Paint the Sky
With Stars - Enya
jueves, 18 de septiembre de 2014
POEMA 2 - Pablo Neruda
En su llama mortal la luz te envuelve.
Absorta, pálida doliente, así situada
contra las viejas hélices del crepúsculo
que en torno a ti da vueltas.
Muda, mi amiga,
sola en lo solitario de esta hora de muertes
y llena de las vidas del fuego,
pura heredera del día destruido.
Del sol cae un racimo en tu vestido oscuro.
De la noche las grandes raíces
crecen de súbito desde tu alma,
y a lo exterior regresan las cosas en ti ocultas,
de modo que un pueblo pálido y azul
de ti recién nacido se alimenta.
Oh grandiosa y fecunda y magnética esclava
del círculo que en negro y dorado sucede:
erguida, trata y logra una creación tan viva
que sucumben sus flores, y llena es de tristeza.
BARENBOIM,
EL PACIFISTA
El
director de orquesta Daniel Barenboim nació en Argentina y allí vivió su
infancia.
Creció
en Israel, asistió a escuelas hebreas y lleva un pasaporte israelí junto con su
pasaporte argentino.
Siempre
se le ha considerado uno de los máximos exponentes culturales israelíes y
durante años ha sido una figura central en la vida cultural de su país, aunque
pasó la mayor parte de su adolescencia en Europa y Estados Unidos.
Hijo
de profesores de piano, hizo su debut en Buenos Aires a los 7 años. Más tarde
se mudó con su familia a Europa.
En
1951 actuó en el Mozarteum de Salzburgo. En 1955 se presentó por primera vez en
Gran Bretaña y en 1957 en Estados Unidos.
Debutó como director de orquesta en Israel en
1962. Desde entonces combina las dos actividades.
Desde
finales de los años sesenta ha trabajado con la English Chamber Orchestra, la
Orquesta Sinfónica de Londres, la Orquesta Filarmónica de Nueva York, la
Orquesta de París y la Orquesta Filarmónica de Berlín.
Durante
los setenta dirigió varios festivales de música e incluyó varias óperas.
En 1999, junto al escritor estadounidense de
origen palestino Edward Said, al que le unió una gran amistad, fundó la
Orquesta del Diván Este-Oeste, una iniciativa para reunir cada verano un grupo
de jóvenes músicos talentosos tanto de origen israelí como de origen árabe.
Por
ello, recibieron ambos el Premio Príncipe de Asturias en 2002.
Es especialmente valorado como director de la
música de Richard Wagner.
http://www.elcomercio.com/actualidad/mundo/glass-y-barenboim-genios-vivos.html
http://www.elcomercio.com/actualidad/mundo/glass-y-barenboim-genios-vivos.html
Poema sinfónico The Light – Phillip Glass
The Light, es una obra maestra: 21 minutos con 23 segundos de dinamita pura. El universo de vidrio del señor Glass estallando cual volcán. Luego de una introducción lenta y suave, lenta y dulce, lenta y olorosa, un movimiento cuasi copular nos encabalga hacia territorios de éxtasis orgiástico. El tema, en tanto, es una de las pasiones de Glass: la ciencia.
De hecho el compositor ha dicho en entrevistas que soñaba de niño convertirse en adulto científico.
Por lo pronto, ha escrito música pensando en Einstein (on the Beach), en Stephen Hawking (para The Voyage) y en Galileo para una ópera que lo retrate.
También los retratos le interesan a don Felipe Vidrio: Einstein on the Beach retrata al melenudo de bigote y lengua de fuera, así como en otras partituras Glass retrata a Gandhi, a Akhnaten y en la partitura que nos ocupa, The Light, a Albert A. Michelson y Edward W. Morley, quienes hicieron descubrimientos fundacionales cuya trascendencia sería refrendada, dos décadas después, por el maestro Einstein con su Teoría de la Relatividad.
http://www.jornada.unam.mx/2000/12/26/05an1cul.html
The Light, es una obra maestra: 21 minutos con 23 segundos de dinamita pura. El universo de vidrio del señor Glass estallando cual volcán. Luego de una introducción lenta y suave, lenta y dulce, lenta y olorosa, un movimiento cuasi copular nos encabalga hacia territorios de éxtasis orgiástico. El tema, en tanto, es una de las pasiones de Glass: la ciencia.
