viernes, 13 de marzo de 2015

GACELA DE LA TERRIBLE PRESENCIA - Federico García Lorca

Yo quiero que el agua se quede sin cauce.
Yo quiero que el viento se quede sin valles.

Quiero que la noche se quede sin ojos
y mi corazón sin la flor del oro.

Que los bueyes hablen con las grandes hojas
y que la lombriz se muera de sombra.

Que brillen los dientes de la calavera
y los amarillos inunden la seda.

Puedo ver el duelo de la noche herida
luchando enroscada con el mediodía.

Resisto un ocaso de verde veneno
y los arcos rotos donde sufre el tiempo.

Pero no me enseñes tu limpio desnudo
como un negro cactus abierto en los juncos.

Déjame en un ansia de oscuros planetas,
¡pero no me enseñes tu cintura fresca!


El amor brujo de Manuel de Falla

En 1907, Falla emprendió lo que se suponía iban a ser vacaciones de una semana en París, pero se quedó tan encantado con la capital de Francia que terminó permaneciendo allí siete años. La primera obra que escribió a su regreso a España fue el ballet El amor brujo, compuesto en el momento en que estaba terminando Noches en los Jardines de España. De hecho, el movimiento de tango del ballet fue originalmente concebido como parte de Noches.

El incentivo de El amor provino de Pastora Imperio, una cantante y bailarina que deseaba una pieza en la que pudiera expresarse en ambas especialidades. Ella se dirigió a Falla y al dramaturgo Gregorio Martínez Sierra. Los dos hombres se interesaron en el proyecto. Sierra proporcionó un escenario basado en una historia folclórica auténtica. La Imperio pertenecía a una familia de gitanos, varios de los cuales tuvieron participación en el estreno. La madre de la artista instruyó a Falla con respecto a las canciones folclóricas y las leyendas gitanas, su hermano bailó el papel de Carmelo y su cuñada e hija también aparecían en la producción.

Como inicialmente la obra fue un fracaso, tiempo más tarde el compositor volvió a escribirla, combinó sus dos escenas en una sola, amplió su conjunto de cámara a una orquesta y eliminó varias canciones y recitados. La nueva versión se escuchó en concierto en 1916, pero debió esperar para una producción escénica hasta 1925, cuando fue interpretada en París por la célebre bailarina La Argentina. Falla extrajo una suite orquestal del ballet omitiendo los números vocales.

A través de sus canciones y danzas populares, El amor brujo refleja el misticismo de la cultura gitana. Particularmente española es la manera en la que las "fuerzas brutas de naturaleza incorregible", como el biógrafo de Falla, Burnett James, explica el simbolismo del Espectro, son aplastadas por "la firmeza de la mente y del espíritu humano", que están representados por el amor de Carmelo y Candelas. Como lo explica James:
La música surgió de las raíces y de las canciones y de las danzas de los gitanos andaluces y lleva en ella la mayor parte del tiempo una cualidad extrañamente primitiva; o más bien, un tipo de elementalismo emocional y espiritual contenido dentro de un envase técnico y estilístico altamente sofisticado. Hay también un sabor oriental frecuente, que no debe sorprender en vista de los muchos aspectos del flamenco que se sabe y se reconoce que derivan de lo oriental... Falla comprendió, aunque todavía no había estado allí, las diferencias significativas entre Andalucía y la Andalucía gitana y compuso de acuerdo con ello. Pero el compositor no utilizó ni una sola tonada tradicional, andaluza o gitana, aunque empleó con gran habilidad y comprensión varios de los ritmos de la danza popular. En cuanto al material temático, se mantuvo fiel a su propia creencia de que la música folclórica es más valiosa para el músico cultivado que no usa tonadas folclóricas auténticas, sino que llega a "sentir" su espíritu y esencia y de este modo les permite inspirar sus propias composiciones, pero no apoderarse de ellas... El carácter místico, misterioso y modal de El amor brujo imprimió un sello particular en esta música, pues derivaba del propio corazón de la materia que fue su objeto.
El título El amor brujo recibe habitualmente en inglés el nombre de "Amor, el Mago", pues de hecho el español es intraducible. La ambientación es probablemente la costa sur de España, cerca de Cádiz. Tanto en su título "La historia del pescador" como el tango de Cádiz de siete tiempos en el movimiento "Pantomima" sugieren fuertemente esta ubicación. El siguiente resumen aparece en la partitura publicada de El amor:

