lunes, 20 de octubre de 2014

Gusteau... el mejor chef de Francia: ¿fantasía o realidad?

 Esta conmovedora historia francesa fue captada por los estudios Pixar al hacer "Ratatouille", una película que homenajea la noble profesión de un chef, relatando una historia en donde, el chef Gusteau murió luego de perder una estrella, consecuencia de una reseña negativa que le hizo un crítico importante y muy influyente (Antón Ego), el cual, al final de la película reconoce los valores que el chef quería compartir.

Pues ésta es una historia real y muy conocida en Francia desde los años 90...

El chef Bernard Loiseau era famoso no solo por marcar tendencia en la culinaria, ni por las tres estrellas Michelin que obtuvo para su hotel-restaurante La Côte d'Or's, sino por el triste final que tuvo su vida al entrar en depresión con los rumores de que iba a perder una estrella.

Él era el chef más famoso de Francia. En encuestas, 9 de cada 10 personas podía reconocerlo de vista. Publicó 8 libros de cocina, donde enseñaba trucos y recetas fáciles, inclusive hasta para niños (Como en "Ratatouille" el libro "Cualquiera puede cocinar"), construyó un imperio gastronómico millonario él solo y sacó una línea de alimentos envasados al vacío. Desde adolescente soñaba con un restaurante digno de tres estrellas Michelin y lo logró en 1991, llegó a conseguir el máximo galardón de la guía roja, cosa que es muy difícil y solo 26 restaurantes en Francia lo tienen, todo un hermoso producto de 17 años de trabajo duro y pasión por la cocina.

Pero Bernard Loiseau, era un obsesionado con el perfeccionismo y traía arrastrando depresiones desde hacía una década. Así como hay cocineros obsesionados con la perfección, hay críticos muy quisquillosos. Gault Millau, una de las guías de restaurantes más influyentes de Francia, había degradado al restaurante. En una tabla del 1 al 20 (en la guía nunca aparecen restaurantes con menos de 10 puntos) La Côte d'Or's pasó de tener 19 a 17 puntos. Luego en el diario francés "Le Figaro" comenzaron el rumor de que el famoso chef estaba a punto de perder una de las estrellas. Y unos días después (el 24 de febrero del 2003), luego de un día largo de trabajo, el chef Loiseau (52 años de edad) puso una escopeta de caza en su boca y jaló del gatillo.

Michelin sacó un comunicado luego de la muerte del cocinero afirmando que nunca tuvieron intenciones de quitarle la tercera estrella y en la actualidad, La Côte d'Or's sigue funcionando y mantiene sus tres estrellas.

 Reseña de Antón Ego

“La vida de un crítico es sencilla en muchos aspectos, arriesgamos poco, y tenemos poder sobre aquellos que ofrecen su trabajo y su servicio a nuestro juicio. Esperamos con las críticas negativas – divertidas de escribir y leer- pero la triste verdad que debemos afrontar, es que en el gran orden de las cosas, cualquier basura tiene más significado que lo que deja ver nuestra crítica. Pero en ocasiones el crítico si se arriesga cada vez que descubre y defiende algo nuevo… el mundo suele ser cruel con el nuevo talento, las nuevas creaciones… lo nuevo, necesita amigos. Anoche experimente algo nuevo, una extraordinaria cena de una fuente singular e inesperada, decir sólo que la comida y su creador han desafiado mis prejuicios sobre la buena cocina subestimaría la realidad. Me han tocado en lo más profundo. En el pasado, jamás oculté mi desdén por el famoso lema del chef Gusteau: "Cualquiera puede cocinar". Pero al fin me doy cuenta de lo que quiso decir en realidad: "No cualquiera puede convertirse en un gran artista, pero un gran artista puede provenir de cualquier lado". Es difícil imaginar un origen más humilde que el del genio que ahora cocina en el restaurante Gusteau, y quien, en opinión de este crítico, es nada menos que el mejor chef de Francia. Pronto volveré a Gusteau… hambriento por más”

https://es-la.facebook.com/notes/bredys/gusteau-el-mejor-chef-de-francia-fantas%C3%ADa-o-realidad/316644908458690