De hecho el compositor ha dicho en entrevistas que soñaba de niño convertirse en adulto científico.
Por lo pronto, ha escrito música pensando en Einstein (on the Beach), en Stephen Hawking (para The Voyage) y en Galileo para una ópera que lo retrate.
También los retratos le interesan a don Felipe Vidrio: Einstein on the Beach retrata al melenudo de bigote y lengua de fuera, así como en otras partituras Glass retrata a Gandhi, a Akhnaten y en la partitura que nos ocupa, The Light, a Albert A. Michelson y Edward W. Morley, quienes hicieron descubrimientos fundacionales cuya trascendencia sería refrendada, dos décadas después, por el maestro Einstein con su Teoría de la Relatividad.
http://www.jornada.unam.mx/2000/12/26/05an1cul.html
miércoles, 17 de septiembre de 2014
“La otra mitad depende de ti” Hermann Hesse
La
mitad de la belleza
depende del paisaje;
y la
otra mitad
de la persona que la mira…
Los más brillantes amaneceres;
los más románticos atardeceres;
los paraísos más increíbles;
se pueden encontrar siempre
en el rostro de las personas queridas.
Cuando no hay lagos más claros
y profundos que sus ojos;
cuando no hay grutas de las maravillas
comparables con su boca;
cuando no hay lluvia
que supere a su llanto;
ni sol que brille más
que su sonrisa……
La belleza no hace feliz
al que la posee;
sino a quien puede amarla
y adorarla.
Por eso es tan lindo mirarse
cuando
esos rostros
se convierten en nuestros paisajes favoritos...
ESE CUERPO DEL ESPEJO.
No me gustan mis muslos,
decía la mujer almohada,
son blandos y gruesos.
Y yo los recordaba
cálidos y dulces
suaves y moteados aquí y allá
de hermosos lunares.
No me gustan mis pechos,
decía la mujer de miel,
son demasiado grandes.
Y yo los veía
redondos, rotundos y firmes
y la convencía para usar escotes
Cada vez tengo menos pelo,
decía el hombre pimiento,
la edad no me perdona.
Y yo pensaba en su torso
trabajado y fibroso
sin llegar al exceso
No me gustan mis ojos,
decía la mujer serpiente,
están desviados y son pequeños.
Yo por contra
recordaba su piel tan suave,
su elasticidad y su fuerza.
No me gusta mi barriga,
decía el hombre camaleón,
siempre es más grande de lo que quisiera.
Y yo pensaba en sus ojos
profundos e inteligentes
y sus manos duras,
pero con una habilidad extraordinaria.
No me gustan mis orejas,
decía la mujer ardilla,
están separadas y desiguales.
Y yo veía su espalda,
atlética de nadadora
y su culo tan perfecto
que parecía dibujado.
No me gusto yo,
señor narrador,
no me veo, no me agrado, no me encuentro, no me siento.
Y yo respondía
que no se estaba mirando, ni deseando, ni buscando, ni queriendo sentir.
Que si su cuerpo fuera de otro,
le sería mucho más fácil quererlo.
Que si amara a la persona de ese cuerpo
le sería más fácil adorarlo.
Que si deseara su mente,
anhelara sus detalles,
apreciara las palabras bonitas,
los gestos amables,
los recuerdos agradables,
el placer de que ese cuerpo le tocase,
estaría encantado de mirarlo, desearlo, buscarlo y sentirlo.
Que si viera ese cuerpo
como quien ve a un amigo,
a un amante,
a un desconocido por la calle,
sería feliz de compartir tiempo con él.
