jueves, 11 de diciembre de 2014

Antonio Canova:Venus y Marte
1816-1822. Altura: 210 cm. Mármol.
Buckingham Palace, Londres.

El escritor y pintor alemán Fernow publicó en 1806 un librito sobre Canova donde dice que "en el estudio de Canova, que comprende una serie de amplias estancias, hallamos juntas todas las obras escultóricas que en estos momentos se están haciendo en Roma. (...) Se me representan en la imaginación los talleres de la Antigüedad en los que se realizaban las imágenes de los dioses y héroes de los griegos." Debido a las magnitudes de sus encargos, Canova se veía obligado a solicitar la colaboración de sus ayudantes. El, personalmente, no hace más que los modelos de sus obras, primero unos de cera, de pequeño tamaño, que le ayudan a clarificar su idea, y después el de barro, de las mismas dimensiones ya que la obra. El traslado de este modelo al mármol lo deja enteramente en manos de ayudantes cualificados. El solamente interviene, cuando la ejecución se halla ya bastante avanzada, para dar el toque maestro. Este último acabado puede llevarle semanas o incluso meses. Mientras realiza este trabajo, le leen, en traducciones italianas, las obras de los clásicos. En una carta a un amigo veneciano escribió: "Diréis que es imposible que una persona que trabaja de la mañana a la noche como un esclavo encuentre tiempo para leer. Lo cierto es que me paso el día entero trabajando como un esclavo, pero también es verdad que casi todo el día estoy escuchando a una persona que me lee, de tal forma que ya he oído pro tercera vez los ocho volúmenes de vuestra edición de Homero."
El tratamiento que da Canova a la superficie del mármol no consiste sólo en limarla y pulimentarla, sino que intentaba suavizar la superficie mate natural del mármol y darle el aspecto de un material más flexible. Para ello, y tras haber realizado el último pulimentado hasta el punto de cobrar la superficie un aspecto casi lustroso, manchaba la estatua con hollín. Pretendía de esta manera romper el blanco brillante del mármol y darle una especie de suavidad cérea que puede resultar desagradable a la vistas de quienes buscan en las estatuas un goce puro de la forma.
http://cv.uoc.edu/~04_999_01_u07/percepcions/perc82b.html

