La experiencia del “Sturm und Drang” fue decisiva para la
música europea, en pro de la nueva concepción de la música culta, y que el
célebre teórico Heinrich Cristoph Koch, en suMusicalisches
Lexikondel 1802, sintetizaba
así: “La expresión de los sentimientos, en sus más variadas manifestaciones, es
lo verdadero, el último fin de la música y por esa razón el primero, requisito
fundamental de cada músico (...) La manifestación de nuestros sentimientos
(...) es una consecuencia de la representación de cuanto sentimos en nuestro
corazón.” Estos son algunos de los principales rasgos del “Sturm und Drang”, la
selección de tonalidades menores, el redescubrimiento del contrapunto, una
armonía clara, sin que ello implique un alejamiento del cromatismo tan
recurrente en la música de Bach, el empleo de la dinámica —cada vez más
evidente y desesperada— esquemas rítmicos sincopados, así como la presentación
temática al unísono por parte de toda la orquesta, son esos algunos medios que
ostensiblemente hallamos en las obras de Franz Joseph Haydn.
A Franz Joseph Haydn (Rohrau,31 de marzode1732Viena,31 de mayode1809), junto con Mozart y Beethoven, se le
considera uno de los máximos exponentes del clasicismo vienés. Asimismo se le
distingue como el "padre" de la sinfonía e intrétpido renovador de la
sonata para piano y del cuarteto de cuerda.Su
obra, prolífica, contiene sinfonías, conciertos, música de cámara, obras
vocales y corales, misas y oratorios, entre otros géneros como lasStüke für Spieluhr.
En sus postreros años vieneses Haydn se dedicó a la
composición de misas y oratorios, comoLas
sieteúltimas palabras de
Cristo en la cruz(1796), con
texto del barón Gottfried van Swieten,La
Creación(1798)y Las Estaciones(1801).
Fue
en su segundo viaje a Londres cuando Haydn conoció el texto que le serviría
paraLa Creación.Setrata
de una adaptación deParadise
Lost(1663) (El Paraíso
perdido)del insigne poeta
británico John Milton; (sin duda alguna lagran
obra miltonianaque le ha
merecido fama internacional)—..El
Paraíso perdidoes una vasta
producción, tan épica como ditirámbica, que nos introduce a una visión muy
particular, compleja y gloriosa, de la Creación partiendo del relato del Génesis.Haydn solicitó de su amigo el barón
van Swieten la traducción del texto de Milton al alemán.
EnLa Creaciónde Haydn es relatada por los ángeles
Gabriel, Uriel y Rafael. Cuanto se creó en los seis días —en el séptimo Dios
descansó— se describe de forma concisa, breve y detallada, primeramente
(recitativos) para ser glosado a continuación (arias, dúos...). El final de
cada uno de los días es halagado y festejado por los coros de las milicias
celestiales (coro).
En
el final de la segunda parte se describe el cenit de la obra de Dios: la
creación del hombre.
La
tercera parte de la obra es una gran conclusión en la qué se narra la vida
placentera de nuestros primeros padres Adán y Eva, en el Paraíso.
«La
tensión fundamental del oratorio comprende desde la presentación del caos antes
de aparecer la luz de la razón, hasta la armonía pura, principio del tercer
acto (tres flautas, símbolo de la armonía y de la Trinidad)», según el director
de orquesta Jordi Mora.
Casi
tres años es lo que le comportó la elaboración de la partitura. A modo de
apostilla diremos que antes de comenzar a componer, se arrodillaba y pedía luz
y fuerza al Señor.Die
Schöpfung se
estrenó el 29 de
Abril de 1798 bajo la dirección del propio Haydn.
«Esta
sorprendente obra —comenta el maestro Mora— es como un homenaje haydiniano a la
tradición barroca, donde se combinan genialmente la sencillez de los temas con
el más elaborado contrapunto utilizando además una cuidada y original
instrumentación. La Creación es el triunfo de la delicada combinación entre
simplicidad y calidad, el lenguaje musical es aquí tan universal como
comprensible, a semejanza del que Mozart obtuvo conDie Zauberflöte(La Flauta Mágica). Tras una
posible prohibición de ejecución, del oratorio que nos ocupa, en las iglesias,
por parte de un presbítero, Haydn argumentó “estoy convencido que tras escucharLa Creación, los corazones de
muchas personas estarán más movidos que después de oír un sermón de ese
personaje”».