LE RELAIS BERNARD LOISEAU «Marcado con el sello de la excelencia»
Dominique Loiseau, Propietario & Maitre de Maison
http://www.bernard-loiseau.com/maj/pdf/Articles_presse/bernard-loiseau-article-es.pdf

Mushroom Soup by Bernard Loiseau
http://www.youtube.com/watch?v=7F84KgKW6f8

El gran Chef
La historia empieza cuando se está buscando una nuevo líder para la escuela coreana de Woonam-jung. Su alumno más adelantado, Sung-Chan y su rival Bong-joo preparan para el examen final un sashimi de pez globo. Pero "algo" sale mal para Sung-Chan y tiene que dejar el mundo de la cocina.

Dice la historia que el rey Soon-Joong de la dinastía Chosun, dejó de comer y murió. Su cocinero real no quiso cocinar para nadie más (se veía obligado por los colonizadores japoneses) y se cortó la mano con un cuchillo que tenía una forma peculiar. A éste se le conoce como el cuchillo real.

Pasados 5 años del incidente de Sung-Chan, el cuchillo es devuelto a Corea por los japoneses, y se celebra una competición para determinar quien tiene la valía suficiente para ganar el cuchillo real. El chef que gane el concurso, será el sucesor del chef real.

http://www.youtube.com/watch?v=4XWi6QEY-r4





Camino sin fin – Loreena McKennitt

El camino sólo conduce hacia adelante
Tan lejos como se puede llegar
por senderos zigzagueantes
Y cercos de ligustrina
cerca de montañas color púrpura
Y al doblar cada curva
Todos los caminos me conducen a ti
No hay fin para este viaje

Aquí está mi corazón, a ti te lo doy
Llévame contigo a lo largo de esta tierra
Estos son mis sueños, tan simples y tan pocos
Sueños que caben en la palma de nuestras manos

En la profundidad del invierno, entre la la nieve que cae
Alto en el aire Donde resuenan las campanas
Y ahora alrededor mío todavía te siento aquí
Este es el viaje no hay misterio, al que temer

Aquí está mi corazón, a ti te lo doy
Llévame contigo a lo largo de esta tierra
Estos son mis sueños, tan simples y tan pocos
Sueños que caben en la palma de nuestras manos

El camino sigue adelante y no sé hacia donde…
pero siento en mi corazón que tu estarás allí
y cuando llegue la tormenta,
Y cualquiera sean nuestros miedos
El viaje continúa, así como tu amor
continúa siempre cerca

Aquí está mi corazón, a ti te lo doy
Llévame contigo a lo largo de esta tierra
Estos son mis sueños, tan simples y tan pocos
Sueños que caben en la palma de nuestras manos

Luz en la oscuridad. 
Light in the darkness
, George Heath (1844 -1869)

Cuando el alma es abrumada por la penumbra,
La tristeza, el dolor, y la preocupación;
Cuando el futuro parece oscuro como la tumba,
Y el presente un golfo de desesperación;

Cuando la vida parece una plaga solitaria,
Una carga que llevamos diariamente;
Cuando esperanza huye rápidamente,
Y el placer lejos se desvanece;

Cuando el alma se atormenta en soledad,
Y regaña su destino inmutable;
Cuando el corazón en roca parece coagularse,
Detrás del peso insoportable de la desgracia,

Tal vez un dulce e inocente niño
Deposite un beso en tu mejilla pálida,
Y diga: "Cómo le quiero", y sonría
Con una mirada de dicha inefable.

O quizás una esposa cariñosa
Te ofrezca esperanza incluso en el final;
O tu mano sea aferrada firmemente
Por el cálido afecto de un amigo.