Que si dejara de tratar ese cuerpo
como algo permanentemente imperfecto,
sabría ver
todo lo bonito que los demás ven en él.
Ese cuerpo que te sostiene.
Ese cuerpo que te alivia.
Ese cuerpo que te ama y te desea
y al que te esfuerzas
por tratar como a un extraño,
castigándole por tus decisiones.
Ese cuerpo que mortificas,
condenas,
torturas,
y aún así te perdona,
te ama,
te respeta,
te acompaña.
Ese cuerpo,
el tuyo,
que se sentiría vacío sin ti,
que anhela el roce de tu cariño,
que agradece cualquier pensamiento amable;
ese cuerpo,
ESE,
debería ser el que te enamorase,
porque en realidad
ESE es el que está
totalmente enamorado de ti.
http://www.hitobitostudio.com/ese-cuerpo-del-espejo-06-05-2013.html
La super Venus
No me gustan mis muslos,
decía la mujer almohada,
son blandos y gruesos.
Y yo los recordaba
cálidos y dulces
suaves y moteados aquí y allá
de hermosos lunares.
No me gustan mis pechos,
decía la mujer de miel,
son demasiado grandes.
Y yo los veía
redondos, rotundos y firmes
y la convencía para usar escotes
Cada vez tengo menos pelo,
decía el hombre pimiento,
la edad no me perdona.
Y yo pensaba en su torso
trabajado y fibroso
sin llegar al exceso
No me gustan mis ojos,
decía la mujer serpiente,
están desviados y son pequeños.
Yo por contra
recordaba su piel tan suave,
su elasticidad y su fuerza.
No me gusta mi barriga,
decía el hombre camaleón,
siempre es más grande de lo que quisiera.
Y yo pensaba en sus ojos
profundos e inteligentes
y sus manos duras,
pero con una habilidad extraordinaria.
No me gustan mis orejas,
decía la mujer ardilla,
están separadas y desiguales.
Y yo veía su espalda,
atlética de nadadora
y su culo tan perfecto
que parecía dibujado.
No me gusto yo,
señor narrador,
no me veo, no me agrado, no me encuentro, no me siento.
Y yo respondía
que no se estaba mirando, ni deseando, ni buscando, ni queriendo sentir.
Que si su cuerpo fuera de otro,
le sería mucho más fácil quererlo.
Que si amara a la persona de ese cuerpo
le sería más fácil adorarlo.
Que si deseara su mente,
anhelara sus detalles,
apreciara las palabras bonitas,
los gestos amables,
los recuerdos agradables,
el placer de que ese cuerpo le tocase,
estaría encantado de mirarlo, desearlo, buscarlo y sentirlo.
Que si viera ese cuerpo
como quien ve a un amigo,
a un amante,
a un desconocido por la calle,
sería feliz de compartir tiempo con él.
Que si dejara de tratar ese cuerpo
como algo permanentemente imperfecto,
sabría ver
todo lo bonito que los demás ven en él.
Ese cuerpo que te sostiene.
Ese cuerpo que te alivia.
Ese cuerpo que te ama y te desea
y al que te esfuerzas
por tratar como a un extraño,
castigándole por tus decisiones.
Ese cuerpo que mortificas,
condenas,
torturas,
y aún así te perdona,
te ama,
te respeta,
te acompaña.
