lunes, 6 de octubre de 2014


SETH

Nombre egipcio: Suti
Nombre  griego: Seth
Divinidad  griega: Tifón

Representación: Animal no identificado con orejas rectangulares, cola tiesa y hocico ganchudo.

Dios que en su origen es más brutal que maligno; los dramas que provoca se deben a su fuerza anormal, a su excesiva energía, más que a su mala intención; luego fue objeto de una interpretación hostil; todos los escritos osiriacos lo consideran como un criminal. Originario de Ombos (Nubt), pudo suplantar a un dios más antiguo, llamado Ash, señor del desierto occidental. Identificado con el desierto y el trueno, gobierna las nubes tormentosas y desencadena las borrascas del viento sur; las connotaciones negativas de Seth se refieren a la sequía, la esterilidad, la violencia, el hambre y el mar; los gusanos salían de la tierra a causa de su aliento.

Recibió el desierto como herencia de Geb pero, envidioso de su hermano, que había recibido la tierra fértil de Egipto, asesinó a Osiris y lo cortó en pedazos; la lucha entre Osiris y Seth era la lucha de la tierra fértil contra el desierto y la lucha del bien con el mal.

Venerado por unos, odiado por otros conoció épocas gloriosas y otras en las que su nombre estaba prohibido y sus estatuas eran destruidas. Es el señor del mal y las tinieblas, de la no-luz, de todo aquello que representa el mal, la sequía y como tal es el dios del desierto que por una parte protege a las caravanas que se adentran en sus dominios pero que también provoca las tormentas que hacen que esas mismas caravanas se extravien.

En este doble papel de protector-destructor de las tierras áridas Seth era venerado porque su estado de ánimo dirigía el futuro de todos aquellos que cruzaban sus dominios.

En un principio fue patrón de los metales (según Manetón al hierro se le llamaba "huesos de Seth") y el protector del Bajo Egipto. En la época anterior a la unificación de la monarquía se enfrentaron los partidarios de Seth, "Señor del Bajo Egipto", y los de Horus, protector del Alto Egipto; esta era una lucha por la herencia de Osiris, que terminó con el destierro de Seth al desierto.

Su reino se supone que estaba en el cielo septentrional y su morada era una de las estrellas que forman la Osa Mayor, desde donde ejercía su maligna influencia para pervertir los designios benéficos de Osiris, que vivía en Orión, y de Isis, cuyo hogar era Sotis.

Es el dios de la moción descendente del sol en el hemisferio inferior, en dirección hacia el sur; por esta razón representa el calor destructivo del verano; y cuando los días comienzan a disminuir, a partir del solsticio de verano, se dice que es él quien roba la luz del sol, por lo que es tenido como maligno. Sin embargo Seth no fue considerado totalmente malo; los faraones ramésidas promovieron su imagen como dios guerrero que protegía la barca de Ra por la noche, ya que este dios le había apoyado en su lucha contra Horus, evitando que Apofis hundiera la barca.

Acompañado de Horus participa en las ceremonias de investidura del Rey como señores del Alto y Bajo Egipto.

Fue también el dios nacional durante la dominación hicsa, convirtiéndole en marido de sus diosas Astarté y Anath; adoptado por el rey hicso Apofis como único dios, con el nombre de Sutej, le levantó un templo junto a su casa, en Avaris, y los funcionarios del rey le llevaban guirnaldas de flores; su versión de Seth tenía un carácter más asiático y llevaba un tocado parecido al del Baal semítico; era adorado como dios de las tormentas y patrón de la guerra.
Con Sethy I se vuelve al Seth Nubti (el Seth de Ombos, su lugar original en el Alto Egipto).

En el Reino Nuevo se le consideró un dios benévolo, patrón de las armas, de la guerra y patrón de la producción de los oasis; Seth fue entonces popular porque, debido a su papel como señor de la confusión, podía sembrar la discordia entre los enemigos de Egipto.
Era hijo de Nut y Geb, en la Eneada heliopolitana, y esposo-hermano de Neftis. Según algunas tradiciones es padre de Anubis. El  auge del culto a Osiris transforma a Seth en la personificación de la maldad y su nacimiento se adapta a esta función.

