martes, 11 de noviembre de 2014

Rachmaninov: Concierto para piano nº 2


El Concierto Nº 2 para piano y orquesta op. 18 de Sergei Rachmaninov nació orgullosamente tardío (1901), posromántico y decadente, monumento sin par a la suntuosidad de la nostalgia, basado en el fatalismo y el pesimismo inherentes al autor, e impregando de apasionado color ruso. Perfectamente equilibrado en forma y fondo, aúna solidez arquitectónica y riqueza melódica ligada a su flexibilidad: todas las modulaciones son suaves y graduales, sin repentinos cambios a distantes tonalidades. Rachmaninov pensaba que la misión de la música era dar expresión tonal a los sentimientos, y así, languidez, olvido y belleza solemne se dan cita en la rica y cálida orquestación, predominando cuerdas y maderas, y permitiendo a los metales brillar sólo en los clímax.
Su estructura es una personalísima mezcla de la clásica concepción en tres movimientos y el poema sinfónico romántico de desarrollo continuo:

I Moderato: Aunque la obra proviene de un periodo de dudas personales, los acordes de apertura anclados al fa grave, que se expanden cromática y dinámicamente desde un pp a un poderoso ff, nos lanzan a un trágico paisaje de lacrimosos arpegios que acompañan al magullado tema en las cuerdas y clarinetes. Una anhelante sección de transición nos transporta al modo mayor con una llamarada de las trompas. Habiendo sido sumergido en las densas texturas orquestales, el piano regresa a la superficie, introduciendo un antagónico y rapsódico segundo tema. Florecientes melodías son acompañadas por borneantes arpegios en la tesitura grave, dando una sensación de libertad emocional. Las densas armonías cromáticas intensifican este humor antes de que varios solos en las maderas y las trompas dialoguen amorosamente con el piano. Sigue un dinámico desarrollo en cinco secciones aparentemente ileso del torbellino emocional anterior, conduciendo a la recapitulación de los temas y a una belicosa coda que cierra el movimiento.

II Adagio sostenuto: Escrito en forma de lied ABA, es un etéreo nocturno de elegancia sinuosa que parte de cuatro compases introductorios que modulan suavemente desde el do menor que cierra el moderato a la lejana clave de mi mayor. Una serie de arpegios al piano envuelven el canto que hace la flauta del quejumbroso y soñador tema antes de cederlo al clarinete, rodeado por un halo de cuerdas, y posteriormente al piano y otros solistas dialogantes. Cambios armónicos profundizan en una serie de violentas variaciones que ondulan libremente entre la orquesta y el piano, previas a una cadenza virtuosística que retorna hasta la serenidad inicial, esta vez en los violines. 

III Allegro scherzando: Formalmente un rondó, comienza con una imprudente giga que nos devuelve a la tonalidad de do menor del inicio. La exposición del sencillo primer tema (alternando semitonos y una célula rítmica de una negra y dos corcheas) cede paso a una martilleante rapsodia de transición, con brillantes pasajes del solista y marciales metales y percusión. El rápido tempo amaina en el segundo tema: meditativo, melancólico, de aire oriental en sus acordes, desplegado por violas y oboe. El piano responde con dolorosas suspensiones armónicas y secuencias melódicas que se imponen. La arrebatada orquesta y las pirotecnias del piano conducen al restablecimiento escalonado de los temas, rampantes en su amorosa gloria, antes de la coda procure un cierre centelleante. 

http://ipromesisposi.blogspot.com.ar/2013/04/rachmaninov-concierto-para-piano-n-2.html




Wolf, Hugo

Romanticismo - Austria [1860-1903]

Apasionado pero pobre, su situación económica postergó su carrera como músico. Fue un profundo admirador de Wagner.
Desde las páginas musicales del Wiener Salonblatt adquirió numerosas enemistades y se enfrentó al academicismo de Brahms, defendiendo a ultranza a Bruckner y Wagner.
La publicación de unas canciones y la muerte de Wagner coincidieron con su época más creativa, en la que trabaja vertiginosamente, componiendo 50 canciones sobre textos de Goethe en tres meses y medio.
Admirador de los poetas Eduard Mórike, Eichendorff, autores españoles traducidos por Geibel e italianos adaptados al alemán por Heyse.
Progresivamente comenzó a reconocer su valor artístico y el estreno en 1897 de algunas de sus obras obtuvo un gran éxito.
Algunos lo ven como al Wagner del lied.