El día27 de marzode1808en
Viena asistió Haydn a una audición deLa
Creacióndirigida porAntonio Saliericon el texto en italiano. En el teatro
había una delegación de músicos entre los que se encontrabaBeethoven.
http://www.filomusica.com/filo79/haydn.html
martes, 27 de enero de 2015
Canciones con historia: C’est La Vie - Emerson, Lake & Palmer
Es una balada increíblemente sensible, una canción que me recuerda a mi niñez, una canción que fue la banda sonora de muchas ardientes noches en todo el mundo, allí a finales de los 70. “C’est La Vie” es una balada del grupo de rock progresivo británico Emerson, Lake & Palmer, también conocido como ELP. “C’est La Vie" forma parte de su sexto álbum titulado Works 1, un disco que tardó años en ver la luz por su complejidad y por la particularidad de un cambio de estilo hacia el rock sinfónico donde Works 1 y 2 tenía reservada una cara de disco para las obras de cada componente del grupo.
La idea de tal hazaña fue de Keith Emerson, líder del grupo, que se estrelló desgraciadamente e inmerecidamente en el muro de rechazo de los fans. El doble álbum Works fue un total fracaso que influyó en la separación del grupo, sin embargo, “C’est La Vie” aunque no logró un éxito instantáneo, con el tiempo se hizo un hueco en el corazón de los melómanos de todo el mundo. :
C'est la vie (Así es la vida)
C'est la vie,
Todas tus hojas se volvieron marrón,
Las esparcirás a tu alrededor,
C'est la vie.
¿Amas?
¿Y cómo quieres que lo sepa?
Si no dejas que tu amor se me manifieste,
C'est la vie.
Oh, c'est la vie,
Oh, c'est la vie,
Quién sabe, quién se preocupa por mí,
C'est la vie.
En la noche
¿Luchas con el fuego de un amante?
¿Las cenizas del deseo por ti, se quedan?
Como el mar
Hay un amor tan profundo que no se puede mostrar,
Necesitó una tormenta antes que mi amor,
Fluyó por ti,
C'est la vie
Oh, c'est la vie,
Oh, c'est la vie,
Quién sabe, quién se preocupa por mí,
C'est la vie.
Como una canción
Fuera de tono y fuera de tiempo,
Todo lo que necesitaba era una rima para ti,
C'est la vie.
¿Ofreces?
¿Vives el día a día?
No hay canción que no pueda tocar para ti,
C'est la vie.
Oh, c'est la vie,
Oh, c'est la vie,
Quién sabe, quién se preocupa por mí,
C'est la vie.
CANCIÓN DE LA VIDA PROFUNDA - Porfirio Barba Jacob
El hombre es una cosa vana, variable y ondeante...
MONTAIGNE
Hay días en que somos tan móviles, tan móviles,
como las leves briznas al viento y al azar.
Tal vez bajo otro cielo la Gloria nos sonríe.
La vida es clara, undívaga, y abierta como un mar.
Y hay días en que somos tan fértiles, tan fértiles,
como en abril el campo, que tiembla de pasión:
bajo el influjo próvido de espirituales lluvias,
el alma está brotando florestas de ilusión.
Y hay días en que somos tan sórdidos, tan sórdidos,
como la entraña obscura de oscuro pedernal:
la noche nos sorprende, con sus profusas lámparas,
en rútiles monedas tasando el Bien y el Mal.
Y hay días en que somos tan plácidos, tan plácidos...
(¡niñez en el crepúsculo! ¡Lagunas de zafir!)
que un verso, un trino, un monte, un pájaro que cruza,
y hasta las propias penas nos hacen sonreír.
Y hay días en que somos tan lúbricos, tan lúbricos,
que nos depara en vano su carne la mujer:
tras de ceñir un talle y acariciar un seno,
la redondez de un fruto nos vuelve a estremecer.
Y hay días en que somos tan lúgubres, tan lúgubres,
como en las noches lúgubres el llanto del pinar.
El alma gime entonces bajo el dolor del mundo,
y acaso ni Dios mismo nos puede consolar.
Mas hay también ¡Oh Tierra! un día... un día... un día...
en que levamos anclas para jamás volver...
Un día en que discurren vientos ineluctables
¡un día en que ya nadie nos puede retener!