Según el mito de Osiris Seth ya representaba la maldad incluso en el vientre de su madre y por eso nació desgarrando el costado Nut. En otros textos aparece como esposo de Neith y padre de Sobek. Simbolizado por un animal no identificado, mezcla de oso hormiguero, asno, perro o algún animal extinguido, de orejas rectangulares erguidas, con el hocico curvado hacia abajo y una larga cola hendida (Loret lo identifica con el lebrel del Cáucaso); tenía los ojos y el pelo rojos, como el desierto.

Bajo el reinado de Sahura (V Dinastía) se convierte en humano con cabeza de animal; un taparrrabo rodea sus caderas; lleva una amplia peluca y el cetro uas. Sus animales sagrados eran el cerdo, el asno, el orix, el cocodrilo, el hipopótamo, la serpiente y el pez, bajo cuyo aspecto puede también aparecer; en general, se consideraban animales suyos cualquiera que fuera pescado en las aguas o cazado en el desierto, así como los de pelo o piel roja o parda.

En la ciudad de Antaeópolis estuvo fusionado con Nemty, considerándo a éste una manifestación de Seth. Fue asimilado a Tifón por los griegos. Su centro originario de culto estaba en Ombos, por lo que se le llamaba "el ombita". Luego tuvo santuarios en Avaris, Abydos y Pi-Ramsés. Tres soberanos adoptaron su nombre en tiempos del Reino Nuevo: Sethy I, Sethy II y Sethnajt.

A pesar  de que algunos faraones llevaron su nombre y en ciertas épocas gozó de culto, el pueblo nunca estuvo a su favor y a partir de la XXII dinastía se extendió la animadversión hacia él. En su tratado "De Isis et Osiride", Plutarco afirma que los sacerdotes egipcios tenían gran aversión al mar y a la sal la denominaban espuma de Seth.

http://www.egiptologia.org/mitologia/panteon/seth.htm

Canciones con historia: Bette Davis eyes - Kim Carnes

A veces esto de la música esconde mucho más de lo que a oído desnudo se puede apreciar. Tras de sí, entre bastidores, late toda una historia digna de ser contada. Como ya dije en una ocasión debiera no quedarse marginada la trayectoria de un disco hasta el momento de su publicación.

Sobradamente conocida, natural de Pasadena, en California, Kim Carnes se defendió más que inteligentemente en el rock suave de los últimos setenta y buena parte de los ochenta. Curiosamente desde los 90 está más centrada en el country. Su voz terrada la dota de una sensualidad sin límite.

En 1974 cayó en sus manos un tema compuesto por Donna Weiss and Jackie DeShannon de nombre "Bette Davis Eyes". Como su propio nombre indica (qué bien queda eso) se refiere a la actriz Bette Davis, la diva del cine en blanco y negro. Mujer con carácter dentro y fuera de escena y con una mirada inquietante. Pero Carnes no gustó del ritmo original de la composición. Se trataba de una polka.

Siete años después le presentaron una nueva instrumentación del tema. La grabó en directo en una sola toma en el estudio, ¡quién dijo miedo!. El resultado es el conocido. Kim jamás obtuvo un éxito mayor en toda su carrera que con este tema.
Fue nº 1 en 31 países y se alzó con dos Grammys de relumbrón, el de mejor grabación del año y mejor tema del año. Y estuvo nueve semanas en el Billboard Hot 100.

Se cuenta que la propia Bette Davis se erigió como fan absoluta de "Bette Davis Eyes". Incluso llegó a remitir una carta personal a la Carnes felicitándole por la labor y lo bien que le había quedado.