 Venus y Marte -  Círculo de Antonio Cánova -  Museo del Prado

1820 - 1830 - Mármol
233 cm x 125 cm x 60 cm - 1446,5 kg
Escuela

El Marqués de Salamanca ofreció en venta al Museo del Prado una obra de Antonio Canova, Venus y Marte, autoría con la que se adquirió y que ha sido mantenida durante décadas, pero que Pavanello en 1976, al catalogar toda la obra de Canova la consideró como copia. Centrado en el ambiente del taller canoviano lo valoró Reyero, hoy lo consideramos obra del entorno de Antonio Canova, quizá de la mano de Adamo Tadolini o de Rinaldo Rinaldi, de hacia la segunda década del siglo XIX. Esta espectacular escultura, realizada en mármol de Carrara, representa a la diosa del amor y la belleza que, aunque casada con Vulcano, se acompaña de su verdadero amor, el dios de la guerra: es una alegoría en la que Venus, como diosa de la paz intenta retener a Marte enlazando sus miradas y atrayéndole para que no vaya a la guerra. Es una iconografía que equilibra la fortaleza con la delicadeza, y es de excelente factura. Junto a este grupo escultórico que se exponía en Vista Alegre, el Marqués de Salamanca tenía otro grupo escultórico en su posesión del centro de Madrid en el paseo de Recoletos, con el que a veces se ha confundido, el magnífico grupo de Venus y Adonis, atribuido a Canova, que después fue a parar a la colección de Fernández de Villavicencio y Crooke [...] una afirmación del ambiente italiano y neorrenacentista buscado por Salamanca. Ello significa que el gusto del Marqués se decantaba por la compra de dos grupos del entorno de Canova. Este segundo grupo, fue vendido en Sotheby`s en 1992, y de nuevo subastado en Sotheby`s en 2008, y en la ficha técnica se propone una posible atribución a Rinaldi. El Museo del Prado solo compró por R. O. de 16 de junio de 1881 el grupo de Venus y Marte, y otras obras de Tenerani o Lazzerini, junto con un buen conjunto de cuadros. El precio fue alto, 40.000 pts. de la época, y a finales del mes de junio, la obra ya había ingresado en el Museo. El 17 de mayo de 1924 el Subsecretario del Ministerio de la Guerra solicitó al Museo de Arte Moderno, a donde había pasado en 1896, esculturas para embellecer sus jardines, entre las que solicitó este grupo. Reunido el Patronato, el Director del Museo confirmó el 23 de mayo el acuerdo de cesión en depósito de esta obra al Palacio de Buenavista, aunque finalmente parece que no se llevó a cabo. Se trata de una versión muy fidedigna de la obra original del maestro Antonio Canova, Venere e Marte, cuyo modelo del yeso de 1816 se conserva en la Gipsoteca de Possagno, con las marcas del sacado de puntos, que mide 2,10 x 0,60 x 1,22. También allí se conservaba un modelo en barro cocido, destruido en 1917 en el bombardeo de la Gipsoteca durante la Primera Guerra mundial.
Por lo que se refiere al mármol de 2,10 de alto realizado entre 1816 y 1822 se encuentra en Londres, en el Palacio de Buckingham, ubicado en la llamada Escalera de Ministros en la planta baja al final del Vestíbulo de Mármol, que da acceso a los salones privados. Fue concebido para el rey de Inglaterra Jorge IV, quien se lo encargó en 1815 cuando Canova estaba en la capital británica, en el que retoma, aunque en posición inversa y otra actitud, su grupo de Cupido y Psique. Representa una alegoría de la guerra y la paz, buscando el contraste entre la fuerza y la gracia, obra que concluyó con la ayuda de su colaborador Adamo Tadolini. Se expuso con gran éxito en 1822, y las descripciones y grabados valoraban sobremanera su gran belleza y el contraste del tratamiento de la figura masculina como el señor de la guerra, frente a la suavidad de la figura femenina que lo serenaba. En cuanto al ejemplar de la colección del Marqués de Salamanca, la mano de alguno de los escultores que trabajaron colaborando con Canova puede estar detrás de su factura: Adamo Tadolini, Rinaldo Rinaldi o incluso Baruzzi, pues todos trasladaron al mármol los bocetos del maestro.
De cualquier forma, se trata de una de las obras importantes de factura italiana en el Museo del Prado y en el contexto artístico español. La calidad de la obra que se conserva en Madrid es magnífica y son muy pocos los detalles que se aprecian diferentes en relación con la primera versión marmórea de Canova en Londres, ambas de tamaño natural. La factura de la obra del Prado es menos pulida en su acabado general, y más profunda en la manera de tratar los cabellos creando más sombras, tanto en los rizos como en las ondas del cabello de Venus. Hay también algunos matices que varían, como el tratamiento de algunos pliegues de la tela que porta Venus, o el diseño de la cornucopia que tiene importantes variantes en su composición, o la banda de cuero que cae sobre el escudo en la parte posterior, que tiene ojales en la versión de Buckingham pero no los tiene en la del Prado, y asimismo alguna variante en los motivos decorativos de la vaina de la espada. Por otro lado, se diferencia la punta de lanza -que en ambas composiciones es una pieza añadida pues se saldría por su altura del bloque de piedra a tallar-. En los primeros grabados del grupo la lanza no está concluida, pero en el yeso de Possagno y en el grabado en la obra de Cicognara la punta aparece redondeada. Sin embargo, la punta del ejemplar del Prado recorta sus bordes inferiores, mientras que el modelo británico concluye la punta con formas redondeadas. En cualquier caso, el destacado modelado de los cuerpos es muy similar, así como la relación entre ambos dioses a través de su intensa mirada, especialmente de Venus (Texto extractado de Azcue, L.: "La escultura italiana del siglo XIX en Madrid y el coleccionismo privado (II)",Boletín de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, 2009, pp. 153-154).