Ese cuerpo,
el tuyo,
que se sentiría vacío sin ti,
que anhela el roce de tu cariño,
que agradece cualquier pensamiento amable;
ese cuerpo,
ESE,
debería ser el que te enamorase,
porque en realidad
ESE es el que está
totalmente enamorado de ti.
http://www.hitobitostudio.com/ese-cuerpo-del-espejo-06-05-2013.html
La super Venus
Canciones con historia: Tommy - Opera rock de The Whoo
The Who: La epopeya de “Tommy”
“El pop no puede limitarnos a hacer solo singles. Es como si un director de cine solo pudiera hacer anuncios de televisión. Quiero romper ese fatídico esquema de singles pero de manera que no suene pretencioso ni a música clásica”
Cuando a finales de 1968, The Who empiezan a ensayar los temas de “Tommy”, la banda está al borde de la bancarrota. Tras el semifracaso o semiéxito (según como se mire) del elepé “The Who sell out”, el cuarteto se vio obligado a pasarse todo el año de bolo en bolo. Es de las pocas bandas que continúan actuando tres veces cada fin de semana. Si pueden salen de gira ya sea por Europa o a los Estados Unidos. ¿Tenían necesidad los Who de tocar tanto en directo? Parece ser que sí. El acuerdo para desvincularse de Shel Tamy, su primer productor, les privaba de una parte sustanciosa de los royalties de los discos (el más perjudicado era Townshend, obviamente), sus representantes Lambert y Stamp se llevaban su parte pero tenían otros problemas. Por ejemplo, Daltrey a pesar de que todavía no tenía treinta años, ya se había divorciado y su mujer se había llevado una buena tajada de los beneficios acumulados por el cantante y según recuerda el mismo Daltrey “en las giras americanas, las ganancias de la primera semana eran para pagar a los promotores locales, la segunda para pagar las actuaciones promociónales que la compañía americana se llevaba por contrato, la tercera semana para pagar los hoteles, el material técnico y gastos de personal, y, por fin, la cuarta era cuando cobrábamos nuestro caché integro. Había que ser auténticos obreros del rock para pagar los gastos mínimos para mantener a nuestras exmujeres y a sus abogados. Para colmo, las leyes británicas nos obligaban a pagar impuestos por el setenta y cinco por ciento de nuestras ganancias como artistas”.
Pese a esta pésima situación financiera, Townshend, Moon, Daltrey y Entwistle están más unidos que nunca. Creen ciegamente en el nuevo proyecto del guitarra larguirucho: un disco que explique una historia de principio a fin, que sea una especie de obra conceptual. El pop, en palabras del propio Townshend, “no puede limitarnos a hacer solo singles. Es como si un director de cine solo pudiera hacer anuncios de televisión. Quiero romper ese fatídico esquema de singles pero de manera que no suene pretencioso ni a música clásica”.
Tan pronto como el resto del grupo escucha los esbozos de las nuevas composiciones de Pete, se entusiasma con el proyecto (excepto Moon, que inicialmente se siente tentado de unirse a los Led Zeppelin de Jimmy Page). Por primera vez desde su formación, The Who se convierten en una piña y comparten algo más que intereses empresariales comunes. Entre Daltrey y Townshend surge una amistad sincera ¡e incluso salen a cenar juntos!, algo que hasta la fecha no habían hecho. En este sentido, Daltrey explicaba que “el proceso de gestación de ‘Tommy’ significó el renacimiento de The Who. Nos calmamos. Antes toda nuestra energía la dedicábamos a evitar que el grupo se separase pero a partir de ese momento vivíamos en una mayor armonía pese a que manteníamos algunas diferencias”. Pete, además, está en un momento de gran actividad personal y compagina la preparación de “Tommy” con la producción de Thunderclap Newman, una nueva banda que con su single ‘Something in the air’ conseguiría un gran éxito a ambos lados del Atlántico, aunque después nunca más se supiera de ellos.