Lo que son las cosas, allí dónde menos imaginas te espera un éxito inmediato. Sólo es cuestión de tiempo. Y si estás predeterminado te perseguirá como a Kim Carnes "Bette Davis Eyes".

http://pedro-casquel.blogspot.com.ar/2009/02/una-cancion-con-historia.html







La iracunda y genial ‘fea’ Bette Davis

 “Era bella, pero no una belleza. Hay una diferencia. Hoy  pienso que era guapa. Entonces, no, y siempre me quise parecer a otra persona”. Su rostro era particular y no encajaba en los cánones de belleza de la industria del cine. Hasta sus últimos años de vida Bette Davis (1908-1989) no supo reconocer su belleza.  Incluso con setenta años confesaba que odiaba cuando mencionaban una y otra vez sus “ojos saltones” como característica principal de su rostro.

Provocaba sensaciones intensas en todo el que la conocía. Muchos la pintan como una mujer insoportable, cruel, cínica. Sus ataques de ira comenzaron cuando tenía dos años como respuesta a la tensión que había entre sus padres y nunca supo abandonar el comportamiento obsesivo y los arranques de genio de los que hablan todos los que la rodearon.

Los testimonios más extremos son seguramente los de su hija,B.D. (Barbara Davis) Hyman, que escribió en los años ochenta el libro My Mother’s Keeper(El guarda de mi madre), una biografía en la que destacaba los problemas con el alcohol, las amenazas de suicidio frente a la niña cuando ésta tenía ocho años… La resentida hija dibuja a la estrella de Hollywood como una neurótica, manipuladora y malvada que canalizaba la rabia abusando de los que estaban más cerca de ella: “Podía haberlo escrito y enviado a mi madre sin publicarlo. No lo hubiera leído. No va a escuchar nada que no quiera (…), así que me decidí por el único camino que sentí que podía llegar a ella: la opinión pública. Lo que puede ver el mundo es lo más importante para mi madre y esta es, en esencia, una carta pública para ella”.
Davis se casó cuatro veces, enviudó de su segundo marido y se divorció de los otros tres. “No fueron lo suficientemente hombres para ser el señor Bette Davis”, dijo en una entrevista.

Los papeles de mujer peligrosa, malvada y sin escrúpulos la convirtieron en una de las actrices más apreciadas de Hollywood.

En el Cotilleando a… de esta semana repasamos cinco películas de la carrera de Bette Davis, la actriz que hizo de sí misma un personaje temible y a la vez atractivo, que supo ser fiera y también reirse de sí misma en medio de la creciente perfección hollywoodiense.

“Mala hermana”, 1931
1. Mala Hermana (The Bad Sister) (Hobart Henley, 1931). Con poco más de 20 años, tras una incipiente carrera en los teatros de Broadway, un cazatalentos de los Estudios Universal propuso a Davies a acudir a una prueba en Hollywood. Su debut fue en la película Mala Hermana, interpretando a Laura, la hermana dócil y sensible de Marianne Madison (la protagonista) una joven guapa y malcriada que se enamora de un estafador.
El insulso personaje era todo lo contrario a la mujer con carácter de sus papeles más famosos: la presencia en la pantalla era desvaída y poco satisfactoria, The New York Times la calificó de “lúgubre” y The Boston Post de ser “consciente de la cámara” en todo momento. Bette, de 23 años, acudió al preestreno con su madre en un cine de San Bernardino (California). Transcurrida menos de media película, huyó de la sala llorando.
El film de Universal fue el primero de los seis fracasos de Bette, a la que se referían en los estudios como asexual, de aspecto raro, de algún modo fea. En una entrevista de 1938, Bette recordó que hasta el jefe de maquillaje la criticó hasta destrozar su autoestima: “Tus pestañas son demasiado cortas, el color del pelo es indescriptible y la boca es demasiado pequeña. La cara es la de una pequeña holandesa gorda y el cuello es demasiado largo”. El sello terminó por no renovarle el contrato.

