Cosas - Gabriela Mistral
A Max Daircaux.
Amo las cosas que nunca tuve
Con las otras que ya no tengo:
Yo toco un agua silenciosa,
Parada en pastos friolentos,
Que sin un viento tiritaba
En el huerto que era mi huerto.
La miro como la miraba;
Me da un extraño pensamiento,
Y juego, lenta, con esa agua
Como con pez o con misterio.
Pienso en umbral donde dejé
Pasos alegres que ya no llevo,
Y en el umbral veo una llaga
Llena de musgo y de silencio.
Yo busco un verso que he perdido,
Que a los siete años me dijeron.
Fue una mujer haciendo el pan
Y yo su santa boca veo.
Viene un aroma roto en ráfagas;
Soy muy dichosa si lo siento;
De tan delgado no es aroma,
Siendo el olor de los almendros.
Me vuelve niños los sentidos;
Le busco un nombre y no lo acierto,
Y huelo el aire y los lugares
Buscando almendros que no encuentro.
Un río suena siempre cerca.
Ha cuarenta años que lo siento.
Es canturía de mi sangre
O bien un ritmo que me dieron.
O el río Elqui de mi infancia
Que me repecho y me vadeo.
Nunca lo pierdo; pecho a pecho,
Como dos niños nos tenemos.
Cuando sueño la Cordillera,
Camino por desfiladeros,
Y voy oyéndoles, sin tregua
Un silbo casi juramento.
Veo al remate del Pacífico
Amoratado mi archipiélago,
Y de una isla me ha quedado
Un olor acre de alción muerto...
Un dorso, un dorso grave y dulce,
Remata el sueño que yo sueño.
Es al final de mi camino
Y me descanso cuando llego.
Es tronco muerto o es mi padre,
El vago dorso ceniciento.
Yo no pregunto, no lo turbo.
Me tiendo junto, callo y duermo.
Amo a una piedra de Oaxaca
O Guatemala, a que me acerco,
Roja y fija como mi cara
Y cuya grieta da un aliento.
Al dormirme queda desnuda;
No sé por qué yo la volteo.
Y tal vez nunca la he tenido
Y es mi sepulcro lo que veo...
Cosas - Gabriela Mistral