Cuando hermosos y elocuentes ojos
Caigan tiernamente sobre los tuyos;
Cuando los corazones se compadezcan del tuyo,
Mostrándote que no estás solo;

Qué un rayo de luz inalcanzable
Emocione tu alma y alcance tu humanidad
Dispersando la penumbra de la noche,
Y barra hacia el día tu oscuridad.

Y así te dará nuevo coraje y esperanza,
Aligerando tu carga, tus tribulaciones;
Te dará fuerza para contener las aflicciones,
Y en la desesperanza ya nunca caerás.











Sexteto en Re menor Op. 70- Recuerdos de Florencia - Tchaikovsky

Allegro con spirito
Adagio cantabile e con moto
Allegretto moderato
Allegro vivace

El sexteto Op.70 se distingue del capricho Italiano por una gran gama de impresiones que, finamente elaboradas, conducen a un arte sonoro prácticamente abstracto. En una carta escrita a su hermano Modesto en 1890, el maestro afirmaba: No pretendo sólo componer una pieza elaborada para seis instrumentos, sino un autentico sexteto, es decir una obra para seis voces independientes, que puedan ser ejecutadas exclusivamente como tal sexteto. Muy esclarecedor.
Aunque ideada en 1887, la pieza de cámara tomó su forma definitiva entre junio y agosto de 1090. Sin embargo, el maestro no quedó satisfecho, y la revisó entre 1891 y 1892, estrenándola finalmente en San Petersburgo el 7 de diciembre de 1892.El matiz florentino de este sexteto, concebido en la tonalidad de re menor, resulta, más que de las notas mismas, de la riqueza de los hallazgos, de la calma interior, del encanto de cada una de las melodías y de la entonación en general, que pueda definirse de " lirico bienestar" . Se reflejan aquí los recuerdos de Tchaikovsky, a quien desde luego no interesaba una mera transcripción al pentagrama de sus viajes turísticos. Es más, prescindía de las calles de Florencia o de Italia en general. Así, en el tercer movimiento, hay algo que tiene un claro sabor a tierra Rusa, mientras que en el conjunto de la obra no faltan matices germánicos, casi como homenaje a Brahms, a quien sin embargo, Tchaikovsky consideraba como un músico excesivamente frío y racional.
El compositor revela más claramente su propia personalidad en el segundo movimiento, tanto por los efectos instrumentales, como por el encanto de los colores. Sorprende aquí el uso de la punta del arco para una vibrante secuencia de acordes repetidos, desde el " Fortíssimo" hasta el suspiro más imperceptible. Por otra parte, Tchaikovski era un apasionado del contrapunto, reflejado aquí en una fuga. Raramente asume en sus obras una carga tan pesada, aunque en definitiva el resultado es, una vez más, fluido, sin esfuerzo aparente.
Las seis voces se entrelazan de forma natural, como si se tratara de un diálogo de seis personas ante una chimenea. Tchaikovski reconocía su limitación para afrontar las formas musicales mas severas, y confesaba a Madame von Meck; Durante toda mi vida he lamentado mi insuficiencia para dominar la forma en general. He luchado contra esta innata debilidad, y me atrevo a decir que he logrado resultados aceptables. Sin embargo, llegaré a la tumba sin haber realizado nada absolutamente perfecto en cuanto a forma. Tales ideas alimentaron los desequilibrios propios de la personalidad de este músico atormentado.


https://www.youtube.com/watch?v=EycHgYYdrgM


Concierto para piano para la mano izquierda de Maurice Ravel


El pianista Paul Wittgenstein, hermano del filósofo Ludwig Wittgenstein, se alistó en el ejército austríaco durante la Primera Guerra Mundial. Fue herido y capturado en el frente ruso. Debido a sus heridas, su brazo derecho debió ser amputado mientras estaba en cautiverio. 