Candelas, una joven muy bella y apasionada, ha amado a un gitano malvado, celoso y disoluto, pero fascinante y lisonjero. Aunque ha llevado con él una vida infeliz, le amó intensamente y lamentó su pérdida, incapaz de olvidarle. El recuerdo que guarda de él es como un sueño hipnótico, un hechizo mórbido, horroroso y enloquecedor. Está aterrada por el pensamiento de que el muerto quizá no se haya ido del todo, de que puede regresar y que continúa amándola a su modo feroz, sombrío, infiel y acariciante. Se vuelve víctima de sus pensamientos del pasado, como si estuviera bajo la influencia de un Espectro; sin embargo ella es joven, fuerte y vivaz. La primavera vuelve y con ella el amor, en la figura de Carmelo. Carmelo, un galán apuesto, joven y enamorado, trata de seducirla. Candelas no es reacia a ser conquistada y casi inconscientemente responde al amor, pero la obsesión de su pasado pesa contra su actual inclinación. Cuando Carmelo se acerca a ella y trata de hacerla compartir su pasión, el Espectro regresa y aterroriza a Candelas, a la que separa de su amante. Los amantes no pueden intercambiar el beso del amor perfecto.

Carmelo se va y Candelas languidece y se marchita. Se siente como embrujada y su amor pasado parece revolotear pesadamente a su alrededor en la forma de murciélagos malévolos y agoreros. Pero este hechizo malvado debe ser roto y Carmelo cree haber encontrado un remedio. En otro tiempo él fue camarada del gitano cuyo Espectro ronda a Candelas. Sabe que el amante muerto era el típico galanteador andaluz infiel y celoso. Como parece conservar, aun después de muerto, su gusto por las mujeres bellas, debe ser sorprendido en su lado flaco y de este modo apartado de sus celos póstumos, con el fin de que Carmelo pueda intercambiar con Candelas el beso perfecto contra el cual no tiene poder la brujería en contra del amor.

Carmelo persuade a Lucía, una joven gitana encantadoramente bella, amiga de Candelas, que simule aceptar los avances del Espectro. Lucía, por cariño a Candelas y por curiosidad femenina, acepta. La idea de flirtear con un fantasma le resulta atrayente y novedosa. ¡Y además, en vida el muerto había sido tan jovial! Lucía ocupa el puesto del centinela. Carmelo regresa a seducir a Candelas y el Espectro interviene -pero se encuentra con la encantadora gitanilla y no puede ni quiere resistirse a la tentación-, pues él no sabe decir que no a la atracción de una cara bonita. Comienza a seducir a Lucía, engatusándola e implorándole, y la coqueta joven gitana le lleva casi a la desesperación. Mientras tanto, Carmelo logra convencer a Candela de su amor y la vida triunfa sobre la muerte y sobre el pasado. Los amantes por último intercambian el beso que derrota la influencia maligna del Espectro, el cual perece, definitivamente conquistado por el amor.

http://www.hagaselamusica.com/clasica-y-opera/obras-maestras/el-amor-brujo-de-manuel-de-falla/


La-mitad-invisible/mitad-invisible-amor-brujo
Los Oasis de Egipto: desiertos Blanco y Negro

Los oasis eran lugares ideales para que el estado exiliara a posibles enemigos, especialmente el oasis de Kharga, o para que oponentes políticos se refugiasen en ellos, como ocurrió en el oasis de Dakhla, al final del Primer Periodo Intermedio, con los oponentes de Mentuhotep, el unificador de Egipto.