Bela Bártok: El primer concierto para piano
«Si el lector tiene la inquietud decompraralguna de las
composiciones de Bartók, encontrará que todas y cada una ellas consisten en un
conjunto desordenado de notas sin significado, brindando la imagen como si el
compositor se paseara sobre el teclado en botas. Algunas obras pueden ser
tocadas mejor con los codos, otras con la palma de la mano. Ninguna de sus
obras requiere de dedos para interpretarlas o de oídos para escucharlas»,
escribía un crítico musical cuyo nombre prefiero ignorar. Hago esta cita para enmarcar el menos
apreciado de los tres conciertos. Este tipo de comentarios eran comunes en la
Europa contemporánea a nuestro autor; en vida, la obra y el arte deBéla Bartókfueron poco apreciados. Empujado
por las vicisitudes, la pobreza y la enfermedad, la vida de este gran maestro
fue truncada en plenitud de su capacidad creadora, quizás demasiado pronto,
cuando su reconocimiento empezaba a surgir. Tal como cité en la entrega anterior, los tres
conciertos para piano de Bartók fueron obras utilitarias y de supervivencia
para ganarse la vida como artista. El primero no sería una excepción. En
términos creativos, el conjunto abarca la mayoría de sus estilos de
composición, sin embargo éste es quizás el más seco, difícil técnicamente y el
menos melódico del conjunto. Esta obra surge a principios de 1926, cuando
Bartók estaba en medio de una sequía creativa que ya duraba tres años. Durante
este período, básicamente, no había compuesto nada, salvo algunos arreglos o
reducciones para piano de obras tempranas. Durante ese período alternó su
tiempo ganándose la vida como pianista concertante y realizando constantes
incursiones en la campiña húngara, fonógrafo al hombro, grabando, estudiando,
analizando y sistematizando el folclore de su amada patria.
Siempre Bach
No fue hasta finales de 1926 que surgieron a
la luz un conjunto de obras de la pluma de Bartók, la mayoría de ellas para
piano solo, más suPrimer
concierto para pianoy elTercer
cuarteto para cuerdas.En las
notas que escribí para el blog Quinoff a propósito de los cuartetos, razonaba
que este Tercer cuarteto es el más abstracto y minimalista de los seis: «Una
década completa pasa entre elSegundoy elTercer cuarteto para cuerdas.Acá la madurez de Bartók es total
y ya está en la cúspide de sus habilidades creativas. Compuesto (elTercercuarteto) en 1926…, la obra está
construida formalmente en dos partes, mas sin embargo, con subdivisiones en
ambas, así que para muchos, la obra posee cuatro movimientos. Esta increíble
obra es la más breve en tiempo de duración, y está estructurada sobre la base
de células temáticas pequeñas y muy concentradas, en el estilo de Webern, con
una gran tensión en los cromatismos, particularmente en la coda final». Hago la referencia alTercercuarteto porque esta obra presenta
aspectos que condicionan el estilo delPrimerconcierto. El estilo que se
integra en ambas obras revela una faceta adicional: en esos días Bartók estaba
estudiando mucho la música barroca en general, y la de Bach en particular, y
más concretamenteEl arte de
la fuga, cuya influencia sería muy notable en la expresión de muchas de las
obras escritas entre 1926 y 1930.
Pocas notas en una estructura magistral
Al
igual que elTercercuarteto, los temas musicales en
elPrimer concierto para pianose reducen a un mínimo de notas,
algunas veces reducida a una sola y aislada, la cual es repetida
insistentemente en intervalos de octavas o incluso (segundo movimiento) a una
escala ascendente simple. Hay sin embargo, un notable manejo contrapuntístico
de las ideas, en las cuales cada segmento recibe un tratamiento completo y
cohesivo teniendo como aglutinador fundamental la presencia constante de ideas
musicales folclóricas. El piano, como en casi toda la obra de Bartók,
es tratado básicamente como un complejo instrumento de percusión, en el cual el
ritmo tiene prioridad aparente frente a la melodía, lo cual exige del pianista
una capacidad de expresar la melodía subyacente dentro de expresión de la
música. Acá, demasiado frecuentemente y por desgracia, muchos pianistas,
algunos muy famosos, naufragan miserablemente, enfatizando la técnica sobre la
expresividad. El primer movimiento gravita sobre dos temas
básicos, simples, de no más de siete notas repartidas en escalas ascendentes,