Lo que pudo haber sido fatal para la carrera de muchos otros pianistas, fue sólo un retraso para el emprendedor Wittgenstein. Después de un período de recuperación al final de la guerra, empezó a encargar a diferentes compositores que escribieran obras que él pudiera tocar con una sola mano. Entre los que le respondieron estaban Britten, Strauss, Hindemith, Prokofíev y Ravel.

Poco tiempo antes, Ravel había empezado a componer un concierto para piano diferente, en Sol mayor, cuando recibió la invitación de Wittgenstein. Como al compositor le gustaba trabajar dentro de restricciones artificiales, aceptó ansiosamente el desafío de componer para un pianista de una sola mano. Con el propósito de aprender cómo podía lograrse un sonido completo usando sólo la mano izquierda, estudió los Seis Estudios para la Mano Izquierda de Saint-Saéns, los Ejercicios para la Mano Izquierda y los 24 Estudios para la Mano Izquierda de Czerny, más las obras de Alkan, Scriabin y Godowsky.

Ravel interrumpió el trabajo en el Concierto en Sol mayor para componer el Concierto para la Mano Izquierda. Una vez que estuvo terminado, él y Wittgenstein presentaron la obra en una reunión privada. Primero Ravel, que estaba por debajo del nivel de un pianista soberbio, tocó sólo la parte solista, pero usando las dos manos. Luego Wittgenstein tocó la parte solista mientras Ravel le acompañaba, interpretando una versión para piano de la partitura orquestal en un segundo plano.

A Wittgenstein no le gustó. Para él, Ravel "no era un pianista sobresaliente y yo no estaba cautivado con la composición. Siempre me lleva un tiempo avanzar en un trabajo difícil. Supongo que Ravel quedó desilusionado y yo lo sentía, pero nunca aprendí a simular. Mucho tiempo después, luego de haber estudiado el concierto durante meses, quedé fascinado con él y me di cuenta de la gran obra que era".

A continuación se produjo una disputa entre el pianista y el compositor respecto de la interpretación correcta de la obra. Como resultado de esta pelea, Wittgenstein estrenó el concierto no en París sino en Viena, bajo la dirección, no de Ravel sino de Robert Heger. Sin embargo, los desacuerdos fueron superados y un año más tarde Ravel dirigió el estreno en París, con Wittgenstein en el teclado. Se los comprometió a presentar la obra nuevamente, en Montecarlo, pero Ravel, que ya sufría de las enfermedades que iban a ser fatales para él neurastenia, ataxia y afasia debió pedirle a Paul Paray que lo remplazara como director.
Ravel pronto terminó el Concierto en Sol mayor. Le dijo a su editor que:

Planificar los dos conciertos para piano simultáneamente era una experiencia interesante. El concierto en el que apareceré como intérprete es un concierto en el verdadero sentido de la palabra: quiero decir que está escrito en gran medida con el mismo espíritu que los de Mozart y Saint-Saéns... El Concierto para la Mano Izquierda es muy diferente. Contiene muchos efectos del jazz y la escritura no es tan liviana. En una obra de este tipo, es esencial dar la impresión de una textura no más delgada que la de una parte escrita para ambas manos. Por la misma razón recurrí a un estilo que está más cerca del de la clase más solemne del concierto tradicional.


Los efectos de jazz que aparecen en el Concierto en Re menor provienen del reciente viaje de Ravel a Estados Unidos. Conoció al director Paul Whiteman y pasó varias veladas visitando clubes de jazz en Harlem en compañía de George Gershwin. En una charla pública que pronunció en Houston predijo que el futuro de la música artística en Estados Unidos dependía del compromiso de los compositores norteamericanos con el jazz: "Quizás esta música nacional norteamericana de ustedes pueda incorporar una buena cantidad del ritmo rico y divertido de vuestro jazz, una buena cantidad de la expresión emocional de sus blues y una gran cantidad del sentimiento y el espíritu característicos de sus melodías y canciones populares que, como corresponde, derivan y a la vez contribuyen a una noble herencia en la música."