 Los oasis estaban rodeados por el "caos", lo que explica que en ellos existiesen oráculos y divinidades con unas características diferentes al resto de los dioses egipcios. El más conocido de todos fue el oráculo de Amón, en el oasis de Siwa. Al principio los oasis eran los protegidos de Seth, aunque según fue avanzando la civilización egipcia, pasaron a ser los protegidos de Amón. Su importancia va paralela a la evolución del Estado y de la sociedad egipcia, ya que las rutas comerciales que unían el Valle con los oasis, a través de los wadis, constituían el punto de llegada de las caravanas comerciales y expediciones reales en busca de metales y piedras; además eran productores de dátiles y vinos, productos de gran consideración en la corte, por lo que las rutas con los oasis estaban protegidas por la guardia real.

En el desierto occidental se encuentra una cadena formada por los oasis más importantes de Egipto:

* SIWA.- Es el más occidental de los oasis del desierto occidental, y muy cercano a la frontera con Libia. Sus ruinas más antiguas datan de la Dinastía XXVI. La necrópolis de Gebel el-Mawta fue utilizado hasta el Período romano. El Oráculo de Amón en Siwa fue muy famoso, hasta el acudió Alejandro Magno en el año 332 a.C. para ser reconocido como dios y ser proclamado rey de Egipto.

* BAHARIYA.- Este oasis está situado a 200 km. al oeste del Valle del Nilo. Las ruinas más importantes van desde el comienzo del Reino Nuevo hasta la época romana. En los alrededores de la ciudad de Bawit se encuentran las tumbas de varios gobernadores del oasis de la Dinastía XXVI, así como restos de un arco triunfal del periodo romano y dos templos, uno del reinado de Apries y otro de Alejandro Magno. En el oasis se cultivaban viñedos, cereales y era rico en mineral de hierro.

* FARAFRA.- Este oasis está situado a 300 km. al oeste de Asiut y es una tierra muy fértil. Es el más pequeño de los oasis del desierto occidental. Las ruinas más importantes son la necrópolis de Ain el-Wadi y Wadi Abu Hinnis que datan de la época romana.

* DAKHLA.- Se encuentra situado a 300 km. de la ciudad de Luxor (antiguamente Tebas) y es el oasis donde han aparecido las ruinas más antiguas. Los principales yacimientos son las tumbas de los gobernadores de la VI Dinastía, cerca de la ciudad de Balat; cementerio del Primer Periodo Intermedio cerca de la ciudad de Amhada, un templo dedicado a la diosa Mut, del Periodo Ramésida cerca de Ezbet Bashindi; templo dedicado a la triada tebana en Deir el-Hagar y tumbas romanas en Qaret el-Murawwaqa.

* KHARGA.- Es el oasis más grande del desierto occidental y el situado más al sur a 175 km. de Luxor. Es el oasis que muestra haber estado poblado desde el Paleolítico Medio y su cultura se muestra muy relacionada con el Valle del Nilo. Sus ruinas más importantes datan del Período Ptolemaico y copto.

https://www.youtube.com/watch?v=5eGbJUF-IyU


Poema 15 – Pablo Neruda

ME gustas cuando callas porque estás como ausente,
y me oyes desde lejos, y mi voz no te toca.
Parece que los ojos se te hubieran volado
y parece que un beso te cerrara la boca.
Como todas las cosas están llenas de mi alma
emerges de las cosas, llena del alma mía.
Mariposa de sueño, te pareces a mi alma,
y te pareces a la palabra melancolía.
Me gustas cuando callas y estás como distante.
Y estás como quejándote, mariposa en arrullo.
Y me oyes desde lejos, y mi voz no te alcanza:
déjame que me calle con el silencio tuyo.
Déjame que te hable también con tu silencio
claro como una lámpara, simple como un anillo.
Eres como la noche, callada y constelada.
Tu silencio es de estrella, tan lejano y sencillo.
Me gustas cuando callas porque estás como ausente.
Distante y dolorosa como si hubieras muerto.
Una palabra entonces, una sonrisa bastan.
Y estoy alegre, alegre de que no sea cierto.