Cronología
1860 Nació el 13 de marzo en Windischgrátz (entonces Austria, ahora Eslovenia).
1870 Estudió en el colegio secundario de Graz.
1875 Ingresó en el Conservatorio de Viena.
1881 Fue nombrado director asistente de Karl Muck en Salzburgo.
1884 Fue crítico musical en el Salonblatt.
1887 Publicó dos volúmenes de canciones. Época de fervor creativo.
1891 Abandonó repentinamente la composición.
1895 Volvió a la composición, ahora con su primera ópera.
1896 Compuso las Canciones a Heine, Shakespeare y Lord Byron.
1897 Se creó una segunda Sociedad Hugo Wolf enViena, después de la de Berlín.
1898 Fue internado en un asilo psiquiátrico.
1903 Murió el 22 de febrero en Viena.

Principales Obras
1884 Cuarteto de cuerda en re menor.
1885 Penthesilea (poema sinfónico).
1888 Canciones de Eichendorff.
1889 Canciones de Mórike. Canciones de Goethe.
1890 Cancionero español. Viejas melodías  (canciones sobre textos de Keller).
1891 Cancionero italiano.
1895 El corregidor (ópera).

http://www.hagaselamusica.com/ficha-compositores/romanticismo/wolf-hugo/


lunes, 10 de noviembre de 2014

NOCTURNO – RUBÉN DARÍO

Quiero expresar mi angustia en versos que abolida
dirán mi juventud de rosas y de ensueños,
y la desfloración amarga de mi vida
por un vasto dolor y cuidados pequeños.

Y el viaje a un vago Oriente por entrevistos barcos,
y el grano de oraciones que floreció en blasfemia,
y los azoramientos del cisne entre los charcos
y el falso azul nocturno de inquerida bohemia.

Lejano clavicordio que en silencio y olvido
no diste nunca al sueño la sublime sonata,
huérfano esquife, árbol insigne, obscuro nido
que suavizó la noche de dulzura de plata...

Esperanza olorosa a hierbas frescas, trino
del ruiseñor primaveral y matinal,
azucena tronchada por un fatal destino,
rebusca de la dicha, persecución del mal...

El ánfora funesta del divino veneno
que ha de hacer por la vida la tortura interior,
la conciencia espantable de nuestro humano cieno
y el horror de sentirse pasajero, el horror
de ir a tientas, en intermitentes espantos,
hacia lo inevitable, desconocido, y la
pesadilla brutal de este dormir de llantos
¡de la cual no hay más que Ella que nos despertará!


Canciones con historia: Time – Alan Parsons Project

Time pertenece al álbum de 1980 The Turn Of a Friendly Card.

Time evoca la nostalgia, la tristeza, la esperanza, la muerte...
Porque el tiempo fluye, como el agua de un río, en su camino hacia el mar.
Canción hermosa donde las haya.

The Alan Parsons Project fue un grupo británico de rock progresivo formado en 1975 en Londres. El grupo gozó de gran popularidad entre1982 y 1985 con los álbumes The Turn of a Friendly Card, Eye in the Sky, Ammonia Avenue y Vulture Culture.

Estaba liderado por Alan Parsons y Eric Woolfson y en él participaron varias alineaciones de músicos, así como el arreglista y director de orquesta Andrew Powell. Cada uno aportaba su granito de arena al grupo: Alan Parsons como productor, ingeniero y compositor; Eric Woolfson como productor ejecutivo, compositor y vocalista; y Andrew Powell como orquestador y arreglista
. Además se rodearon de una serie de músicos y vocalistas para cada uno de sus proyectos entre los que se encontraban como músicos Ian Bairnson, David Paton o Stuart Elliot y como vocalistas el propio Eric Woolfson, Lenny Zakatek, John Miles, Chris Rainbow o Colin Blunstone entre muchos otros.

Lanzaron varios discos con un gran cuidado en la producción y creatividad como: Tales of Mystery and Imagination, I Robot, The Turn of a Friendly Card o Eye in the Sky; y donde se destacan temas como "Don't Let It Show", "Time", "Eye in the Sky", "Silence & I" y "Old And Wise".

A finales de los 80, Eric Woolfson abandonó el grupo para dedicarse a componer para musicales de teatro; sin embargo, volvieron a reunirse momentáneamente con el breve proyecto Freudiana. Alan Parsons ha seguido creando nuevos temas pero firmando con su nombre (sin el Project), debido a problemas con la parte de los derechos que mantenía Woolfson sobre el nombre del grupo. Actualmente en sus giras vuelve a rescatar el nombre original, con permiso de Eric, denominándose Alan Parsons Live Project.