Ravel se dio cuenta de que había algo de artificial en un compositor europeo que buscara inspiración en el jazz norteamericano. Sabía que los compositores norteamericanos podrían comprender el jazz de un modo más profundo de lo que él jamás podría esperar lograrlo. A lo largo de su carrera, sin embargo, el francés se inspiró en fuentes extranjeras (como el vals vienes, en el que modeló Valses nobles et sentimentales y La Vals) y se recreó con desafíos artificiales (tales como componer un concierto para una sola mano). Por lo tanto, rápidamente adoptó ciertos manierismos del jazz que había escuchado en Nueva York y en Hollywood.

Ravel fue uno de los grandes orquestadores de todos los tiempos. Su capacidad puede percibirse a lo largo de todo el concierto, especialmente en los pasajes más plenos. Pero se debe escuchar cuidadosamente la extraordinaria originalidad de la apertura, baja y tranquila; un sonido diferente del que haya aparecido en cualquier música anterior. Los violonchelos y la mitad de los bajos de cuerdas sostienen un acorde abierto, que la otra mitad de los bajos arpegia con las cuerdas abiertas. Luego se agrega una melodía en el más improbable de los instrumentos solistas: el contrafagot. Ravel escribe para este instrumento potencialmente engorroso con tal facilidad y elegancia que se nos brinda (al oyente ¡y al contrafagotista!) el raro placer de oírlo cantar, tanto en sus registros más bajos como en los más altos, con un lirismo encantador.

A medida que la orquesta crece, su sonoridad es constantemente fresca e imaginativa. El clímax de este primer gran crescendo es la entrada del piano en una cadenza. Ahora escuchamos la imaginación de Ravel para la sonoridad transferida a un solo instrumento solista. El se las arregla, mediante el uso cuidadoso del pedal, para sostener los acordes y las notas de la melodía mientras las figuras vigorosas del acompañamiento son tocadas en un registro más bajo, para hacer que la escritura del solo suene como música a dos manos. En efecto, la mayor parte de esta cadenza parece, en el papel, que estuviera destinada a ambas manos y en efecto suena de ese modo. Se necesita un pianista excepcional (tal como se necesitó un compositor excepcional) para dar vida a esta música desafiante.

Después de que la orquesta desarrolla la melodía tocada originariamente por el contrafagot, el piano toca otro solo (con ligero acompañamiento orquestal). Esta vez la música es lírica, pero de nuevo suena como si estuvieran tocando dos manos, porque hay una melodía madura y continua en el registro superior y simultáneamente un acompañamiento arpegiado en el registro bajo. Nuevamente el pedal ayuda a crear la ilusión de dos manos, aunque esta vez el desafío es mayor, porque el pianista debe proyectar lirismo sostenido mientras de hecho su mano está constantemente saltando de una parte a otra del teclado.

La segunda sección de este concierto de un solo movimiento es un scherzo, escoltado por un rápido descenso en los vientos a los que responde una escala descendente en los trombones. Cuando el piano finalmente presenta la melodía principal, escuchamos el sorprendente parentesco del concierto con el jazz. Abundan las notas del blues, como por ejemplo el empleo de los terceros grados de la escala elevados y bajados simultáneamente o el séptimo grado bajado. Luego, en la sección del scherzo, escuchamos una melodía inspirada en los blues, tocada por un fagot alto solista, que suena casi como un saxofón del jazz.

Esta melodía se torna todavía más furtiva cuando es asumida por un trombón. Lo que es claramente distinto del jazz respecto de este tema, sin embargo, es el modo en el que, en efecto, está tocando en un tiempo diferente respecto de su acompañamiento. Como Ravel posteriormente desarrolla las complejidades rítmicas sugeridas, en toda la orquesta con el piano, la música se hace muy intrincada y excitante.