Sinfonía Nº 6 -  Gustav Mahler

Resulta curioso que la Sinfonía Nº 6 de Gustav Mahler, considerada por muchos una de sus cimas creativas (José Luis Pérez de Arteaga: «La Sexta sinfonía… constituye, junto a la Novena sinfonía, la obra maestra de su ciclo orquestal»), haya sido también la composición más problemática para su autor.

Antes de recordar cuáles fueron esos problemas, pensemos en lo primero: en el hecho de que es una de las grandes sinfonías de Mahler. Esa valoración no se hizo esperar tras su estreno, el 26 de mayo de 1906 en Essen (Alemania), por las orquestas de Essen y Utrecht dirigidas por el propio compositor. Poco después, desde España, el crítico Felipe Pedrell concluía un repaso crítico por la obra de este creador y, en especial, su VI sinfonía diciendo: «Ha de imponerse y se impondrá. El nombre de Mahler ha de ocupar, tarde o temprano, una página de honor en el libro de oro de la sinfonía». Alban Berg iría más allá: «Ésta es la única Sexta, a pesar de la Pastoral».

El momento vital en que Mahler compone esta obra maestra en cuatro movimientos es de bienestar personal y profesional, cuestión intrigante, debido al carácter trágico y pesimista que parece desprenderse sobre todo de la conclusión de la obra. Por entonces, entre 1903 (escritura de los movimientos centrales) y 1904 (composición del primero y último movimientos), Mahler atraviesa una buena relación con su esposa Alma Schindler y a ella va dedicado un tema célebre del primer movimiento («el tema de Alma»). Al parecer, Mahler podía disociar esos momentos de placidez y tranquilidad (¿o no eran tales?) de su obra, pues poco después del nacimiento de su segunda hija iba a componer, apenas acabada la Sexta sinfonía, las oscuras Canciones para los niños difuntos.

La Sinfonía Nº6 en la menor, como se dijo, tiene un sesgo pesimista que llevó a los propios editores de la partitura a imprimirle el subtítulo «Trágica». Esos editores sufrirían en carne propia los problemas de los que hablamos al principio y fueron con los que se enfrentó Mahler para dar por concluida la escritura de su obra. Y es que apenas acabado el último ensayo de la sinfonía antes de su estreno (en el que cuenta Pérez de Arteaga que «por primera vez no dirigió bien») Mahler decidió cambiar el orden de los movimientos internos. El Scherzo, que seguía al Allegro inicial, sugiere en su comienzo los compases del primero (que dicho sea de paso, tiene reminiscencias al inicio de la Primera de Bruckner). El parentesco sonoro entre el primer y el por entonces segundo movimientos le pareció a Mahler repetitivo, y entonces puso en segundo lugar al Andante, originalmente tercero, además de hacer otras correcciones entre las que se contaba la eliminación de un tercer golpe de martillo en el movimiento final (especificado en la instrumentación para que sonara «con la fuerza con que un hacha derriba un árbol»). Con ese nuevo orden se oyó el estreno de la obra y se hizo la reimpresión de las partituras, pero por motivos surgidos a partir de la duda de cuál sería el orden genuino (y un error al que contribuyó la mala memoria de Alma Mahler), durante largas décadas, a partir de los años 20, se volvió al orden Scherzo/Andante que abunda también en la mayor parte de la discografía. Hubo que esperar hasta finales del siglo pasado para que la investigación de un grupo de musicólogos (entre ellos, Gilbert Kaplan) dejara debidamente documentada la intención final del compositor y los directores restituyeran ya como regla y no como excepción el orden Andante/Scherzo.