UN CHICO CIEGO, SORDO Y MUDO
“Tommy” narra la historia de un niño ciego, sordo y mudo (precisamente ese era el título original de la historia (“Deaf, dumb and blind boy”). Estas minusvalías son consecuencia de un trauma que el chaval sufre durante la infancia. Su padre es un oficial británico, el capitán Walker, que es dado por muerto durante la primera guerra mundial. Su esposa estaba embarazada. Da a luz a un niño y poco después entabla relaciones con otro hombre. La tragedia llega a su máxima expresión cuando resulta que el padre de la criatura no estaba muerto (ni tampoco tomando cañas), sino que había sido hecho prisionero de guerra. Vuelve al hogar y encuentra a su esposa cometiendo actos impuros con su nuevo compañero. Los dos hombres se pelean y Walker mata al amante de su mujer, Tommy, que tiene cinco años, lo presencia y sus progenitores lo zarandean, le gritan y le obligan a que olvide todo lo que ha visto y oído y, sobre todo, le exigen que no cuente nada. El crío se lo toma al pie de la letra y se convierte en un niño ciego, sordo y mudo.
El señor y la señora Walker sumidos en el arrepentimiento buscaran una solución para que el crío recupere el habla, la vista y el oído. Pasara por curanderos de inspiración cristiana y de una bruja gitana que intenta recuperarlo a base de drogas y que, además, lo viola para “hacerlo un hombre”. Paralelamente, Tommy sufre abusos por parte de su primo Kevin (que disfruta quemándole con cigarrillos) y su tío Ernie, un pederasta que abusa sexualmente de él (le mete mano por debajo del pijama). Y aunque pueda parecer increíble, el niño tiene una gran habilidad para jugar a la máquina de petacos, el pinball, de la que se convierte en un auténtico experto. Pasan los años y Tommy no sana. Un médico diagnostica que no se curará nunca. Pero el milagro sucede. Un Tommy ya adolescente rompe un espejo que había en su casa y ante el cual durante todos esos años se había detenido delante como si pudiera verse.
Su curación y su condición de rey del pinball le convierten en un ídolo. Miles de jóvenes le encumbran hasta convertirse en un auténtico líder y de ahí a convertirse en un dictador hay solo un paso. El “nuevo” Tommy provoca una revolución de sus seguidores ya que predica la privación sensorial como vía para llegar a la santidad, un mensaje que no acaba de calar entre sus discípulos. El protagonista de la historia debe huir. Se da cuenta de que es un ser normal, minúsculo, y decide emprender una nueva vida.
El repertorio de “Tommy” estaba inspirado directamente en las enseñanzas de Meher Baba, un religioso de origen iraní que pretendía unir todas las religiones del mundo “como si fueran un collar de perlas”. En 1925 decidió permanecer en silencio, una actitud que mantuvo hasta poco antes de su muerte en 1969. “Tommy’ –explicaba Townhsend– es el reflejo de todos los cambios que experimenté en esos años. Estaba decepcionado por la religión tradicional y tenía una gran cantidad de dudas espirituales. Llegué a la conclusión de que el hombre no puede estar limitado a un solo cuerpo, así que me convertí en un místico y un gran conocedor de las obras de Meher Baba. En 1968 eso me ayudó a darme cuenta que la vida no tenía tantas limitaciones como creía”.
El personaje de Tommy es pues un hijo de las enseñanzas de Baba, que afirmaba que vivimos ignorando nuestro yo real y “para penetrar en la esencia de un ser, necesitamos sacar todo el perfume de nuestro talento interior para que sirva de guía en beneficio de otros, por medio del amor, la verdad, la pureza y la belleza. Todas las demás cosas y habilidades de cada uno no tienen realmente importancia”.