2. Cautivo del deseo (Of Human Bondage) (John Cromwell, 1934) le dio la oportunidad de escapar de los roles femeninos convencionales. Davis vio en el personaje de la camarera Mildred Rogers una oportunidad para dar rienda suelta a las emociones violentas de su carácter. Casada entonces con su primer marido, Harmon Nelson, ella era la que ganaba el dinero mientras él intentaba en vano tener éxito como músico. La situación era cada vez más tensa y la actriz lo ridiculizaba en público y lo acusaba de ser tacaño, aburrido, vanidoso y egoista.
Para hacerse con el rol de camarera cruel en Cautivo del deseo, de la productora RKO, Davis puso todas sus energías en convencer a los estudios Warner para poder hacer la película. En el proceso descubrió que estaba embarazada y decidió abortar para no echar a perder sus planes: ya había actuado en 22 títulos y tenía la certeza de que el papel de Mildred Rogers era su última oportunidad de ser la actriz que deseaba.
El personaje le dio confianza en sí misma. La cruda y despiadada mujer que maltrataba verbalmente al inocente Philip Carey (que arruina su vida en el intento de ser amado) representaba el lado más oscuro y fascinante de las capacidades interpretativas (y de la cara menos amable) de Bette Davis.

3. Jezabel (Jezebel) (William Wyler, 1938). Davis y el director Wyler conectaron a pesar de lo que se podía esperar. Los dos tenían arranques de mal genio y eran de un perfeccionismo enfermizo y eso fue precisamente lo que equilibró la relación, que pronto se convirtió en sentimental.
Ambientada en los años anteriores a la Guerra Civil estadounidense,  Jezabel cuenta la historia de una caprichosa belleza sureña de Nueva Orleans (Bette Davis) comprometida con un banquero (Henry Fonda). Ante la negativa de él a acompañarla a comprar un vestido para uno de los bailes más importantes del año, ella se venga adquiriendo un vestido de noche rojo y rompe la estricta norma de vestir de blanco en la fiesta. Tras el escándalo, él pone fin al compromiso y ella se niega a pedir perdón, pensando que su prometido volverá desesperado a sus brazos. Davis ganó con el papel el segundo Oscar de su carrera a la mejor actriz protagonista. El primero había sido con Peligrosa (Dangerous) (Alfred E. Green, 1935).
Volvía a interpretar a la mujer soberbia y antipática en un rodaje plagado de retrasos. Su relación con Wyler durante el rodaje, cuando ella todavía estaba casada, la alteraba y le producía reacciones psicosomáticas: le salió un enorme grano que paró el rodaje durante semana y media, sufrió una contractura en la pierna… CuandoJezabel llegaba a su fin, ambos hablaban de trabajar juntos de nuevo en una versión de Cumbres borrascosas (la novela de Emily Brontë) en la que Bette haría de Cathy, pero al final el proyecto escapó de las manos de Warner y los amantes se separaron sin remedio.
Dos días después del último día del rodaje, ella descubrió que estaba embarazada del director y abortó de nuevo. Las precauciones que tomó para que su marido no se enterara de la aventura desaparecieron con el siguiente romance,esta vez con el magnate Howard Hughes, con el que se dejó ver impunemente ante Nelson hasta que pidió el divorcio alegando un trato cruel.

4. Eva al desnudo (All about Eve) (Joseph L. Mankiewicz, 1950). La historia de cómo Eve Harrinton (Anne Baxter) intenta poco a poco usurpar el trono (y la vida) de la estrella del teatro Margot Channing (Bette Davis) recrea el mundo de envidias, traiciones y rumores del mundo del espectáculo.
El director Edmund Goulding advertía a Joseph Mankiewiczsobre la decisión de elegir a Bette Davis como protagonista de Eva al desnudo: “Esa mujer te destruirá, te convertirá en un fino polvo blanco y soplará. Eres guionista, querido. Ella llegará al escenario con un paquete gordo de papel amarillo y lápices. Escribirá y entonces ella, y no tú, dirigirá. Ya lo verás” .
Pero la actriz llegaba en son de paz. A punto de terminar su contrato con Warner (la productora con la que llevaba casi dos décadas), no tenía nada clara su renovación. Tenía 41 años y se veía desterrada del cine. El guión y el papel le fascinaron, la forma de fumar y apagar con nerviosismo los cigarrillos, la mirada comunicativa y la voluntad de afearse sin problemas si el guión lo pedía mezclaban a la persona con el personaje.
Recién divorciada de William Grant Sherry (un tipo violento y peligroso con el que tuvo una relación destructiva), todavía con un guardaespaldas que la protegía a ella y a su única hija, Bette se enamoró de Gary Merrill, el actor que interpretaba a Bill Sampson, director de teatro y pareja del personaje de Bette. Él, casado, se divorció y la pareja se convirtió en matrimonio. Adoptaron dos niños y se divorciaron diez años después, en 1960.