https://www.museodelprado.es/coleccion/galeria-on-line/galeria-on-line/zoom/2/obra/venus-y-marte/oimg/0/





Ares (Marte para los romanos)

Ares, hijo de Zeus y de su esposa Hera, fue el dios griego de la guerra. Era uno de los 12 dioses del Olimpo y, al contrario que la dotada e inteligente Atenea, que también dirigía los asuntos de la guerra, se trataba de un dios sin modales, violento y agresivo, sin ningún aspecto positivo para la humanidad. Incluso su padre le dijo que le odiaba más que al resto de los dioses y que la única razón para tolerarle era que fuese hijo suyo y de su esposa Hera.

Fue en el Argo donde embarcaron los Argonautas hacia la lejana tierra de Colchis, al este del mar Negro. La embarcación podría haber sido muy similar a esta réplica moderna de un barco ateniense.

Ares no se casó, pero sí tuvo muchas relaciones extramatrimoniales. Su relación más famosa es la que mantuvo con Afrodita, la diosa del amor y de la belleza, a través de la cual concibió a Armonía, esposa de Cadmio, y a los gemelos Deimos (temor) y Fobos (miedo). La historia señala que Hefesto, marido de Afrodita, advertido sobre el engaño al que estaba sometido, fabricó una red casi invisible para ponerla sobre su lecho. Cuando Ares y Afrodita yacían sobre él, quedaron atrapados y fueron humillados ante todos los dioses.

Ares era adorado en la ciudad-estado griega de Esparta, en la que todo se relacionaba de alguna manera con la guerra. Pero también se le respetaba en Atenas, ciudad de la cultura pues la colina en la que se situaba la alta corte de justicia ateniense se llamaba el Areópago o «colina de Ares». De acuerdo con el mito, un hijo de Poseidón había violado a una mortal, Alcipe, en ese lugar. Ares le castigó hasta la muerte y allí mismo fue juzgado y absuelto por el consejo de los dioses, motivo por el cual la colina llevó su nombre desde entonces.

Ares apoyó a los troyanos durante el conflicto con Grecia, si bien su actuación en el campo de batalla fue discreta. El mortal Diomedes le hirió y le hizo huir, pero también fue derrotado después de enfrentarse a Atenea. El gran héroe Heracles no fue menos e hirió a Ares en alguna ocasión.

En el Argo se embarcaron los más destacados héroes de Grecia. Este relieve de un barco fue realizado en el siglo vin a.C. en Anatolia, cuya costa norte fue recorrida por los Argonautas.

Marte, el dios romano de la guerra que era el equivalente de Ares, era mucho más significativo para los romanos, ya que era el padre de Rómulo y Remo, fundadores de la ciudad. De hecho, fue parcialmente responsable del enorme éxito del nuevo imperio, que se estableció gracias a sus ejércitos perfectamente organizados y su obsesión por la supremacía militar. Los romanos le dedicaron el Campus Martius o Campo de Marte en el corazón de la ciudad. También el mes de marzo recibió ese nombre en su honor.

http://mitosyleyendascr.com/mitologia-griega/ares/

Para conocer más…

La función guerrera en la mitología de la Gallaecia antigua.
Contribución a la sociología de la cultura castreña  http://gredos.usal.es/jspui/bitstream/10366/71237/1/La_funcion_guerrera_en_la_mitologia_de_l.pdf















miércoles, 10 de diciembre de 2014



ESTOY HARTA - Alizee

Tengo la piel suave 
en mi baño de espuma 
me salpico 
¡y me río! 
Mi pez rojo 
en mi baño de espuma 
lo abrazo, y le digo: 

No tengo problemas 
soy vaga, pero no mala 
soy vaga 
me baño en el agua 
eso es lo importante 
estoy muy contenta 
mientras el 
TIEMPO pasa 

Tengo la piel suave 
en mi baño de espuma 
me quemo a la sombra 
de las pompas 
todo es maravilloso (aquí) 
en esta cama blanca (oh sí) 
hago la 
LISTA de las cosas 
que me molestan. 