En los años 2004-2005, Alan Parsons Live Project hizo una gira mundial para dar a conocer sus últimos proyectos y recordar los éxitos de siempre, consiguiendo el "lleno" allá donde iba.
Woolfson falleció el 2 de diciembre de 2009, a los 64 años de edad, tras una larga lucha contra el cáncer
.
Wikipedia


IVÁN IV - “EL TERRIBLE”

Los historiadores destacan en especial la influencia de dos monarcas en el destino de Rusia. Se trata del emperador Pedro el Grande, que abrió al país el mundo europeo, y del zar Iván IV, quien al final de su gobierno recibió el apodo de “el Terrible”. Tras su muerte, Rusia se hundió en unos desórdenes que estuvieron a punto de acabar con el país.

El historiador Nikolái Karamzín escribió que el reinado de Iván IV fue esplendoroso en sus comienzos pero en su declive dejó el país como si de nuevo hubiera sufrido la devastación de las invasiones tártaras del siglo XIII. Otro historiador, Vasili Kliuchevski, comparó al zar con un guerrero ciego que, según una antigua leyenda, para matar a sus adversarios echó abajo la casa en la que él y estos estaban.
En 1547 a los diecisiete años de edad Iván le dijo al metropolitano Makari —máxima autoridad religiosa ortodoxa rusa— que quería casarse y convertirse en el primero de los grandes príncipes rusos en hacerse llamar oficialmente “zar de toda la Rus”. El dieciséis de enero en una de las iglesias del kremlin de Moscú durante la ceremonia solemne de coronación Iván recibió el título de zar y el tres de febrero contrajo matrimonio con Anastasía Zajárina-Románova.

El número de enlace de Iván IV no se conoce con exactitud. Los historiadores mencionan a siete esposas, de las que solo cuatro son legítimas desde el punto de vista del derecho eclesiástico ortodoxo (en realidad se permiten únicamente tres matrimonios, el cuarto fue autorizado porque el zar juró que la tercera esposa murió súbitamente y virgen). Para seleccionar a la zarina habitualmente se convocaban a más de dos mil pretendientes. Entre ellas, el zar elegía personalmente, primero, a veinticuatro candidatas, después a doce y al final a su futura cónyuge. La familia de la escogida se enriquecía y ocupaba importantes cargos en la corte.

Karamzín escribe que, cuando eligió a su primera esposa, Anastasía, Iván estaba guiándose, en primer lugar, por las cualidades personales de la novia y no por su procedencia noble. El primer matrimonio duró trece años, el período más fructífero y positivo del reinado del zar ruso. En primer lugar Iván procedió a la reforma de los organismos del poder local sustituyendo a los gobernadores enviados desde Moscú por un gobierno elegido por la nobleza local. Los nuevos organismos administrativos se ocupaban de los impuestos, de la justicia en los casos menores, del cuidado de las tierras comunales, etc.

En la época de Iván IV se fortaleció el sistema de ministerios que se ocupaban de las solicitudes y quejas que llegaban al zar, de los asuntos exteriores y de la seguridad interna, del equipamiento de la infantería y de las finanzas. El zar ordenó un catastro de tierras y terrenos baldíos, los cuales repartió entre la nobleza militar. Cada guerrero del zar tenía derecho a 170 hectáreas como mínimo, a cambio de lo cual debía presentarse en cualquier momento al servicio militar con armas y caballo. Los terratenientes y sus siervos eran el núcleo de las Fuerzas Armadas rusas de aquel entonces, de las que los extranjeros destacaban la excelente calidad de su artillería.

El nuevo zar no tardó en emplear su poderío militar y pronto organizó la conquista del kanato tártaro de Kazán. Inicialmente Iván IV trató de conquistar el kanato por la vía diplomática pero fracasó. Tras dos expediciones militares fallidas, en 1551 emprendió la tercera. Los rusos utilizaron torres de madera móviles para destruir las murallas y torres de Kazán, los artilleros volaron gran parte de las fortificaciones y la ciudad fue tomada por asalto.