5. ¿Qué fue de Baby Jane? (What ever happened to Baby Jane?) (Robert Aldrich, 1962). “¡Tiene la mejor propiedad de California! Yo quise comprarla y me la quitó. Si piensa que voy a interpretar a esa estúpida perra en silla de ruedas, ya sabe lo que le espera”. Esa fue la respuesta de Davis cuando la actriz Joan Crawford le entregó una copia del guión de ¿Qué fue de Baby Jane?
Al final fue Crawfrod la que interpretó a Blanche Hudson, la antigua estrella de cine que se había quedado parapléjica y al cuidado de su hermana, la perturbada Jane, que había sido una estrella infantil y una mala actriz de cine. “A veces me he esforzado por verme lo peor posible, a veces me superaba y eso dolía. Eso empeoró cuando me hice mayor. Cuando me vi por primera vez como Baby Jane, lloré“, admitía Davis años más tarde.

Crawford tuvo la valentía de ofrecerle el papel a una de sus mayores enemigas. Bette Davis siempre manifestó su odio hacia ella, incluso tras la muerte de la actriz. “Puede que exista un cielo, pero si Joan Crawford está allí, no voy”, dijo en varias ocasiones. Se rumoreaba que Crawford, bisexual, se había insinuado a Davis y ella la había rechazado con desprecio, pero parece ser que la raíz de la enemistad fue un hombre: Franchot Tone, un actor del que Davis se enamoró durante el rodaje de Peligrosa. Crawford era entonces una de las mujeres más deseadas de Hollywood y le costó poco cautivar a Tone, al que invitó una noche a cenar y recibió desnuda en su casa. Se casaron nada más finalizar el rodaje de Peligrosa. “Se ha acostado con todas las estrellas de MGM, menos con Lassie”, decía Davis. “Pobre Bette. Da la impresión de que no fue feliz ni un solo día en toda su vida”, contestaba Crawford.
Con ese historial de puyas y rencores, las dos estrellas se encontraron en el set de Baby Jane, en un rodaje tenso que sometía a todo el equipo. Hubo incluso agresiones físicas: en la escena en que Jane patea a su hermana en el suelo, hubo una patada más fuerte que las demás. A Crawford le tuvieron que dar tres puntos.
La película fue un éxito de taquilla y Bette Davis fue nominada al Oscar, pero Joan Crawford, no, y ante la visión de ver a su rival recoger el premio, hizo todo lo que pudo. Se puso en contacto con las otras tres actrices nominadas para poder recoger el premio en caso de que cualquiera de ellas ganara. Anne Bancroft se hizo con el premio y Joan, triunfante, recibió la estatuilla.

Helena Celdrán

http://blogs.20minutos.es/trasdos/2012/07/18/bette-davis/

BETTE DAVIS MALA HERMANA (1931)
http://www.youtube.com/watch?v=4BAJfztfxPQ














El puente colgante de Santa Fe fue declarado Monumento Nacional

Lo resolvió la Comisión Nacional de Lugares Históricos; el puente se construyó en 1924

SANTA FE.- Uno de los símbolos por excelencia de esta capital, el Puente Colgante, fue declarado  hoy Monumento Nacional.

 "La Comisión Nacional de Monumentos, Museos y Lugares Históricos, ha resuelto aconsejar a la presidenta Cristina Kirchner que lo declare monumento vía decreto", sostuvo el senador provincial por el departamento La Capital, Hugo Marcucci (UCR) en Marzo de este año.