“TOMMY”, EL DISCO
Pero “Tommy” no es solo un argumento. Es un disco doble lleno de canciones inmensas. A medida que Townhsend iba presentado las nuevas composiciones el entusiasmo del grupo por ellas crecía de manera exponencial como también aumentaba la ambición sonora de Chris Lambert. El manager-productor quería que en las sesiones de grabación además de The Who, participara también una orquesta con la idea de dar más solemnidad al proyecto pero por cuestiones presupuestarias, porque algunos de los arreglos escritos por Townshend no convencían y porque el guitarrista quería hacer un disco de rock, esta idea se abandonó cuando ya se había registrado buena parte del material (aunque algunos temas, como la ‘Overture’, sí tienen orquestación). Quizás por ello el sonido resultante del conjunto del disco resultó algo decepcionante en el momento de su lanzamiento, independientemente de la calidad de las canciones. La voz de Daltrey suena en un excesivo primer plano, que deja al grupo en un segundo término más apagado, lo que le aleja de un buen sonido profesional estándar y le acerca a una producción amateur. El cuarteto siempre ha reconocido este problema del elepé y quizá por ello sacaron al mercado hace unos años una edición remasterizada en cedé y ahora rematan la jugada con esta edición “Deluxe” de 2013 en la que el elepé suena realmente remozado. Así, Townshend se quejaba durante la década de los setenta de que “cuando escuchabas las maquetas originales, estaban llenas de energía pero el disco sonaba plano. Lambert lo mezcló deliberadamente de esa manera y quedó demasiado blando”. Entwistle, aún era más explicito: “las baterías sonaban como si fueran cajas de galletas. No nos dejó doblar ninguno de los sonidos que teníamos previsto. Quizás porque lo quería tener terminado antes de la gira que iniciábamos a finales de abril del 69”.
Instrumentalmente, “Tommy” está construido sobre los acordes que suenan en ‘Overture’, el tema que abre la ópera rock y que se van modificando a lo largo del disco. Descartada la orquestación, el grupo toca sus instrumentos habituales y además el cuerno francés, guitarras acústicas, piano y el órgano.
Por lo que se refiere a la canciones, en un primer grupo, encontramos los temas que en alguna parte del disco cumplen con una función que podríamos calificar como introductoria de alguna de las partes narrativas de la historia (’1921′, ‘Miracle cure’ o ‘Do you think it’s allright?’) son las más insustanciales, de hecho se encuentran entre las peores que The Who han grabado nunca. Hay otro grupo de canciones de transición como la ya mencionada ‘Overture’, ‘Underture’ y ‘Sparks’, que aunque han sido menospreciadas con frecuencia, en ellas se puede vislumbrar el potencial del grupo a nivel instrumental.
Pero los mejores momentos de la obra se encuentran en temas como ‘Pinball wizard’, en el que la guitarra acústica se funde en un zumbido con la eléctrica hasta explotar. Este tema, que fue el primer single del disco, es el que narra una partida de Tommy contra uno los campeones de la máquina de petacos. La capacidad para enfrentarse a la máquina del millón es una habilidad que Townshend reconoce no haber tenido nunca y que le generaba unas altas dosis de envidia cuando veía jugar a los adolescentes. “Tommy” incluye más temas poderosos como ‘I’m free’, ‘Christmas’, ‘Acid queen’, ‘Cousin Kevin’ o ‘Fidle about’ (estos dos últimas obra de Entwistle) que podrían haber sido composiciones con entidad propia en cualquier otro disco pero que en “Tommy” se acoplan perfectamente para formar un todo. Así ‘Cousin Kevin’ narra las trastadas que sufre el niño ciego, sordo y mudo por parte de su primo; ‘Acid queen’, las experiencias con las drogas, mientras que ‘I’m free’ describe el momento en que el protagonista recupera la vista, el habla y el oído.
“Tommy” salió finalmente a la venta en mayo del 69 y la crítica se deshizo en elogios hacia el disco. Pete Townhsend fue elevado a la categoría de compositor de primera división. Algo parecido ocurrió con Roger Daltrey, un cantante infravalorado hasta la fecha. El disco incluía un libreto con las letras de las canciones, un hecho completamente inusual en esa época. En 1972 apareció un disco con una versión orquestal de “Tommy” en la que participaron Roger Daltrey, Rod Stewart, Merry Clayton, Richie Havens, John Entwistle, Steve Winwood, Richard Harris, Ringo Starr, Maggie Bell, Graham Bell, Pete Townshend, y Sandy Denny. Fue una idea del productor Lou Reizner que, en principio, contó con el apoyo de Townshend que vio la oportunidad de acercarse musicalmente a la idea que inicialmente tenía de “Tommy”, aunque a medida que avanzaban las sesiones de grabación se sintió algo desengañado con el proyecto.