los cuales son acentuados por un constante ostinato en los timbales y un eco
melódico en los cornos, este escenario es desarrollado en células cromáticas
disonantes en los bronces, acá el aglutinante entre los dos temas es entretejido
con reelaboraciones armónicas de material folclórico. El segundo movimiento es sencillamente genial,
es uno de los muchos casos de «música nocturna bartokiana». La orquestación en
esta sección de la obra es mínima y se reduce al piano, algunos instrumentos de
viento y la percusión. En este contexto, el contraste con el tercer movimiento
es espectacular, en el cual con pocas ideas temáticas se desarrolla una
construcción armónica frenética, mezclándose y yuxtaponiéndose varios ritmos de
danzas folclóricas húngaras. El estreno de la obra se llevo a cabo en el
Quinto Festival Internacional de la Sociedad Internacional de la Música
Contemporánea, en Frankfurt, el 1 de julio de 1927, con el compositor como
solista y con Wilhelm Furtwängler dirigiendo (en esa ocasión, el asistente del
mítico director fue Jascha Horenstein). Laprémièreen EEUU estaba programada para ser
realizada por Willem Mengelberg con la New York Philharmonic, pero fue
cancelada en el último momento porque no se pudieron completar el número de
ensayos suficientes para garantizar la interpretación de una obra que el propio
director definió como «extremadamente difícil». No fue sino hasta el 13 de
febrero de 1928 que la obra fue interpretada en EEUU, en el mítico Carnegie
Hall de New York, con Fritz Reiner dirigiendo a la Cincinnati Symphony
Orchestra y el propio Bartók como pianista. El mismo compositor escribió una auto-crítica
del concierto: «A mi primer concierto lo considero una obra exitosa en su
construcción y expresividad, aunque su estilo musical es muy difícil y quizás
es más complicado para los colegas de la orquesta que para el público». En mi
humilde valoración, la obra es bellísima y original aunque en general es
extremadamente disonante, de expresión seca y mecánica, se requiere de un
tallador de diamantes para hacerla brillar como se merece. En mucho, la escasa
imaginación con que algunos intérpretes enfrentan esta obra, subrayando lo
rítmico e infravalorando su lirismo es lo que ha complicado notablemente su
aceptación por el público.
Sergéi Sergéievich Prokofiev fue advertido muy tempranamente de que si
pretendía convertirse en el mejor representante de la escuela de composición
soviética de la primera mitad del siglo pasado, más de un problema iba a tener
con la autoridad y el orden establecido. A la edad de ocho años, el autor que
más tarde va a conjugar tradición y modernidad de manera ejemplar, ya había
compuesto su primera ópera, tituladaGigante.
Al final de la obra, el gigante vence a un rey muy poderoso, solución
argumental que no gustó nada a su progenitor, quien recomendó quitar esa parte
pues no convenía a una época manifiestamente monárquica. Según nos cuenta la
madre del compositor, Sergéi no hizo caso a tales sugerencias y la obra se estrenó
en casa de un tío, sin alteraciones de libreto.
Nacido en 1891 en el pequeño pueblo ucraniano de Sonsovka, el pequeño Sergéi no
escatimó las muestras de talento hasta que sus padres, un ingeniero agrónomo y
una madre pianista, decidieron su ingreso al Conservatorio de San Petersburgo,
poco antes de que Sergéi cumpliera los catorce años. Entre sus maestros se
contaba a Rimski-Korsakov, por ese entonces la estrella del Conservatorio, pero
de cuyas clases Prokofiev no sacó ningún provecho, saliendo apenas airoso de
los exámenes. Los cursos se le hacían insufribles y superfluos. Por lo mismo,
Prokofiev abandonó los estudios formales a los dieciocho años después de
recibir el singular diploma de "artista libre", debido, por una
parte, a su audacia compositiva y por otra, a una permanente incomprensión
recíproca con sus maestros.
Sin embargo, dos
maestros del mismo Conservatorio lo dotarán más tarde de un sólido bagaje
musical, fruto de cinco años de ininterrumpidas lecciones. Ya no es un
desconocido en San Petersburgo. Se le reconoce como un revolucionario por sus
ideas musicales a lo que se une cierta intransigencia debido a su juventud. Sin
embargo sus predilecciones musicales no lo llevarán todavía por el camino del
modernismo. Preguntado en esos años por sus autores favoritos, Prokofiev
nombrará a Tchaikovski, Wagner y Grieg.