Con la conquista del kanato de Kazán se abrió el camino hacia Siberia. En Oriente se podía conseguir uno de los botines más codiciados de la época: valiosas pieles de animales. Los mercaderes rusos Stróganov recibieron el visto bueno del zar para organizar expediciones de aventureros. Uno de los miembros de estas expediciones fue el cosacoYermak. Con un destacamento de solo 600 hombres, cruzó en 1581 los montes Urales, alcanzó el río Irtish y derrotó al kan siberiano Kuchum. Tras la muerte de Yermak las expediciones rusas continuaron y se fundaron numerosos fuertes. Tras los avances iniciales de los cosacos, la conquista de las tierras siberianas continuó de mano de agricultores y cazadores de pieles.
Cuatro años más tarde de la anexión de Kazán a Rusia, ante el Ejército de Iván el Terrible cayó el kanato de Astracán. Todas las tierras en las orillas del Volga y la ruta comercial completa pasaron a formar parte de Rusia.

Para contener las permanentes incursiones de los tártaros de Crimea, a unos 200 kilómetros al sur de Moscú fue erigida una línea de defensa a partir de fortalezas y obstáculos naturales como ríos y bosques. En 1572 la infantería y la caballería de los boyardos aniquilaron el ejército de 120 000 guerreros del kan Devlet-Gueréi (o “Devlet Giray”) en una batalla a 50 kilómetros de Moscú.

Haciendo análisis del gobierno del primer zar ruso, el historiador Vasili Kliuchevski llega a la conclusión de que “el zar hizo menos de lo que había pensado hacer e influyó mucho más en la imaginación y en los nervios de sus contemporáneos que en el orden estatal”.
Kliuchevski insiste en que las circunstancias de la infancia de Iván perturbaron su mente sana de ruso y moscovita bondadoso y le provocaron un desarrollo innatural y enfermizo.

Iván se quedó huérfano en su tierna infancia: a la edad de cuatro años perdió a su padre, el gran príncipe Basilio III, y a los ocho años falleció su madre, Yelena Glínskaya. Desde la infancia el zar estuvo rodeado de gente ajena y cínica. En las ceremonias oficiales todos le mostraban signos de respeto pero en la vida cotidiana los boyardos se burlaban de él. Kliuchevski escribe que el zar desde muy joven adquirió la costumbre de caminar girando la cabeza y para escuchar las voces y sonidos en su alrededor. Así nació un recelo permanente que con el transcurso de los años se transformó en desconfianza profunda hacia la gente. La humillación acumulaba el odio hacia la nobleza, que utilizaba a Iván en intrigas y ambiciones palaciegas. El zar se sentía constantemente rodeado de enemigos.

En 1564 las tropas rusas sufrieron varias derrotas contra los suecos y polacos en la guerra de Livonia por la posesión de las tierras de la costa del mar Báltico. Uno de los comandantes rusos, el príncipe Andréi Kurbski, un hombre de confianza del zar, lo traicionó. Iván anunció que los boyardos no querían seguir sus órdenes y que tramaban un plan para asesinar al zar. En enero de 1565 Iván y su corte salieron en peregrinación fuera de Moscú y tras varias semanas de camino se instalaron en la aldea de Alexándrovskaya Slobodá. Ahí el zar abdicó a favor de un tío pero retomó las riendas del poder pocas semanas después, cuando los habitantes de la capital de Rusia se rebelaron contra los boyardos.

Al regresar a Moscú Iván anunció la creación de la opríchnina. En ruso antiguo la palabra “óprich” significa “especial”, “aparte”. El zar dividió al país en dos partes: la opríchnina, unas veinte ciudades de provincias y varios distritos de Moscú donde Iván ejercía el poder absoluto; y una zona que quedaba en manos de los boyardos, que gobernaban a través de un consejo. El zar se reservaba el derecho de vetar a los boyardos. A las familias de los boyardos más nobles les fue confiscada la mayoría de las tierras a favor de los opríchniki, mil siervos armados del zar que no pertenecían a las familias de la nobleza. Estos tenían un aspecto sombrío: vestían de negro y tenían atadas a la silla de montar de sus caballos la cabeza de un perro y una escoba, que simbolizaban su misión principal: morder la traición y limpiar de traidores el reino de Iván IV. Los opríchniki tenían que responder ante la Justicia.
Cumpliendo órdenes del zar, bajo mínima sospecha torturaban, ahorcaban y quemaban vivos a los boyardos, y aterrorizaban y saqueaban a la gente común. La culminación del terror fue la aniquilación en 1569 de los habitantes deNóvgorod, en el norte del país, debido a que Iván IV tenía sospechas de que la ciudad quería traicionarlo y pasar al bando enemigo en la guerra livonia. Durante la expedición murieron unas 15 000 personas, la mitad de la población total de la ciudad. A muchos los ahogaron bajo el hielo del río Vóljov. El confidente del zar Maliuta Skurátov estranguló al metropolitano ortodoxo Felipe.

