Érase una vez un granjero que vivía en el norte,
Ay, ay, mi bella, oh.
Afortunado padre de una, dos y tres hijas.
Mira qué hermosos son los cisnes nadando.
Las jóvenes paseaban por la ribera del río,
Ay, ay, mi bella, oh.
Hasta que la primera empujó a la más pequeña.
Mira qué hermosos son los cisnes nadando.
"Hermana, hermana, tendedme la mano",
Dijo cantando ay, ay, mi bella, oh.
"Y obtendrás de mí tierras y casa".
Mirá que hermosos son los cisnes nadando.
"De mí no tendrás ni mano, ni guante",
Dijo cantando ay, ay, mi bella, oh.
"Si no me entregas a tu amor verdadero".
Mirá que hermosos son los cisnes nadando.
A veces nadaba y a veces se hundía,
Cantando ay, ay, mi bella, oh,
Hasta que llegó a la presa de un molino.
Mira qué hermosos son los cisnes nadando.
La hija del molinero, vestida de rojo,
Cantando ay, ay, mi bella, oh,
Bajaba a por agua para hacer pan.
Mira qué hermosos son los cisnes nadando.
"¡Oh, padre! Mira, papá, ese cisne de allí",
Dijo cantando ay, ay, mi bella, oh.
"¿No te recuerda a una joven doncella?"
Mira qué hermosos son los cisnes nadando.
La dejaron en la orilla hasta que se secara,
Cantando ay, ay, mi bella, oh,
Cuando se acercó un arpista por el sendero.
Mira qué hermosos son los cisnes nadando.
Hizo clavijas de sus esbeltos dedos,
Cantando ay, ay, mi bella, oh.
Hizo cuerdas de su dorado cabello,
Mira qué hermosos son los cisnes nadando.
Hizo un arpa de su esternón,
Cantando ay, ay, mi bella, oh.
Y pronto comenzó a tocar sola.
Mira qué hermosos son los cisnes nadando.
La llevó de inmediato al salón de su padre
Cantando ay, ay, mi bella, oh,
Donde la corte entera se hallaba reunida.
Mira qué hermosos son los cisnes nadando.
Dejó el arpa sobre una piedra
Cantando ay, ay, mi bella, oh,
Y de inmediato comenzó a tocar sola.
Mira qué hermosos son los cisnes nadando.
"Allí se sienta mi padre el Rey",
Dijo cantando ay, ay, mi bella, oh
"Y allá se sienta mi madre la Reina".
Mira qué hermosos son los cisnes nadando.
"Allí se sienta mi hermano Hugh",
Dijo cantando ay, ay, mi bella, oh.
Y junto a él, William, dulce y leal.
Mira qué hermosos son los cisnes nadando.
"Y allí se sienta mi ingrata hermana Anne,"
Dijo cantando ay, ay, mi bella, oh,
Que me ahogó por el amor de un hombre.
Mira qué hermosos son los cisnes nadando.