La sección final comienza con una suntuosa reafirmación de los materiales de la apertura. Sigue a continuación una cadenza espectacular, en la que el pianista debe mover la mano de uno a otro extremo del teclado en rápida sucesión de arpegios y, al mismo tiempo, resaltar una superposición melódica: ¡tarea ímproba, incluso para dos manos! Después de la cadenza, la música de la apertura regresa brevemente una vez más y luego el concierto concluye pícaramente con una breve reminiscencia del scherzo.



http://www.hagaselamusica.com/clasica-y-opera/obras-maestras/concierto-para-piano-para-la-mano-izquierda-de-maurice-ravel/

domingo, 19 de octubre de 2014

La luna - Jaime Sabines

La luna se puede tomar a cucharadas 
o como una cápsula cada dos horas. 
Es buena como hipnótico y sedante 
y también alivia 
a los que se han intoxicado de filosofía. 
Un pedazo de luna en el bolsillo 
es mejor amuleto que la pata de conejo: 
sirve para encontrar a quien se ama, 
para ser rico sin que lo sepa nadie 
y para alejar a los médicos y las clínicas. 
Se puede dar de postre a los niños 
cuando no se han dormido, 
y unas gotas de luna en los ojos de los ancianos 
ayudan a bien morir. 

Pon una hoja tierna de la luna 
debajo de tu almohada 
y mirarás lo que quieras ver. 
Lleva siempre un frasquito del aire de la luna 
para cuando te ahogues, 
y dale la llave de la luna 
a los presos y a los desencantados. 
Para los condenados a muerte 
y para los condenados a vida 
no hay mejor estimulante que la luna 
en dosis precisas y controladas.




Canciones con historia: «Candle in the Wind», de Elton John, la canción más vendida en la historia del Reino Unido

Se han vendido casi cinco millones de copias desde que comenzaron a elaborarse las listas de éxitos en 1952


"Candle in the Wind" de Elton John es, con casi cinco millones de copias, la canción más vendida en el Reino Unido desde que comenzaron a elaborarse las listas de éxitos en 1952, informó la empresa Official Charts Company.

El tema, compuesto inicialmente en 1973 en honor a Marilyn Monroe, fue reescrito como tributo a la princesa Diana de Gales tras su fallecimiento en un accidente de circulación en 1997 y ha vendido en total 4,9 millones de copias.

En segundo y tercer lugar figuran respectivamente "Do They Know it's Christmas?" de la organización musical benéfica Band Aid, con 3,69 millones de copias, y "Bohemian Rhapsody" de Queen, con 2,36 millones de copias. Los tres sencillos encabezan la lista de éxitos musicales en el Reino Unido más completa hasta el momento, elaborada por Official Charts Company -empresa encargada de elaborar las listas oficiales de álbumes y sencillos más vendidos en el Reino Unido- para conmemorar su 60 aniversario.

En los últimos sesenta años más de 32.000 canciones han formado parte de las listas de éxitos del Reino Unido, pero sólo 123 han logrado vender más de un millón de copias, logro que les ha hecho merecedores de un espacio en el libro "The Million Sellers".

Integrantes de un selecto grupo


Con dos millones de copias vendidas figuran "Mull of Kintyre", compuesta por Paul McCartney y Denny Laine e interpretada por Wings; "You're The One That I Want" de John Travolta y Olivia Newton-John; "Rivers of Babylon" de Boney M y "Relax" de Frankie Goes To Hollywood.

La lista de más de un millón de copias vendidas incluye también cinco temas de The Beatles - "She Loves You", "I Want to Hold your Hand", "Can't Buy Me Love", "I Feel Fine" y "Day Tripper"- todas ellas con más de 1,39 millones. Michael Jackson, Whitney Houston, Aqua, Cher, Bryan Adams, John Lennon, Britney Spears, Celine Dion, George Michael, Oasis y Elvis Presley son otros de los artistas que se han ganado un hueco en esta clasificación.

Según Martin Talbot, director de la Official Charts Company, solo durante el año pasado se vendieron 178 millones de copias de canciones en el Reino Unido, una cifra que se espera que ascienda a 190 millones en 2012.