En 1572 Iván el Terrible derogó la opríchnina y reunificó el país. Los historiadores afirman que la guardia personal del zar lo traicionó durante la invasión de los tártaros de Crimea, negándose a acudir al campo de batalla. Además, para entonces el zar ya había asestado un duro golpe a los grandes latifundistas nobles, considerados los mayores enemigos de la corona. Vasili Kliuchevski escribe que “Iván decidió gobernar de una manera distinta de como lo hicieron su abuelo y su padre, rechazando la ayuda de la nobleza. Al mismo tiempo no llegó a la conclusión y convicción personal de cómo debería ser el nuevo gobierno. Iván convirtió la cuestión política del modo de gobernar en una guerra cruel contra el pueblo, en una matanza sin objetivos ni distinciones. La opríchnina originó el desorden general, mientras que el asesinato del hijo y heredero del zar, Iván, marcó el fin de la dinastía”.

El príncipe Iván efectivamente fue asesinado por su propio padre. El zar lo mató en un ataque de ira, asestándole un golpe mortal en la cabeza con un bastón. Alexéi Adáshev, uno de los ayudantes más cercanos del zar, murió de hipotermia en una celda. Fiódor Basmánov, otro confidente, fue obligado a matar a su padre y luego fue ejecutado por este crimen.

Los estudios médicos de la época moderna afirman que el zar Iván IV en los últimos años de la vida fue tratado de varias enfermedades con dosis regulares de mercurio. Este tratamiento dañaba el cerebro y producía constantes cambios de humor, ataques de euforia y cólera. De hecho, cuando en 1963 en el kremlin de Moscú fue abierto el sepulcro del primer zar ruso, entre los restos encontraron de una cantidad excesiva de mercurio. No se descarta que el monarca fuera envenenado.

El zar, brillante orador, filósofo y escritor y amante de la literatura, poseía una de las más ricas bibliotecas de la época. Esta despareció misteriosamente y todavía los investigadores continúan buscándola. Iván IV era asimismo gran aficionado al ajedrez, de hecho, se dirigía a una partida de este juego cuando falleció el dieciocho de marzo de 1584.

http://rusopedia.rt.com/personalidades/politicos/issue_267.html

Ivan el terrible  Película1944 - sergei eisenstein 1/11
http://www.youtube.com/watch?v=-dW-2UZC40M


Elton John - Sorry seems to be the hardest word

¿Qué tengo que hacer para que me ames?
¿Qué tengo que hacer para hacer que te importe?
¿Qué hago cuando un relámpago me golpea?
Y despierto para encontrar que no estás allí

¿Qué tengo que hacer para que me quieras?
¿Qué tengo que hacer para ser escuchado?
¿Qué digo cuando todo ha terminado, bebé?
Cuando lo “siento” parece ser la palabra más difícil

Es triste, tan triste, es una triste triste situación
Y se ha hecho más y más absurdo
Es triste, tan triste
¿Porqué no podemos hablarlo?
Oh me parece a mí, que lo “siento” parece ser la palabra más difícil

¿Qué tengo que hacer para que me quieras?
¿Qué tengo que hacer para ser escuchado?
¿Qué digo cuando todo ha terminado, bebé?
Cuando lo “siento” parece ser la palabra más difícil

Es triste, tan triste, es una triste triste situación
Y se ha hecho más y más absurdo
Es triste, tan triste
¿Porqué no podemos hablarlo?
Oh me parece a mí,
Que lo “siento” parece ser la palabra más difícil.

¿Qué hago para hacer que me ames?
¿Ohh qué tengo que hacer para ser escuchado?
¿Qué hago cuando un relámpago me golpea, sí?
¿Que tengo que hacer,
Que tengo que hacer?
Oh, cuando lo “siento” parece ser la palabra más difícil