Durante los años previos a la Revolución de Octubre, Sergéi no se encontraba
especialmente preocupado por la marcha de los acontecimientos, y ante el
estallido de la revolución, respondió con una pequeña cantata para tenor, coro
y orquesta tituladaSiete, son siete. En 1918 abandonará Rusia, antes que
nada porque entiende que un país en plena revolución no es el ambiente más
propicio para componer. El término de su largo periplo por EEUU y Europa
obedece a razones parecidas. En 1927 había oído que el artista soviético,
exento de preocupaciones materiales, podía dedicar todo su tiempo a la
creación. Nueve años más tarde se afincará definitivamente en Moscú, casado con
una cantante española, padre de dos hijos, y reconocido autor de una vasta obra
instrumental y orquestal, de cámara, ópera y ballet.
Llega en un buen momento porque pese a sus flirteos con la politonalidad y las
armonías violentamente disonantes recogidas en su paso por Occidente, las
autoridades soviéticas han identificado su arte con las concepciones musicales
de la revolución. Prokofiev abandona las orquestaciones violentas y da curso al
lirismo, también acepta de buena gana algunas imposiciones como una cantata en
homenaje a la Revolución de Octubre con textos de Marx, Lenin y Stalin. De esos
mismos años, 1936, es también su popular cuento sinfónicoPedro y el Lobo.
Pero como no todo dura para siempre, diez años
después, su óperaUn hombre
auténticorecibirá el rechazo
del Comité Central, al advertir en ella cierta "orientación formalista y
antipopular" que estaría haciendo estragos en algunos artistas soviéticos,
entre los que se cuentan Shostakovich, Prokofiev y Kachaturian, autores de una
obra que "revela de modo particularmente evidente desviaciones formalistas
y tendencias musicales antidemocráticas extrañas al pueblo soviético y a sus
gustos artísticos".
No muchos años de vida le quedaban a Prokofiev. Tampoco a Stalin. Pero nadie
esperaba que ambos murieran el mismo día, el 5 de marzo de 1953. A raíz de esta
ominosa coincidencia, el periódicoSovietskoie
Iskustvoinformó de la muerte
de Sergéi Prokofiev en los siguientes términos:
"El compositor soviético Prokofiev murió el
día en que fue anunciada la trágica noticia de la enfermedad del gran Stalin.
Por consiguiente, el anuncio de su muerte no ha podido aparecer en la prensa
soviética hasta algunos días más tarde".
Concierto para piano y
orquesta N° 3, opus 26, en Do mayor
(Se recomienda el uso de
audífonos)
De los cinco conciertos para piano escritos por Prokofiev entre los años 1911 y
1932,
el N°3, compuesto entre los años 1917 y 1921, es el que ha cosechado mayor
popularidad, debido principalmente a sus excepcionales innovaciones melódicas y
rítmicas.
El concierto consta de tres movimientos de aproximadamente la misma duración,
unos diez minutos cada uno: Andante / allegro, Tema con variazioni, y Allegro
ma non tropo.
Andante
- Allegro Se inicia con un solo de clarinete que después tomará la
orquesta para su desarrollo. Luego de un par de compases, el lirismo de la
melodía es interrumpido en1:25por la entrada exuberante del piano introduciendo elallegro. Se inicia el diálogo
entre orquesta y solista. Luego terminarán al unísono de manera espectacular.
(Intermezzo10:00 Ante la mirada
recriminatoria, o quizá furtivamente lasciva, del director, la pianista se
estira la falda, consciente de que está mostrando mucha pierna).
Tema
con variazioni (10:10) El tema central, en mi menor, es seguido de
cinco variaciones. El movimiento termina en la más absoluta quietud.
(Inexplicablemente, al comienzo, el video pone la leyendaRichard Strauss, Don Juan Op
20, poema sinfónico que como es obvio no lleva piano, ni menos como
solista).
Allegro
ma non tropo (19:53) No obstante el tema lento de22:27que por momentos parece rendir homenaje al exiliado
Rachmaninov, es éste el movimiento más abiertamente virtuoso de la obra.
Después de un novedoso juego bitonal (la orquesta en sol mayor y el piano en re
mayor), explota la coda en dura batalla entre orquesta y solista para
finalmente encontrarse en Do mayor, la tonalidad inicial, en un dramáticofortissimo.
El concierto fue estrenado en Chicago el 16 de diciembre de 1921, con Prokofiev
actuando como solista. En la versión que se presenta aquí, la extraordinaria
pianista china Yuja Wang es acompañada por la Royal Concertgebouw Orchestra
dirigida por el maestro italiano Daniele Gati, grabación del 3 de octubre de
2010 en la sala Concertgebouw de Amsterdam.