(ESTRIBILLO) 
Estoy harta de los que lloran, 
que sólo van a 2 por hora, 
que se lamentan y que no se mueven 
de una idea fija. 
Estoy harta de los que se quejan 
de los extremistas con 2 
BALAS 
que ven la 
VIDA siempre negra 
quejándose oportunamente 

Estoy harta de la hermana mayor 
que siempre llora y se queja 
harta de la lluvia, de los calabacines 
que me hacen devolver sobre la colcha. 

Estoy harta de los cínicos 
que nunca se avergüenzan 
Estoy harta de estar harta, también... 

Tengo la piel suave 
en mi baño de espuma 
sin sacudidas sísmicas 
Descanso cómodamente (aquí) 
y me distraigo (oh si...) 
es mi estado acuático 
¡ahí está el quid! 

(ESTRIBILLO)

CANCION DEL JINETE  - Federico García Lorca 

En la luna negra de los bandoleros, cantan las espuelas
en la luna negra de los bandoleros, cantan las espuelas
¡Ay! Caballito negro
¿Dónde llevas tu jinete muerto?
¿Dónde llevas tu jinete muerto?

Las duras espuelas del bandido inmóvil, que perdió las riendas
las duras espuelas del bandido inmóvil, que perdió las riendas
¡Ay! Caballito frío
Que perfume de flor de cuchillo
Que perfume de flor de cuchillo

En la luna negra sangraba el costado, de Sierra Morena
en la luna negra sangraba el costado, de Sierra Morena
¡Ay! Caballito negro
¿Dónde llevas tu jinete muerto?
¿Dónde llevas tu jinete muerto?

En la luna negra un grito y el cuerno, claro de la hoguera
en la luna negra un grito y el cuerno, claro de la hoguera
¡Ay! Caballito frío
Que perfume de flor de cuchillo
Que perfume de flor de cuchillo







UN MINUETO DE FRANÇOIS COUPERIN

El minué es una danza de origen francés que fue introducida en el marco de la danza cortesana por el compositor y bailarín Jean-Baptiste Lully bajo el patronazgo del Rey Sol. El género alcanzará en Francia un icónico estatus, al lado de otras formas musicales elevadas al rango de danza nacional por Lully como la chaconne o el rondeau.
En este artículo de la serie dedicado al minueto analizaremos una obra de François Couperin, uno de los más grandes virtuosos de los instrumentos de tecla de su tiempo. Couperin, perteneciente a una notable familia de músicos, dedicó la mayor parte de su producción musical al clave.

Concert royal nº1 – 6. Menuet en trio [1722]
La publicación en 1722 de los cuatro conciertos “reales” que componen la colección que incluye este minueto, obedece tanto al creciente interés editorial por la música de cámara -una actividad burguesa en auge- como al consolidado prestigio de François Couperin, quien se había convertido cinco años antes en organista y compositor de cámara del rey Luis XV de Francia. Las obras, en efecto, habían sido compuestas con anterioridad, en vida del anciano Luis XIV (fallecido en 1715), para los conciertos dominicales que éste celebró en Versalles durante sus dos últimos años de vida y en los que el propio Couperin participó junto a otros músicos de la corte.
Las obras están escritas en su mayor parte en dos pentagramas y sin especificar la formación exacta, de tal modo que pueden interpretarse de diversas formas, incluso en teclado solo. Los músicos que formaron parte de los conciertos reales fueron el violinista François Duval, el oboísta y fagotista André Danican Philidor, el gambista Hilaire Verloge y el fagotista Pierre Dubois, lo cual puede dar una idea de las opciones posibles.
En concreto, el minueto está escrito “en trío”, es decir, con dos voces agudas y bajo, haciendo posible su interpretación por parte de dos instrumentos agudos (flauta y violín, en la grabación siguiente) y bajo continuo (clave).