La gran Esfinge de Gizeh


En época de la dinastía IV, se esculpió en la meseta de Gizeh un increíble monumento: la Gran Esfinge. Se atribuye al rey Kefrén, aunque algunos autores creen que es obra de Keops, artífice de la Gran Pirámide.
Al inicio de la historia de Egipto, las esfinges representaron la fuerza y la sabiduría del rey. Entre todas ellas destaca la Gran Esfinge de Gizeh, erigida en tiempos de la dinastía IV, la época más gloriosa del Imperio Antiguo.
Cuerpo de león y cabeza humana. Este extraño ser híbrido, al que conocemos con el término de esfinge, de origen griego, es uno de los más llamativos del arte egipcio. Los antiguos egipcios lo denominaban Shesep-ankh, «imagen viviente», nombre que daban a las estatuas reales. Simbolizaban la idea de fuerza y poder, y generalmente se representaba al faraón bajo esta forma. Así lo indica el hecho de que las esfinges portaran el pañuelo real nemes, el ureo (representación de la diosa cobra Uadyet) y a menudo la barba postiza ritual, signos característicos de los soberanos egipcios.
En Egipto, desde tiempos predinásticos y posiblemente antes, la figura del león se asoció a los jefes tribales y más tarde a los faraones. El rey era el guardián y protector de su pueblo, al que conducía victorioso al combate contra sus enemigos. Es por ello natural que, en el pensamiento de aquellos pueblos primitivos, la figura de este vigoroso y bello animal fuera asimilada al monarca. Por sus características, los egipcios imaginaron el león como un poderoso guardián, y por ello se lo representaba en amuletos, muebles y también en las puertas de los templos, en relieve o esculpido. Asimismo, algunos relieves del Imperio Nuevo muestran un león domesticado que acompaña al monarca en las batallas o en ceremonias religiosas. Es muy probable, pues, que la imagen de la esfinge surgiera en la mente de los egipcios como una manera de fundir la belleza y la ferocidad del león con la sabiduría del rey.

Puesto que normalmente constituyen representaciones del monarca, las esfinges son consideradas masculinas, aunque a partir del Imperio Nuevo también hay esfinges femeninas que representan a las reinas. Habitualmente las esfinges están en actitud yacente, con laspatas delanteras extendidas, si bien también se las puede encontrar representadas andando sobre sus cuatro patas o, más raramente, sentadas. Pero existen también esfinges en actitud oferente, cuyas patas delanteras se sustituyen por antebrazos y manos humanas que sostienen vasos como ofrenda. La primera representación de esfinge con forma de león y cabeza humana data de mediados del III milenio a.C. y corresponde a la dinastía IV, que marca el apogeo del Imperio Antiguo egipcio. Se halló en Abu Rawash, en el complejo funerario de Didufri, hijo y sucesor del faraón Keops, y pertenece a la princesa Hetepheres II, medio hermana y esposa de Didufri. Este rey también fue representado como una esfinge, de la que sólo ha llegado hasta nosotros la cabeza esculpida en arenisca, que se conserva en el Museo del Louvre. A mediados de la década de 1970, en la meseta de Gizeh, frente al complejo funerario de Kefrén (el sucesor de Didufri), se halló una pequeña esfinge de la época de este faraón.
Es en tiempos del Imperio Medio, a finales del III milenio a.C., cuando estas imágenes aparacen con más profusión. Los ejemplos descubiertos en Tanis, pertenecientes a Amenemhat III, de la dinastía XII, ofrecen la paticularidad de que la parte humana de la esfinge se reduce al rostro del faraón, mientras que la melena, las orejas y el resto del cuerpo son de león. Desde inicios del Imperio Nuevo, a mediados del II milenio a.C., aparecen esfinges más desarrolladas, con los rasgos de animal más suavizados; sobre el nemes o pañuelo real ostentan nuevos tocados y adornos, como la doble corona del Alto y Bajo Egipto o la corona atef (la corona blanca del Alto Egipto con dos plumas de avestruz). También llevan amplios collares, e incluso alas plegadas o el cuerpo cubierto de plumas, seguramente en relación con el dios halcón Horus. Ahora la esfinge se identifica con el dios Amón-Re, lo que da lugar a una nueva esfinge con cuerpo de león y cabeza de carnero, el animal sagrado de Amón. Por la gran cantidad y variedad de representaciones halladas, se podría decir que la figura de la esfinge alcanza su apogeo a mediados de la dinastía XVIII, la época más gloriosa del Imperio Nuevo. Más tarde, en época grecorromana, desde el siglo IV a.C., la iconografía de la esfinge se enriquece con la de tipo griego, normalmente femenina y casi siempre con alas, aunque con un simbolismo completamente distinto: para los griegos, la esfinge era un monstruo malicioso.
Pero la más sobresaliente de todas estas representaciones es la Gran Esfinge de Gizeh, que la mayoría de estudios atribuyen a Kefrén, pese a que no existen documentos explícitos del Imperio Antiguo que así lo atestigüen.
. http://www.nationalgeographic.com.es/articulo/historia/secciones/7796/gran_esfinge_gizeh.html