Hatshepsut fue la primera mujer que desafío el orden establecido en su época, para convertirse en el faraón más poderoso de Egipto. Nace sobre el año 1500 a.C. y se hizo pintar con vestimenta masculina, con barba y sin pechos.
Hatshepsut fue faraona de la dinastía XVIII de Egipto, quinta faraona de dicha dinastía y su reinado va del año 1479 al 1457 a. C. Gobernó con el nombre de Harshupsut que significa “la primera de las nobles damas”.
Era hija del faraón Tutmosis I y de Almose. Egipto estaba en esa época en un momento de máximo esplendor, llegando su dominio hasta el río Éufrates y la ciudad de Babilonia. El ejército del faraón era en aquel período el más fuerte del mundo y su momento económico era de gran prosperidad. Debido a todos estos factores, los faraones tenían un poder absoluto.
Hatshepsut tuvo una infancia apacible, donde no le faltó de nada y estaba unida a la vida de la corte del faraón. Tuvo dos hermanos y una hermana menor Neferubity. Sus hermanos murieron muy jóvenes, hecho que la colocaba en la línea sucesoria al trono, sin embargo era muy difícil que una mujer pudiera acceder al poder en Egipto.
Parece ser que el propio faraón Tutmosis I, trató en su reinado de asociar a su hija al trono, como así lo demuestra que le nombrase la heredera.
Cuando Tutmosis I, después de trece años de reinado, fallece, le sucede un hijo que había tenido con una concubina con el título de Tutmosis II. Este llega al poder por la existencia de una conjura palaciega dirigida por el Chaty y arquitecto real, el poderoso Ineni, debido a que éste tenía una gran ascendencia sobre Tutmosis II.Para Hatshepsut fue un duro golpe a su orgullo. Tuvo que convertirse en la Gran Esposa Real y casarse con su hermanastro.
En el Antiguo Egipto, el matrimonio entre hermanos se daba frecuentemente, sobre todo en la realeza esto no se consideraba incesto. Es una forma de preservar la sangre real y asegurar la sucesión dinástica dentro de la misma familia.
Turmosis II sólo gobernó tres años y medio y tuvo dos hijos. A su muerte éstos todavía estaban en edad muy temprana. Este faraón era de carácter débil y muy dubitativo. Su reinado pasa sin más pena ni gloria, estando muy lejos del esplendoroso reinado de su padre. Seguía siendo dirigido su reino por el visir Inani.
Hatshepsut durante el reinado de su marido Tutmosis II, hizo su propio círculo de adeptos, los cuales cada vez tenían más poder e influencia. Entre estos destacan dos personajes que tendrían posteriormente gran poder, Hapuseneb y Senenmut.
Además hizo hincapié en que era descendente directa de los grandes faraones, libertadores de los hicsos. Ostentaba el título de Esposa de Dios, lo que significaba que era portadora de la sangre sagrada de la reina Ahmose-Nefertari. Todo esto hizo ser a Hatshepsut opositora del visir Ineni.
Del matrimonio entre Tutmosis II y Hatshepsut tuvieron una hija llamada Neferure, pero no tuvieron varón. Como consecuencia de ello, Tutmosis II bajo el consejo del visir Ineni, nombra heredero a un hijo suyo que tuvo con una esposa menor llamada Aser, que llegó con el título de Tutmosis III, solo contaba con doce años de edadHatshepsut exigió, que al ser la primera esposa del faraón se convirtiera en Regente de Tutmosis III, esto sucedía en el año 1473 a. C.
Pospuso sine die el matrimonio de Tutmosis III y su hija Neferura, que era la única persona que podía legitimar el ascenso al poder real. Esto ya había sucedido en otros casos de regencia en la historia egipcia, la diferencia se basa en que estos casos no eran mujer.
En sus primeros años de regencia planificó los pasos que debían darse para cambiar a la tradicional sociedad egipcia. Se deshizo del poderoso visir Ineni y ascendió al poder político a sus fieles seguidores Hapuseneb y Senenmut. Unificó los cargos de Visir y de Sumo Sacerdote de Amón. Senenmut era un oficial de origen plebeyo que siempre estuvo con ella y algunos historiadores hablan de que ambos fueron amantes y que incluso su hija Neferure fue fruto de esta relación.