Análisis
El sexto movimiento del Premier concert royal nº2 en Sol tiene una estructura de minueto simple (sin trío). El minueto presenta una estructura ternaria, en la cual la segunda sección tiene exactamente el doble número de compases, resultando tres bloques de 8 compases distribuidos según el esquema ||: 8 :||: 8 | 8 :||.

El primer bloque, en Sol menor, tiene final semicadencial, después de haber realizado una tímida cadencia imperfecta en el c.4. El segundo bloque se establece en la región del relativo mayor (Si ♭) y presenta también una leve subdivisión en 4 + 4 compases que configuran una relación de semicadencia y cadencia perfecta. El tercer bloque es el que presenta una división más clara en segmentos de 4 compases: Los cuatro primeros retornan a Sol mayor y efectúan una semicadencia que prepara la entrada con carácter de reexposición (a’) de los cuatro compases finales, que cierran en cadencia perfecta.
Minueto (Sol m): [a (8 cc.) SC :||: b (8 cc.) III CP | (4 cc.) I SC | a’ (4 cc.) I CP] (36 cc.)

Desde el punto de vista motívico, todo el minueto gira en torno al motivo inicial de corcheas ascendentes, que es imitado por el bajo en el compás 2. El motivo invertido es utilizado en el segundo bloque como sujeto de una serie de imitaciones en las dos voces superiores. El tercer bloque reutiliza las formas original e invertida del motivo en una voz superior y en el bajo, pero solo en los 4 últimos compases reaparece en forma reexpositiva. Es decir, de forma similar a como apareció en el primer bloque.

https://bustena.wordpress.com/2014/10/14/analisis-couperin-minueto/





Al realizar un estudio minucioso de infinidad de composiciones a partir de finales del siglo XV, encontraremos cierta particularidad en ellas, una característica que independiente de su esquema musical, de su tiempo y demás características definidas podemos observar con gran nitidez, es un esquema armónico-melódico conocido como “La Folia“.
La Folia es uno de los fenómenos más notables de la historia de la música.
Esta melodía simple pero intrigante fue publicada por primera vez en 1672.
Sus raíces se remontan al siglo XV y aun seguiría siendo un gran desafío para numerosos compositores hasta el día de hoy.
También conocida como Follia, Folías de España oFolía de España, es uno de los temas musicales europeos más antiguos y recurrentes.
Dicho tema indica también dos temas musicales parecidos, pero con características muy definidas (la “folía temprana” y la “folía tardía“).
La primera mención al término “folia” es la hecha por el dramaturgo portugués Gil Vicente en su obra de teatro “Auto de Sibilla Cassandra” (1503), en la que se la menciona como una danza interpretada por pastores, de igual manera Sebastian de Covarrubias en su Diccionario Tesoro de la lengua castellana, publicado en 1611, habla de la folía señalando que:
Fue, sin duda, uno de los bailes más populares de la Castilla del Siglo de Oro. Se caracterizaba básicamente por su compás ternario, fácil acompañamiento instrumental y una desenfrenada puesta en escena.Por su forma musical, estilo y etimología del nombre, se ha sugerido que la melodía surgió como una danza a mediados o finales del siglo XV, bien en Portugal o en la zona del viejo reino de León (zona de influencia galaica),o bien en el levante valenciano.
El esquema armónico de folía, (i)-V-i-VII-III-VII-i-V-(i), apareció en las fuentes musicales por lo menos un siglo antes de las primeras piezas fechadas llamadas “Folía”, que son de finales del siglo XVI. Lo encontramos por primera vez a finales del siglo XV en fuentes de música vocal tanto de origen italiano (Cancionero Musical de Montecassino, Cancionero Musical de Perugia, repertorio de las frottole) como español (principalmente en el Cancionero Musical de Palacio y, más tarde, en las ensaladas).
Aunque aparezca en diferentes países bajo numerosas variantes que comparten las mismas características estructurales, no es posible establecer en base a las fuentes musicales cuál fue el país de procedencia del esquema de folía.
Tal como sugieren investigaciones recientes, el esquema de folía fue en origen el resultado de la aplicación de un proceso de improvisación y composición específico a simples melodías en modo menor.
Lo que se difundió por Europa a partir de finales del siglo XV, no fue un tema específico formado por una secuencia de acordes, sino una técnica de composición-improvisación que podía generar estas secuencias de acordes. Por esta razón encontramos el esquema de folía en tantas obras que tienen títulos y orígenes diferentes.