La estructura definitiva, entonces, es:

1. Allegro energico, ma non troppo. Heftig, aber markig
2. Andante moderato
3. Scherzo. Wuchtig
4. Finale. Allegro moderato. Allegro energico

La Sinfonía Nº6 comienza, en efecto, con un Allegro energico, ma non troppo con las cuerdas golpeadas por los arcos y un timbal marcial, que suena hasta la entrada electrizante de las cuerdas más agudas. Aparece luego otra cita bruckneriana (esta vez, una alusión al Finale de la Séptima del de San Florián) y, tras un golpe de timbal, comienza el famoso «tema de Alma». La partitura ofrece a elección ejecutar un ritornello, otra de las variantes posibles de esta sinfonía, y tras ofrecer pasajes casi ensoñadores (en los que se oyen unos simbólicos cencerros y unos látigos) llega un final a toda orquesta.

El segundo movimiento, Andante moderato, es de una placidez y hermosura que han hecho que eminentes mahlerianos como Henry Louis de la Grange lo consideren entre las páginas más bellas jamás escritas por Mahler. Vale decir que no se ha resaltado demasiado la similitud entre uno de sus temas y la Pavana para una infanta difunta de Ravel, algo que por cierto daría más pasto a las especulaciones de presagio que se han vertido sobre esta obra como sobre los Kindertotenlieder.

El Scherzo es de una mordacidad insospechada si se considera el monumental movimiento análogo de la sinfonía precedente. No hay aquí sensación de alegría, sino de malicia, o al menos picardía. El movimiento está plagado de cambios de ritmo y combinaciones entre sus diferentes secciones. Es, por si hiciera falta decirlo, una demostración del poderío de Mahler como orquestador.

El Finale (Allegro moderato) es, por si no bastaba lo anterior, un verdadero monumento sonoro. Un movimiento descomunal que suele deparar una interpretación de media hora, en la que Mahler pone todo de sí para transmitir una angustia con pocos parangones en la historia de la música. El comienzo, sin embargo, es engañoso: un clima onírico es transmitido por las arpas y los metales, seguidos de toda la línea de violines que introducen la aparición de poderosos timbales. El ambiente ensoñado pronto se torna pesadillesco, como si las sombras de una tragedia, a veces amenazante, a veces lanzada en cacería, flotaran sobre todo el paisaje sonoro, impidiendo la aparición de una luz esperanzadora. Pronto Mahler lleva la música a territorios inexorables: tras la introducción falsamente alegre, arriba un motto (un motivo con redoble de tambores que el compositor utiliza en todos los movimientos) y se expone el tema principal que desemboca en un primer golpe de martillo, tras el cual la reexposición sobreviene de manera deliberadamente caótica, de manera que cuando llegamos al segundo golpe de martillo la tragedia está trazada. El último tramo es desesperante, debido a que Mahler introduce un atisbo de plenitud y tranquilidad en la nueva exposición de los temas, pero de pronto se derrumba una vez más todo con desesperación (en el momento en que originalmente sonaba el tercer y demoledor martillazo), para descender a la tristeza con un tramo final que consiste en una coda casi fúnebre, tocada por los vientos de metal en pianissimo, estalla en un fortissimo a toda orquesta cuyos últimos estertores son un pizzicato que suena como el último suspiro del protagonista, imaginario o no, de la obra.

http://oidofino.blogspot.com.ar/2011/03/mahler-discografia-esencial-sinfonia-n.html


sábado, 7 de marzo de 2015

Canciones con historia: Give Me Love (Give Me Peace on Earth) George Harrison

Luego de la disolución de The Beatles George Harrison demostró al mundo su talento infravalorado con su triple álbum All Thin Must Pass 1970 y con The Concert for Bangladesh en 1971. Luego de esto George decidió tomar un pequeño descanso y en 1973 vuelve al ruedo con su segundo álbum de estudio titulado Living In The Material World llevando al extremo lo expresado en su primer trabajo creando un estudio autobiográfico sobre lo más importante en ese momento su devoción por la religión hindú. La idea fue realizar un álbum de sonido básico y sin muchos adornos, para esto se desmarcaría de Phil Spector.