Senenmut fue nombrado Arquitecto Real. Fue también tutor de su hija. Éste se mantuvo soltero hecho que en el antiguo Egipto era algo inusual. Fue el único plebeyo que fue enterrado en sarcófago real. Su templo fue ubicado en medio de las montañas y es el más hermoso arquitectónicamente hablando de Egipto.
Posteriormente, fue convertido en monasterio. Este templo está excavado en parte dentro de la roca.
Cuando vió que ya ostentaba el poder absoluto, se hizo autoproclamarse delante de Tutmosis III también faraón de las Dos Tierras y primogénito del Dios Amón y con el total apoyo de la clase sacerdotal, encabezados por su fiel seguidor Hapuseneb. De esta forma se había convertido en la tercera reina faraona en la historia egipcia.
Hashepsut exigió los atributos masculinos de su cargo, haciéndose representar como un hombre y apareciendo con barba postiza. En la corregencia siempre fue ella la que decidía, colocando a su hijastro en un segundo lugar, ante el poderío y personalidad de esta faraona.
Se adaptó rápidamente al poder y lo disfrutaba. Era una magnifica regente, debido a su inteligencia, gran gestión administrativa a pesar de que tuvo que sortear numerosos problemas.
Supo ganarse el apoyo de todos los que le rodeaban, comenzando por los sacerdotes d Karnak, para ello daba grandes donaciones económicas y los privilegios que les fue otorgando.
En su momento, declara al pueblo egipcio que su verdadero padre no era Tutmosis I, sino el dios Amón. De esta forma, la faraona se declaraba primogénita del dios Amón y su papel era la de ser su delegada en la tierra, con lo que alcanza un papel sagrado. Este título le daba poder preponderante como sacerdotisa en el santuario nacional del culto al dios Amón. Esto le proporcionaba muchas propiedades legales documentales, e infinitas ventajas de todo tipo.
Una monumental estela de esta reina se encuentra en el templo de Amón, en Karnak. La heredó de su abuela que fue la primera esposa divina. Esto se conoce como la Teogamia, que permite validar su derecho al trono al ser considerad como un Dios vivo. Esto hizo que el poder de los sacerdotes de Amón fuera muy grande.
Hatshepsut usó cinco nombres, el de Horus, el de Nebty, el de Horus de Oro y los dos conocidos como nombre de nacimiento Hatshepsut y elnombre de coronación que era Maat-Ka-Ra, que quiere decir “el espíritu de Ra es justo”, utilizó siempre conjuntamente con su nombre de nacimiento
Esta faraona nunca tuvo una preparación militar. En sus 22 años de gobierno tuvo seis conflictos militares, tres con la región de Nubia y otras tres con las tribus de Siria y Palestina.
Fue una gobernante pacifica y que prefirió gastar los presupuestos del Estado en construir y embellecer edificios y las ciudades, en vez de conquistar territorios.
Entre sus principales obras destacan:
- El templo de Salet en la isla de Elefantina que está dedicado a la diosa Pajet.
- Desarrolló una gran labor constructiva en Tebas, que era su ciudad. Hizo el recinto de las barcas sagradas de Luxor. Construyó dentro del gran templo de Amón en Karnak, la llamada Capilla Roja.
- Usando las canteras de Assuán, mandó construir los obeliscos más grandes jamás realizados para celebrar el XV jubileo de su ascensión al trono de Egipto, superiores a las de su padre Tutmosis I. Fueron colocados en Karnak y decorados con electrum, que es una aleación natural de oro y plata. Todavía se conserva en Assuán un obelisco inacabado que hubiera sido el mayor de todos ellos. Uno de ellos, que sigue en pie, sobresale 27 metros por encima del templo de Karnak
En aquella época los faraones se hacían construir su tumba y un templo mortuorio algo alejado de ésta, cuya finalidad era proteger a la misma, que sirviera como recordatorio de su labor en su reinado.
En Deir el- Hahari mandó construir un monumento mortuorio (conocido como el sublime de los sublimes), que sería el símbolo de su reinado. Se trata de uno de los templos más hermosos de Egipto. En sus paredes, están pintados todos sus logros políticos y económicos como faraona. Siendo uno de los más visitados actualmente por los turistas.
Fue construido al lado del templo de Mentuhotep II. Dicho monumento mortuorio tiene una estructura formada por largas terrazas con rampas alargadas de poca inclinación, que le hacen acoplarse perfectamente a la roca y su entorno. En dicho monumento hay un sector que no se puede ver, en él está la faraona Hatshesut y al arquitecto real Senenmut en actitud de amantes, de lo que se deduce, como ya hemos comentado anteriormente que debían ser amantes, pero esto estaba prohibido debido a la diferencia de linaje de ambos.
