son el número 9, “La Ritirata de Madrid”,[8] y el número 4 “Fandango”. El resto son igualmente deliciosos, que los tengo todos en disco, pero vamos a escuchar precisamente el “Fandango”. Alguno había que elegir, y éste es especialmente bonito, pues su último movimiento es eso: un fandango que incluso necesita percusión (castañuelas, naturalmente, y sistro, una especie de antiquísima pandereta oriental) y en él se distinguen más de lo habitual esos rasgos españoles que tantas veces se encuentran en la música de Luigi Boccherini. Todos ellos fueron compuestos en algún momento de la década de los noventa del Siglo XVIII, pues en 1798, tras la pérdida del patrocinio de la Duquesa de Osuna, se los ofreció a su editor parisino, Pleyel, para su publicación. Se desconoce cuánto dinero le reportó, pero seguramente sería más bien poco.
El Quinteto “El Fandango” proviene originalmente de dos quintetos para dos cellos, donde uno de los cellos ha sido sustituido por la guitarra. Tiene tres movimientos y viene a durar en total unos diecisiete minutos. La versión que escucharemos es la de Pepe Romero a la guitarra con un Conjunto de músicos de la Academy of St. Martin in the Fields, en concreto Iona Brown y Malcolm Latchem, violines, Stephen Singles, viola, y Denis Vigay en el papel de Boccherini, digo… en el cello. Ah, y Tristan Fry a las castañuelas y el sistro, que no se me olvide. Quizá hubiera sido mejor ver a Pepe Romero y a sus compañeros divirtiéndose mientras tocan el fandango, pero, por una vez y sin que sirva de precedente, se trata de un video (en realidad son dos videos, pues la obra no cabe en uno solo) de fotos fijas de vistas del Madrid antiguo que es realmente maravilloso, En definitiva, una delicia de video, y una delicia de música, de la que poco hay que comentar. Es preciosa.
Esta Pastoral, o pieza de temática pastoril o bucólica, muy de moda durante toda la época barroca y clásica, es un tema tranquilo y muy de virtuoso, donde la voz cantante la llevan los violines con sordina. La guitarra es casi siempre un acompañamiento del resto de instrumentos, aunque tiene también su parte solista, intercambiando papeles con violines, viola y cello.
Con los suaves acordes de la guitarra termina la pastoral en el minuto 4:35, y comienza el segundo movimiento, Allegro maestoso, en el que la guitarra apenas tiene papel solista, y en cambio lo tiene el cello, el omnipresente cello del virtuoso Boccherini. Aun llamándose Allegro maestoso, no es un movimiento tan majestuoso como podría parecer por el título. Es un movimiento amable, elegante, sencillo y muy lírico, muy “de Boccherini”, justamente famoso por la elegancia galante de sus composiciones.
Comienza con una introducción lenta (grave), con bastante protagonismo de la guitarra, introducción que se demora hasta el minuto 1:25, en que comienza el fandango propiamente dicho, con un evidente cambio de ritmo… y de alegría. Todofandango que se precie se basa en las repeticiones del mismo tema, en lo que musicalmente se conoce como ostinato, y aquí no va a ser menos. Boccherini exige el uso de elementos de percusión (sistro y castañuelas) porque en los fandangos tradicionales eran parte indispensable de la música, para ayudar a marcar el ritmo de los danzantes, o sea, en puridad no es el Fandango un quinteto, sino un sexteto para guitarra y percusión… disfrutemos de la danza, precursora del fandango aflamencao que es hoy uno de los palos de ese españolísimo flamenco declarado recientemente Patrimonio de la Humanidad.
De momento, vemos que el protagonismo de la música la llevan los violines, con la guitarra marcando el ritmo, con rotundos rasgueos de tanto en cuando, pero en el minuto 2:30 se produce un precioso dúo de guitarra y cello, marca de la casa Boccherini… y así sigue el baile. Sobre el minuto 3:40 se producen cuatro espectaculares glissandos descendentes del cello, acompañados del repicar de la pandereta (el sistro) que merece la pena remarcar; sobre el minuto 4:40 hay un bello solo de guitarra seguido de otro de cello… Por fin en el minuto 5:30 se produce la primera intervención de la percusión tan española de las castañuelas, que ya no nos abandonarán con su repiqueteo hasta el final del fandango.



sábado, 30 de agosto de 2014

Rima XXX - Gustavo Adolfo Becquer 

Asomaba a sus ojos una lágrima
 y a mi labio una frase de perdón;
habló el orgullo y se enjugó su llanto
 y la frase en mis labios expiró.

Yo voy por un camino, ella por otro;
pero al pensar en nuestro mutuo amor,
yo digo aún: «¿Por qué callé aquel día?»

Y ella dirá: «¿Por qué no lloré yo?»


SINCRONICIDAD: nada es casual...