"El Puente Colgante es la postal de la ciudad; es aquello que nos identifica como imagen, y no es casualidad porque tiene su encanto y un valor arquitectónico por sí mismo. Pero a su vez tiene que ver con la historia de la ciudad", agregó el intendente, José Corral. "Nos entusiasma mucho que avance el trámite para ser declarado monumento histórico nacional; mientras tanto vamos a darle el cuidado y el respeto que merece para que esta condición tan especial que tiene sea preservada", agregó.

"Lo que lo hace calificable como un monumento es que es un puente de una estructura muy particular, que nos recuerda al mecano, a la torre Eiffel. Una estructura similar a la industrial con esa composición particular. Por supuesto, tiene una gran importancia histórica, además de la valoración en particular que todos los santafesinos tenemos, porque es un símbolo que nos identifica", dijo Corral.

Concebido originalmente para trasladar agua proveniente desde el río Colastiné, un brazo del Paraná, el Puente Colgante es una estructura semirrígida, construído por el Sistema Gischard, de tres tramos, con dos pilares trucados a 26,20 m de profundidad. El viaducto cruza la laguna Setúbal, uniendo las avenidas Costanera Oeste y Este que bordean ambas márgenes de dicha laguna, y es nexo del resto de pequeñas localidades ubicadas hacia el este (La Guardia, Colastiné, Rincón o Paraná).

El Puente Colgante se construyó en el año 1924 y llegó a convertirse en un símbolo de esta capital. Sin embargo, el 28 de septiembre de 1983 fue un penoso día para esta capital. Para sorpresa de todos y bajo la atenta mirada de vecinos y periodistas, cayó parte del puente al no poder sostenerse de pie ante una de las peores inundaciones. Un segmento del puente quedó hundido en la laguna Setúbal y se recuperó en 1984. Partes de la estructura, que durmieron algunos años en el puerto, fueron vendidas durante la administración que encabezó el justicialista José María Vernet.

Recién en 2001, la ciudad recuperó su emblema. El puente, una vez reconstruido, preservó los elementos originales, integrándolos a los nuevos y contrastándolos, sin romper la unidad visual de la obra. El detalle sobresaliente es que la antena oeste es la original, armada en el año 1924. La nueva antena fue construida en Esperanza, 45 kilómetros al oeste de esta capital. Se diferencia de la antigua antena en que carece de remaches, siendo sus uniones realizadas por soldadura.

http://www.lanacion.com.ar/1673276-declararan-monumento-nacional-el-puente-colgante-de-santa-fe


Palas Atenea (Minerva romanos)

 