Con una buena acogida Living In The material World fue llevado al # 1 de las listas norteamericanas, en Canada repetiría la primera posición al igual que en Australía. En UK la casa de George se mantuvo en la segunda posición frenado por el soundtrack de la película That'll Be The Day donde participaba Ringo Starr, mientras que en Japón alcanzaría el # 9.

Living In The Material World:

Grabado en Apple Studios, # 3 Saville Row, Londres, Inglaterra desde octubre del 72 a enero del 73 a excepción de Try Some Buy Some grabada en 1971.

Todos los temas producidos y compuestos por George Harrison.

Personal : George Harrison: voz y guitarra, Ringo Starr: batería, Klaus Voorman: bajo, Nicky Hopkins: tecaldos, Gary Wright: teclados, Jim Keltner: batería, Jim Gordon: bacteria (en Try Some, Buy Some), Jim Horn: saxofón y flauta, Zakir Hussein: Tabla y John Barham: Strings.

Contenido:
El álbum abre con la brillante Give Me Love (Give Me Peace on Earth), un grandioso tema que es guiado por lo que se convertiría en la marca registrada de George durante el resto de su carrera, el slide guitar. La letra es una plegaria mistica de paz y amor dirigida al “Señor”. Cada coro esta precedido por el mundialmente conocido mantra OM, otra pista que nos indica de que trata el contenido global del disco. Muchos han categorizado a Give Me Love (Give Me Peace on Earth) como una secuela de My Sweet Lord.

Give Me Love (Give Me Peace on Earth) fue utilizado como single de presentación, este fue lanzado al mercado en el mes de mayo de 1973 llegando a ocupar el # 1 de las listas americanas quedándose allí durante cinco semanas, había sido precedido en las listas por el tema My Love de Paul McCartney and Wings del álbum Red Rose Speedway y fue desbancado de esa posición por el tema de Billy Preston Will It Go Round in Circles. En Inglaterra el single se ubicaría en el # 8 permaneciendo en cartelera por espacio de 10 semanas.

El lado B del single incluyó el tema Miss. O’ Dell que fue escrito en 1971 y esta basado en un empleado de Apple de nombre Chris O’ Dell. George había grabado varias tomas de esta seleccionando el corte más gracioso para ser utilizada en este single, de hecho se puede escuchar un ambiente festivo en el que no faltan las risas. Esta canción no aparecería oficialmente en ningún otro producto por mucho tiempo hasta la reedición de Living in The Material World en 2006.

http://revolution.beatlesperu.com/viewtopic.php?t=9484


La isla de Delos

La isla de Delos es una de las islas más pequeñas de las Cícladas y está deshabitada. Se sitúa enfrente a la isla de Rinia (también deshabitada) y a 2km al suroeste de Mykonos. Y es uno de los yacimientos arqueológicos más importantes de Grecia, de hecho, se considera uno de los cuatro principales del país; y ha sido declarado Museo Nacional.

Delos, isla sagrada
Delos era considerada la ya que, según la mitología, fue donde nacieron Apolo, dios de la música y de la luz, y su hermana Artemisa, diosa de la caza. Era una isla flotante que emergió agarrada por el tridente de Poseidón, pero Zeus la ató con cadenas al fondo del mar para que Leto, la madre de Apolo y Artemisa, pudiera dar a luz a sus hijos. Así, Delos le sirvió como refugio de la ira de Hera, esposa de Zeus, que se había enterado del embarazo de Leto.
La isla de Delos fue pues uno de los centros espirituales más importantes de los antiguos griegos y en la ciudad de Delos – situada al noroeste de la isla – se construyeron santuarios, templos, columnas de mármol, un teatro, un gimnasio…

Un poco de historia
La isla fue colonizada por los Carios en torno al III milenio a.C., y después fue colonizada por micénicos y jonios. Durante el siglo VII a.C. seguía siendo un centro de culto y en la capital de las islas del Mar Egeo, por ser el lugar del nacimiento de Apolo, por tanto, un lugar sagrado. Había un palacio donde luego se construiría el primer templo de Apolo, y alrededor edificios sagrados. Y a lo largo del siglo VII y VI a.C. se edificaron monumentos históricos como el Coloso de Apolo, los Leones de Delos y la estatua de Nicandra.