Le sucedió a un actor joven, pero ya no tanto. Su nombre? Anthony Hopkins. Acababa de ser contratado para filmar "La mujer de Petrovka". Además del guión, quería leer la novela original de George Feifer. Fue estéril buscarla en las librerías: estaba agotada. Desalentado, se acomodó en un asiento del andén del metro a esperar el tren, y en el hueco del respaldo vio un libro. Sí: un viejo ejemplar de aquella novela, lleno de anotaciones en los márgenes! Mera coincidencia? Parece imposible. Pero algo más sucedió que tiraría por tierra el concepto de "casualidad": dos años más tarde, ya en el rodaje del film, Hopkins conoció a Feifer, el autor. En un entretiempo, Feifer se lamentó de haber perdido el último ejemplar de su novela, en donde había hecho numerosas anotaciones para cuando la película se rodara. Hopkins palideció: sí... era el de la estación del metro!

Carl Jung, junto con el Premio Nobel de Física Wolfgang Pauli, llamaron a estas coincidencias significativas SINCRONICIDAD: eventos que parecen ser la expresión en el mundo externo de algo profundo que se mueve en nuestro interior en determinados momentos, como si el adentro y el afuera desdibujaran sus fronteras, y los hechos se manifestaran asombrosamente entrelazados.
La resultante puede ser una exaltación del espíritu: la intuición de que quizás el caos que parece constituir la realidad tenga un orden que no llegamos a ver, salvo en estos momentos extraordinarios.
David Peat lo dijo así: "Es posible que detrás de los fenómenos del mundo material haya un orden generativo y formativo llamado Inteligencia Objetiva". Otro físico hablando como si fuera un místico!

No, no es casualidad; pero tampoco es causalidad, pues estos hechos no se causan el uno al otro, sino que están ligados por su significado, como si la Vida misma quisiera hablarnos en su propio idioma: el del Misterio. Los seres humanos y los hechos nos entrecruzamos como los hilos de un complejo tapiz. Pero nuestra percepción es limitada, y sólo vemos el reverso del bordado, sin poder comprender cabalmente su dibujo. Quizás volverse sabio sea cruzar hacia el otro lado y ver que en el Gran Tapiz aquello que nos parecían caprichos del destino son nudos necesarios para poder dar una nueva puntada...

El I Ching -un libro chino con más de 4.000 años de antigüedad, fundamentado en el principio de la Sincronicidad- fue prologado en una de sus versiones por Jung. En su versión hispana incluye también un poema de Jorge Luis Borges, que dice así (para quienes no conozcan la palabra "ergástula", significa "cárcel")...

"El porvenir es tan irrevocable
como el rígido ayer. No hay una cosa
que no sea una letra silenciosa
de la eterna escritura indescifrable
cuyo libro es el tiempo. Quien se aleja
de su casa, ya ha vuelto. Nuestra vida
es la senda futura y recorrida.
El rigor ha tejido la madeja.
No te arredres. La ergástula es oscura,
la firme trama es de incesante hierro,
pero en algún recodo de tu encierro
puede haber una luz, una hendidura.
El camino es fatal como la flecha,
pero en las grietas está Dios, que acecha."

http://www.vivisophia.com/index.php?option=com_content&view=article&id=2961:sincronicidad-nada-es-casual&catid=40:virginia-gawel-la-vida-como-camino&Itemid=72



Poesía y danza - Pedro González.

Si los pies, las manos, el cuerpo y la conciencia
emparejas con el ritmo. El movimiento,
el espacio y el sentimiento,
sueñas olvidar tus recuerdos.
Y danzas en un tiempo robado a la eternidad
que no pertenece a este universo.
Es atrevimiento quererlo sintetizar.
No se puede en palabras encerrar
el olor, el sabor, el timbre de los besos.


Danza sincronizada

 

Canciones con historia: "Hound Dog" Elvis Presley


"Hound Dog", fue estrenada en 1952 y cuatro años después fue número uno en las listas durante siete semanas, en la versión que cantaba Elvis. La original "Hound Dog", fue grabada por Willie Mae "Big Mama" Thornton. La versión de Elvis fue un gran éxito y se vendieron casi dos millones de copias. Lamentablemente, "Big Mama" Thornton apenas recogió beneficios que legítimamente merecía.

 Un joven llamado Elvis Presley tocaba en Las Vegas y un día asiste a un hotel para ver un espectáculo. El grupo en el escenario era Freddie Bell and the Bellboys. Ellos hacían una versión de "Hound Dog", más rockera. 
https://www.youtube.com/watch?v=fJQ-fDb4M4s



El 1 de julio de 1956. El presentador de televisión Steve Allen presentó a Elvis de 21 años de edad, como la estrella invitada en su programa de televisión The Steve Allen Show. 

Elvis ”Hound Dog”

https://www.youtube.com/watch?v=n2MuH6nhZMA


Elvis llamó a este suceso "el momento más embarazoso" de su carrera, apareció, cantando "Hound Dog" a un perro de aspecto aburrido llamado Sherlock. Al día siguiente (2 de julio de 1956) después del show de Steve Allen , Elvis fue a los estudios de RCA y tras 31 tomas consiguió la versión que el buscaba de "Hound Dog", transformó un diamante en bruto en una piedra perfectamente pulida.

