lunes, 7 de julio de 2014

Pozo artesiano en lo más profundo de mi verdadero Ser que durante mucho tiempo me costó destapar y dejar fluír... 

El Ego lo obstruía permanentemente para intentar evita sufrir.

Pero quien cierra el corazón no sólo no sufre: no ama, no goza, no disfruta y acaba no sintiendo nada...

El crecimiento duele, pero sólo en los fracasos y las pérdidas se aprende: nuestros éxitos sólo confirman nuestros fantasmas, y no ayudan a atravesarlos y superarlos.
"En lo profundo de mi ser hay una fuente infinita de amor. Ahora permito que este amor aflore a la superficie. Este amor llena mi corazón, mi mente, mi conciencia, mi ser, e irradia en todas las direcciones y retorna a mí multiplicado. Cuanto más amor utilizo y doy, más tengo para dar; la provisión es infinita. El empleo del amor me hace sentir bien." Louise Hay

El amor, la mejor medicina para todos los males


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