Pero a mediados del siglo VI a.C. los atenienses pasaron a controlar Delos y las islas cercanas, y ordenaron remover las tumbas y trasladarlas, además de prohibir los nacimientos y las muertes, para evitar la profanación de la isla sagrada. Por otra parte, los atenienses organizaban magníficos festivales en honor a Apolo cada cinco años. A finales del siglo II a.C. pasó a manos de Roma y fue declarada puerto franco, por lo que la isla se convirtió en un centro comercial que atraía a mercaderes de toda la zona.

Qué visitar en Delos
Desde el siglo XVII los europeos visitaban la isla atraídos por sus ruinas. Y a finales del siglo XIX arqueólogos franceses comenzaron las excavaciones de un yacimiento, que se considera uno de los más importantes de Grecia. De hecho, la isla de Delos forma parte del catálogo de lugares culturales protegidos por la UNESCO. En la actualidad es un conjunto de ruinas situadas al noroeste de la isla, que están admirablemente bien conservadas; como ya habíamos dicho es uno de los yacimientos griegos más importantes y mejor organizados.
Se pueden visitar varios grupos de ruinas, en total hay cuatro: el puerto comercial, los santuarios de Apolo y del Monte Cynthos y la región del lago sagrado.

Puerto Comercial
Detrás del puerto había lugares de almacenaje y casas de los siglos II y II a.C. con un patio rodeado con columnas y suelos de mosaicos.

Templos de Apolo
Detrás del puerto también empieza el camino sagrado por el que se entra al santuario, al oeste hay un altar y al este los tres templos de Apolo:
-Templo dórico (s.V-III a.C.), con frisos decorados, pero sin columnas en el interior, y con pocas esculturas.
-Templo ateniense dórico (425-417 a.C.)
-Templo Porinos Naos
Cerca del conjunto hay un santuario con un altar para sacrificios, el templo de Dionisios (al este) y los templos de Afrodita y Hermes (al oeste, en una explanada).

Óikos de los naxios
Es el monumento más antiguo de Delos, un edificio sagrado rectangular con ocho columnas en el centro, que está flanqueado por el Coloso de los naxios, un kurós de más de 9 metros (estatua masculina).

Monumento de los Toros
En la zona oriental del santuario habia una construcción gigantesca; el Monumento d elos Toros, cuya función se desconoce. Todavía se pueden distinguir tres partes del edificio.

La Terraza de los leones
Conjunto escultórico de mármol dedicado a Apolo (s.VII a.C.). De los 16 leones quedan sólo 5 enteros y 3 parciales.

Monte Cynthus
En la ladera del Monte Cynthus se encuentra el teatro (principios s.III a.C.), que tenía un aforo de 5000 personas. Yy en la cumbre hay restos de una residencia (III milenio a.C.). Hay muchas casas excavadas de gran riqueza arquitectónica y decorativa. Están la Casa de los Delfines, la Casa de las Máscaras y la Casa de Dionisio, las tres con impresionantes mosaicos en el peristilo. los tres templos de Apolo, el Camino de los Leones, las casas con atrios adornados con hermosos mosaicos y una bella decoración mural.

Barrio del Lago
El Barrio del Lago era la zona residencial de la ciudad, con la Casa del Frontón, la Casa de los Actores (con un peristilo atípico: un pórtico jónico por encima del pórtico de orden dórico comleto), y la Casa de los Tritones.

http://www.islamykonos.es/la-isla-de-delos