El mánager de Elvis, Tom Parker, bromeó con los ejecutivos de RCA que la canción iba a ser tan grande que la empresa tendría que cambiar su símbolo del "Perro Victor" al perro de "Hound Dog". 

Cuando "Hound Dog", fue finalmente publicado en julio de 1956, iba como cara B del single,  "Don't be cruel", esta canción llegó al número 1 en las listas de Rhythm and blues del país. Pero pronto, "Hound Dog" se convirtió en número 1 en las listas de música pop. 

Por primera vez las dos caras de una grabación, llegaban al número uno de las listas. Elvis añadió "Hound Dog" a su repertorio, y la utilizaba como la canción final de todos sus shows en vivo. 

http://intrinsecoyespectorante.blogspot.com.ar/2012/10/la-historia-del-clasico-de-elvis-hound.html



Sueña – Luis Miguel


Sueña
con un mañana
un mundo nuevo
debe llegar
Ten fé
es muy posible
si tú estás
decidido
Sueña
que no existen fronteras
y amor sin barreras
no mires atrás
Vive
con la emoción
de volver a sentir, a vivir
la paz
Siembra
en tu camino
un nuevo destino
y el sol brillará
Donde
las almas se unan en luz
la bondad y el amor
renacerán
Y el día que encontremos
ese sueño cambiarás
no habrá nadie que destruya 
de tu alma la verdad
Ten fé
es muy posible
si tú estás
decidido
Sueña
con un mundo distinto
donde todos los días
el sol brillará
Donde
las almas se unan en luz
la bondad y el amor
renacerán
Sueña, sueña tú...
Sueña


El jorobado de Notre Dame (película de 1996)

El jorobado de Notre Dame es una película de animación dirigida porGary Trousdale y Kirk Wise, producida por Walt Disney Pictures y estrenada el 21 de junio de 1996. La película es una adaptación de la obra literaria francesa Nuestra Señora de París, escrita por Víctor Hugo.
Tiene una secuela directo a video llamada El jorobado de Notre Dame 2: El secreto de la campana.

Quasimodo

Quasimodo es el personaje principal de la obra Nuestra Señora de París, de Victor Hugo.

Descripción

Era un niño jorobado que fue abandonado al nacer cerca de la catedral de Nuestra Señora de París, y habitaba en la catedral de Notre Dame, tocando las campanas. Supuestamente era hijo de una gitana. Sólo podía utilizar un ojo, ya que el otro lo tenía casi bloqueado por la deformidad de su rostro, y quedó casi sordo por el tañir de las campanas de la catedral, de los cuales él se encargaba y las cuales significaban todo para él antes de conocer a la mujer gitana Esmeralda, de quien se enamora por ser ella la primera que le mostró bondad.
Quasimodo era odiado por el pueblo de París por causa de su deformidad, gracias a lo cual posee un carácter tímido y retraído. Sin embargo, posee una gran valentía, astucia y un corazón noble. Antes de Esmeralda, la única persona importante para él era el archidiácono Frollo, quien lo adoptó cuando fue abandonado en la catedral entre los niños expósitos.
Durante las acciones más importantes de la novela, él aún no ha cumplido los veinte años. Victor Hugo lo describe físicamente como un hombre de gran tamaño y fuerza y una gran agilidad a pesar de sus defectos físicos, la cual podría ser el producto del ejercicio que realiza constantemente trepando por las torres de Nôtre Dame y los techos de los alrededores, si bien no sale mucho de la catedral. Su cabello es muy rojizo y, si bien no se lo aclara en el libro, se ha interpretado que sus ojos podían ser azules. Por esto se cree que tal vez no era hijo de una gitana, sino que había sido raptado por una o, quizás, dejado a su cuidado.
El final de Quasimodo es sumamente dramático: cuando ve, desde lo alto de Notre Dame, que Esmeralda es asesinada y él no podrá llegar a tiempo para salvarla, su alma se entristece y decide morir junto a ella después de asesinar al cruel archidiácono que la asesinó.
Una de las características más importantes sobre él es el cariño que siente por la catedral Notre Dame de París, en donde vive. Victor Hugo describe esta relación como si el campanero y la catedral fueran una sola alma unificada. Es allí en donde Quasimodo tiene su refugio del mundo que lo repudia injustamente.
Es sin duda uno de los personajes más importantes en la literatura francesa (y la literatura en general). Su historia ha llamado la atención de diversos directores que han adaptado Nuestra Señora de París al cine. Incluso Disney hizo en los noventa su propia versión de la historia, llamada El jorobado de Notre Dame, en donde se resalta el lado sensible y el buen corazón del personaje. Esta película infantil revela la pureza en el alma de Quasimodo, adornando al personaje con buenas actitudes, además de modificar el final de la obra, encontrándose Quasimodo y Esmeralda vivos.

Etimología

Quasimodo significa casi hecho, en latín.

Wikipedia

El jorobado de Notre Dame

El jorobado de Notre Dame - Banda sonido original
https://www.youtube.com/playlist?list=PLF45C6A46FBE37D78