En la música renacentista y barroca occidental se distinguen con claridad dos temas que son llamados “Folía” en las fuentes musicales: un tema de folía temprana y un tema de folía tardía. La temprana, que aparece por primera vez en el manuscrito Ramillete de flores, del autor español Antonio Martín y Coll a finales del siglo XVI, se basa prevalentemente en el esquema armónico i-V-i-VII-i-V / i-V-i-VII-i-V, aunque existan numerosas variantes significativas.
Fue un tema muy popular sobre todo en España, Italia y Francia tal como demuestra su presencia en numerosas fuentes manuscritas e impresas, prevalentemente para guitarra.
Las versiones de la folía y sus variaciones han sido muchas, y van desde las tres variaciones para arpa de Alessandro Scarlatti hasta las 26 variaciones para orquesta sinfónica compuestas por Antonio Salieri. Además, muchos autores clásicos incluyeron el tema de la folía tardías en sus obras, tal y como lo hicieron Arcangelo Corelli en sus Concerti Grossi, Domenico Scarlatti, Antonio Vivaldi, George Frideric Handel, y Johann Sebastian Bach en algunas cantatas.

De la tradición que alcanza la folía en el panorama musical de los siglos XVI-XVIII tenemos un ejemplo representativo en el amplio listado de compositores de primera fila que se interesaron por elaborar diferencias sobre la Folía para los instrumentos de los que eran maestros.
A partir de la segunda mitad del siglo XVII, la folía adquiere una naturaleza distinta. Más refinada en cuanto a la forma, adopta nuevas progresiones armónicas que la convierten en un tema musical recurrente y conocido en la práctica totalidad de Europa y de corte similar a las formas que presentan chaconas, pasacalles y zarabandas.
En el siglo XIX la popularidad de la Folía disminuyó, pero en el siglo XX algunos compositores retomaron el interés por la misma. Es el caso de Sergei Rachmaninov en sus Variaciones sobre un tema de Corelli (1931) y Manuel María Ponce con sus Variaciones y fuga sobre la Folía de España para guitarra.
la folía ha sobrevivido como danza popular en algunas regiones, como en las Islas Canarias, donde existen las llamadas Folías Canarias, de tempo lento, o en Brasil, donde la cultura afro-brasileña mantiene las llamadas Folia de Reis (Folía de Reyes). Sin embargo, éstas últimas no parecen mantener una clara relación con la folía clásica.

http://www.musicaantigua.com/la-foliaun-fenomeno-sin-precedentes-en-la-historia-de-la-musica-una-de-las-bases-musicales-del-renacimiento/


Historia de Sinuhé

La historia relata las aventuras de Sinuhé, que conoce accidentalmente un complot para asesinar al faraón Senusert I antes de ascender al trono.

La Historia de Sinuhé es un cuento egipcio que se conoce por dos de los papiros de Berlín, el 10499 (B), que contiene algunos fragmentos de la historia, y el 3022 (R), más completo, descubierto por el egiptólogo Chabás en 1863. También se han encontrado partes del texto en otros papiros y en algunos ostraca.
Sinuhé (s3-nh.t, Sanehet, "Hijo del sicomoro") es, según sus palabras, «el tesorero del rey del Bajo Egipto, gran amigo único, dignatario administrador de los distritos del soberano en las tierras de los asiáticos, verdadero conocido del rey, su bienamado seguidor». Sinuhé dice: «Yo soy un acompañante que sigue a su señor. Sirviente en el harén del rey de la noble heredera de grandes favores la esposa del rey Senusert en Jenemsut; la hija del rey Amenenhat, Neferu, la muy honrada.»
Senusert I (Sesostris en versión griega) –de quien era servidor Sinuhé–, fue el segundo faraón de la dinastía XII, del Imperio Medio, que gobernó de c. 1956 a 1910 a. C.; los primeros años fue corregente con su padre, Amenemhat I, que fue asesinado hacia el año 1947 a. C., fecha en que da comienzo el relato.