Atenea o Palas Atenea formó parte de los habitantes del Olimpo junto al dios supremo Zeus. Era una de las diosas griegas más importantes y presentaba un gran número de rasgos característicos. Era la diosa de la guerra, de la sabiduría y de la ciencia, además de patrona de diversas actividades.
Atenea también tenía una afinidad especial con las ciudades, sobre todo con Atenas, donde era adorada en muchos templos como la deidad tutelar principal.
La sabiduría y la versatilidad de la virginal Atenea eran una consecuencia directa de su extraordinario nacimiento. En cierta ocasión Zeus había concebido un hijo con oceánide Metis («sabiduría» o la diosa de la tierra, Gaya, y el dios de los cielos, Urano, habían dicho que el dios que naciese del embarazo de Metis sería muy superior a él). El dios supremo montó en cólera y devoró al atemorizado Urano, lo que le provocó tiempo después que tuviese un intenso dolor de cabeza. Hefesto, el artesano de todos los dioses, tuvo que utilizar sus herramientas para abrir la cabeza de su padre, de donde salió Atenea completamente vestida y ya adulta. De este modo, podría decirse que era la favorita de su padre y que en cierto sentido se parecía a él.
El valor era el rasgo más característico de Atenea. Su figura alta y delgada siempre estaba acompañada por el casco y la lanza. Llevaba el aegis o piel de cordero que le entregó su padre para cubrir sus hombros. Estaba decorado con borlas y la cabeza de Medusa, la Gorgona con su rostro terrorífico, cuya mirada podía convertir a cualquiera en piedra (ver Gorgonas, Las). Un buho que simbolizaba su sabiduría solía acompañarla a todos los sitios. Homero la comparaba a veces con esta ave, lo que apoya la teoría de que se la adorase a través de un buho o una lechuza. De hecho, esta figura aparece en gran cantidad de monedas acuñadas en Atenas.
El vínculo de la diosa con esta ciudad quedó establecido tras la competición con Poseidón por la provincia de Ática, en la que se encontraba Atenas. El dios del mar utilizó su tridente para crear un pozo que manase desde la Acrópolis, pero Atenea plantó un olivo para impedirlo. Los dioses y diosas que mediaron en el conflicto creyeron que este último era un regalo mejor. De este modo los habitantes eligieron a Atenea para que fuese su patrona y le pusieron a la ciudad su mismo nombre. Los templos más importantes en la Acrópolis son el Erechtheum (Erecteo) y el Parthenon (Partenón), que literalmente significa «la casa de las vírgenes» debido a la condición virginal de la diosa, y están dedicados a ella. El Partenón contiene una impresionante estatua de casi 12 m de alto de la diosa, obra del escultor Fidias. Sus túnicas eran de oro puro. El olivo sagrado ofrecido a la ciudad ocupa un lugar de honor en el complejo. El árbol empezó a crecer milagrosamente después de la destrucción de la Acrópolis a manos de los persas en el año 480 a.C. Incluso hoy día permanece uno de los olivos a la entrada del templo.
Según otra historia de los primeros años de la ciudad, Hefesto quería hacer el amor con Atenea como recompensa por haberla ayudado a venir al mundo, pero la diosa escapó de su abrazo y Hefesto eyaculó sobre el suelo, surgiendo de ahí Erichthonius (Erictonio), que Atenea confió a las hijas de Cecrops, uno de los primeros reyes de Atenas. Pero esto tuvo consecuencias terribles cuando, tiempo después, Erictonio se convirtió en rey de la ciudad (ver Cecrops).
Al contrario que Artemisa, Atenea no era tímida ni escrupulosa, y no quería vivir sola en los bosques y las montañas alejada de todo el mundo. De hecho, intervenía a menudo en la vida de los seres humanos, existiendo innumerables mitos e historias sobre este aspecto. Pocos dioses se involucraron tanto en la Guerra de Troya, en la que ayudó de manera infatigable a los griegos. Primero les animó a entrar en conflicto con los troyanos y luego les protegió, les rescató e incluso luchó a su lado. Su hermano por parte de padre, Ares, el dios de la guerra que apoyaba a los troyanos, no podía hacerle frente, lo cual no resultaba sorprendente, ya que Ares era el dios de la guerra sin planificar mientras Atenea era la diosa del arte de la guerra. No obstante, su apoyo a los griegos no fue ilimitado e incondicional, ya que cuando el joven Áyax violó en su altar a Casandra, hija del rey troyano, tras finalizar la contienda, les retiró su apoyo por haber derribado su estatua. Fue un final trágico para el joven (ver Ajax) y sólo Odiseo permaneció en el corazón de la diosa al ser un héroe que usaba su inteligencia en lugar de su fuerza.
También Heracles recibió la ayuda de Atenea con sus doce trabajos. Otros héroes como Jasón, Belerofonte y Perseo se vieron favorecidos por sus medidas. Perseo acabó con la Gorgona Medusa gracias a su ayuda. Medusa había insultado a Atenea, que la convirtió en una criatura horrorosa y despreciable, tan repugnante que el que la miraba se convertía en piedra. Perseo le cortó la cabeza y se la ofreció a su guardiana, que desde entonces la llevó en su aegis y la representó en su escudo.
Orestes era hijo de Agamenón y de Clitemnestra, a la que había matado para vengar la muerte de su padre, de la que era culpable (ver Orestes y Agamenón). Por este motivo fue perseguido por las Erinyans (Erinias) y, con la ayuda de Atenea, consiguió refugiarse en Atenas. La diosa se aseguró de que fuese enjuiciado en el Areopagus y emitió su voto a favor de él. De esta manera preservaba la tradición ateniense de administrar justicia a través de un jurado. Otra tradición de la ciudad era garantizar asilo político y para refugiados. En la mitología, el mismo rey Edipo se benefició de esta medida.
Minerva, la diosa romana de las artes, la industria, la ciencia y la sabiduría, era adorada en toda Italia. Quizá fuese una diosa etrusca en su origen. En un periodo muy temprano, fue igualada con Atenea y, aunque carecía de la vertiente guerrera de ésta, los romanos empezaron a representarla con atuendo militar. Al igual que Atenea, Minerva se convirtió en diosa de la guerra y de la sabiduría. Roma, la propia diosa que dio nombre a la ciudad, era representada con su misma apariencia.