Debe resaltarse durante su gobierno, los dos viajes que hospició al territorio de Punt, región actual de Somalia, de donde se obtienen los mejores árboles de incienso y mirra. También trajo marfil, ébano, pieles de pantera y oro. Estas expediciones fueron dirigidas por Nehesi, que era como el portador del sello real,. En estos viajes no sólo se comerciaba, sino que se realizaban estudios minuciosos de la flora y fauna de estos territorios, así como de su organización política y social. La expedición se conmemoró con relieves en el templo de Hatsepsut en Tebas.
El monumento de Deir el–Bahari se terminó en el dieciseisavo año de gobierno y cuando Tutmosis III ya deseaba adquirir protagonismo. El faraón ansiaba más poder que Hatshepsut, pero ésta no se lo permitía. En el año XVII murieron en extrañas circunstancias los dos grandes apoyos de la faraona, Hapuseneb y Senenmut
La faraona deseaba que siguiera una dinastía femenina de faraones y para ello contaba con su hija Neferura, pero también falleció, lo que consiguió derrumbarla.
De pronto Hatshepsut desaparece de la vida política y pública sin que se sepa si fue derrocada. Parece ser que murió en el palacio de Tebas después de veintidós años de gobierno, calculándose que vivió unos cincuenta años.
Fue eliminada de todos los registros y de la lista de reyes. Sus estatuas fueron destruidas y enterradas en la arena del desierto. Su imagen fue borrada de todos los templos. Las estatuas que presiden su templo están todas decapitadas. Posiblemente sea el deseo de rescribir la historia, prescindiendo de la figura de Hatshepsut, primera mujer faraón de Egipto.
Su tumba fue descubierta por el arqueólogo Howard Carter en la primavera de 1903. En la tumba de Hatshepsut aparece también su nodriza Sita. Su cadáver tenía el brazo izquierdo doblado en posición típica de las reinas fallecidas. Su momia se encontraba rodeada de una gran cantidad de lienzos. Los recientes análisis de su momia han permitido saber que padecía una avanzada osteoporosis en las caderas, diabetes, artritis, sobre peso, cáncer y tenía absceso séptico en su boca lo que puede estar en el origen de su fallecimiento.
Podemos decir que, Hatshepsut fue una gran gobernanta durante su reinado. Egipto alcanzó su máximo esplendor poniendo las bases para el gran reinado de Tutmosis III.
Camino el laberinto de los momentos
Pero a todas partes que volteo para empezar otra vez
Pero nunca encuentro el final
Camino al horizonte
Y ahí encuentro otro
Todo parece tan sorprendente
Y entonces me encuentro con que yo sé
Si vas allí te vas por siempre
Voy ahí perderé el camino
Si nos quedamos aquí no estamos juntos
Está dondequiera
La luna sobre el océano
Recorro los alrededores en movimiento
Pero sin saber
La razón de su fluir
En movimiento en el océano
La luna continua moviéndose
Las ondas siguen agitándose
Y yo continuo andando
Si vas allí te vas por siempre
Voy ahí perderé el camino
Si nos quedamos aquí no estamos juntos
Está dondequiera
Me pregunto si las estrellas señalan
La vida que es mía
Y dejarán ellas que su luz brille
Lo suficiente para que yo pueda seguir
Miro hacia el cielo
Pero la noche se ha nublado
No hay chispas de constelación
No hay velo, no hay Orión
Las conchas en las arenas calientes
Han tomado de sus propias tierras
El eco de su historia
Pero todo lo que escucho son sonidos bajos
Como palabras de almohada tejiendo
Y las ondas del sauce se están yendo
Pero debería yo creer
Que estoy solo soñando
Si vas allí te vas por siempre
Voy ahí perderé el camino
Si nos quedamos aquí no estamos juntos
Está dondequiera
Para dejar el hilo de todo el tiempo
Y dejarlo hacer una línea obscura
Con la esperanza de poder aun encontrar
El camino de regreso al momento
Di la vuelta y volví a
Empezar otra vez
Aun buscando la respuesta
No puedo encontrar el final
Es este o aquel camino
Es un camino o el otro
Debería ser de una dirección
Podría estar en el reflejo
La vuelta que acabo de dar
La vuelta que estaba dando
Podría solo estar empezando
Podría estar cerca del final.