Estilo
El relato está narrado en primera persona, con una fácil erudición que muestra coloridas descripciones de lugares, costumbres y personas tanto de Egipto como de otras tierras, lleno de datos precisos y con una exaltación del sentimiento y pensamiento egipcios: la añoranza de la patria, el anhelo de vida eterna, la hospitalidad.
Es una de las obras maestras del cuento, género que en Egipto alcanzó gran desarrollo en el Imperio Medio. Éste es de tipo realista, y utiliza la prosa en casi toda la narración, aunque tiene partes en verso: cuando describe como es Sesostris ante el rey de Retenu, lo hace con un poema que exalta sus virtudes guerreras, aunque acaba de forma lírica:
«Es el muy amado, el lleno de dulzura que a muchos ha conquistado por el amor».

Historia
Sinuhé no narra las conspiraciones de palacio ni de ningún otro antecedente: los da por conocidos. Es posible que el anónimo autor no quisiera comprometerse.
Cuando Sinuhé viaja para avisar a Sesostris (en campaña contra los libios) de la muerte de su padre, se le adelantan otros mensajeros: oculto, escucha cómo un hombre informa a otro de los príncipes de la casa real, y se da cuenta de que Amenemhat ha sido asesinado según las órdenes dadas por este príncipe. Asustado, creyendo que al no haber sido capaz de descubrir el complot y avisar al corregente sería castigado, huye de Egipto y se encamina al país de Retenu (Siria).
Invitado por el príncipe Amunenshi, se casa con la hija de éste y llega a ser jefe de una de las tribus y un reconocido general, consiguiendo riquezas y poder, sobre todo después de vencer en un duelo a un príncipe local.
Ya anciano, intercambia misivas con el Faraón y regresa a Egipto tras repartir sus bienes entre sus hijos, para ser enterrado allí con todos los ritos necesarios para conseguir la vida eterna en el momento de la muerte, siendo alojado mientras con toda clase de comodidades por el rey, que le entregó una casa de campo con sus rentas, y ordenó la preparación de una tumba de piedra y un rico ajuar funerario.

Explicación
¿A qué se debió la huida de Sinuhé? La historia podría haberlo explicado mejor, pero los hechos eran tan conocidos por la audiencia, que el relato se limita a mencionarlos. La conspiración de algún príncipe, posible culpable de la muerte de Amenemhat, se menciona de pasada. Esto impide comprender cuáles fueron los temores de Sanehet, y por qué creyó que Sesostris le condenaría. Tampoco en las cartas que envía en su vejez lo explica, se limita a presentar disculpas.

Análisis
Esta historia está considerada como el mayor logro de la literatura egipcia antigua. Combina en una singular narración una gama extraordinaria de estilos literarios, y es también notable el examen que hace de los motivos de su protagonista. El poema analiza continuamente las razones de la huida de Sinuhé y su posible culpabilidad. Al situar a un miembro de la cultura egipcia en otra sociedad, el poema explora lo que debe ser un egipcio, sin negar la asunción egipcia de que la vida en el exterior de Egipto no tenía sentido.

Repercusión
• Basándose en esta historia, el escritor finlandés Mika Waltari escribió en 1945 una novela llamada Sinuhé, el egipcio, aunque trasladándola a los tiempos de Akenatón (Amenhotep IV), y mezclándola con las conspiraciones que hubo en este reinado debido a la fracasada revolución religiosa. Fue llevada al cine en 1954.
• Naguib Mahfuz, escritor egipcio ganador del premio Nobel, escribió en 1941 Awdat Sinuhi. Se basa directamente en los textos antiguos, aunque se toma la licencia de añadir algunos amoríos que no aparecen en el original.

Wikipedia

Sinuhé el egipcio pdf
http://bdigital.bnjm.cu/docs/libros/PROC2-3224/Sinhue,%20el%20egipcio.pdf