http://mitosyleyendascr.com/mitologia-griega/grecia27/




Tienes un amigo - James Taylor


Cuando estés triste y preocupado
Y necesites una mano amiga
Y nada, whoa nada va bien.
Cierra tus ojos y piensa en mí
Y pronto estaré ahí
Para iluminar incluso tu noche más obscura.

Tu solo grita mi nombre,
Y tu sabes que donde sea que esté
Vendré corriendo, oh sí nena
A verte otra vez.
Invierno, primavera, verano, o otoño,
Todo lo que tienes que hacer es llamar
Y estaré ahí, sí, sí, sí
Tienes un amigo

Si el cielo sobre ti
Se hace más oscuro y se llena de nubes
Y ese viejo viento del norte empieza a soplar
Mantén la calma y llámame en voz alta 
Y pronto estaré golpeando a tu puerta.
Tu solo grita mi nombre, y tu sabes que donde sea que esté
Vendré corriendo a verte otra vez.
Invierno, primavera, verano o otoño
Todo lo que tienes que hacer es llamar
Y estaré ahí, sí, sí, sí.

¿Hey, no es bueno saber que tienes un amigo?
La gente puede ser tan fría.
Te lastimarán y te abandonarán.
Se llevarán tu alma si los dejas.
Oh sí, pero no los dejes

Tu solo grita mi nombre y tu sabes que donde sea que esté
Vendré corriendo a verte otra vez.
Oh nena, no sabes que en,
Invierno, primavera, verano o otoño,
Hey todo lo que tienes que hacer es llamar.
Señor, estaré ahí, si estaré.
Tienes un amigo.
Tienes un amigo.
¿Hey, no es bueno saber que tienes un amigo?
¿Hey, no es bueno saber que tienes un amigo?
Tienes un amigo.

Agua - Gabriela Mistral

Hay países que yo recuerdo
como recuerdo mis infancias.
Son países de mar o río,
de pastales, de vegas y aguas.
Aldea mía sobre el Ródano,
rendida en río y en cigarras;
Antilla en palmas verdi-negras
que a medio mar está y me llama;
¡roca lígure de Portofino,
mar italiana, mar italiana!

Me han traído a país sin río,
tierras-Agar, tierras sin agua;
Saras blancas y Saras rojas,
donde pecaron otras razas,
de pecado rojo de atridas
que cuentan gredas tajeadas;
que no nacieron como un niño
con unas carnazones grasas,
cuando las oigo, sin un silbo,
cuando las cruzo, sin mirada.

Quiero volver a tierras niñas;
llévenme a un blando país de aguas.
En grandes pastos envejezca
y haga al río fábula y fábula.
Tenga una fuente por mi madre
y en la siesta salga a buscarla,
y en jarras baje de una peña
un agua dulce, aguda y áspera.

Me venza y pare los alientos
el agua acérrima y helada.
¡Rompa mi vaso y al beberla
me vuelva niñas las entrañas!