En 1975 se hizo una película basada en el disco, en la que intervenían Elton John, en el papel del “Pinball Wizard”, y Tina Turner como “Acid Queen”. El film fue escrito y dirigido por Ken Russell y también contó con la presencia de Ann-Magret, Jack Nicholson, Eric Clapton y Oliver Reed. Para la banda sonora de la cinta se regrabaron algunas de las partes del disco original de las que el grupo no estaba plenamente satisfecho.
http://www.efeeme.com/la-epopeya-de-tommy/
Opera rock completa
http://www.youtube.com/watch?v=ZfZQLXs72Lo
Tommy - The Whoo película completa
http://www.youtube.com/watch?v=PBNagysBeXE
The Who: La epopeya de “Tommy”
“El pop no puede limitarnos a hacer solo singles. Es como si un director de cine solo pudiera hacer anuncios de televisión. Quiero romper ese fatídico esquema de singles pero de manera que no suene pretencioso ni a música clásica”
Cuando a finales de 1968, The Who empiezan a ensayar los temas de “Tommy”, la banda está al borde de la bancarrota. Tras el semifracaso o semiéxito (según como se mire) del elepé “The Who sell out”, el cuarteto se vio obligado a pasarse todo el año de bolo en bolo. Es de las pocas bandas que continúan actuando tres veces cada fin de semana. Si pueden salen de gira ya sea por Europa o a los Estados Unidos. ¿Tenían necesidad los Who de tocar tanto en directo? Parece ser que sí. El acuerdo para desvincularse de Shel Tamy, su primer productor, les privaba de una parte sustanciosa de los royalties de los discos (el más perjudicado era Townshend, obviamente), sus representantes Lambert y Stamp se llevaban su parte pero tenían otros problemas. Por ejemplo, Daltrey a pesar de que todavía no tenía treinta años, ya se había divorciado y su mujer se había llevado una buena tajada de los beneficios acumulados por el cantante y según recuerda el mismo Daltrey “en las giras americanas, las ganancias de la primera semana eran para pagar a los promotores locales, la segunda para pagar las actuaciones promociónales que la compañía americana se llevaba por contrato, la tercera semana para pagar los hoteles, el material técnico y gastos de personal, y, por fin, la cuarta era cuando cobrábamos nuestro caché integro. Había que ser auténticos obreros del rock para pagar los gastos mínimos para mantener a nuestras exmujeres y a sus abogados. Para colmo, las leyes británicas nos obligaban a pagar impuestos por el setenta y cinco por ciento de nuestras ganancias como artistas”.
Pese a esta pésima situación financiera, Townshend, Moon, Daltrey y Entwistle están más unidos que nunca. Creen ciegamente en el nuevo proyecto del guitarra larguirucho: un disco que explique una historia de principio a fin, que sea una especie de obra conceptual. El pop, en palabras del propio Townshend, “no puede limitarnos a hacer solo singles. Es como si un director de cine solo pudiera hacer anuncios de televisión. Quiero romper ese fatídico esquema de singles pero de manera que no suene pretencioso ni a música clásica”.
Tan pronto como el resto del grupo escucha los esbozos de las nuevas composiciones de Pete, se entusiasma con el proyecto (excepto Moon, que inicialmente se siente tentado de unirse a los Led Zeppelin de Jimmy Page). Por primera vez desde su formación, The Who se convierten en una piña y comparten algo más que intereses empresariales comunes. Entre Daltrey y Townshend surge una amistad sincera ¡e incluso salen a cenar juntos!, algo que hasta la fecha no habían hecho. En este sentido, Daltrey explicaba que “el proceso de gestación de ‘Tommy’ significó el renacimiento de The Who. Nos calmamos. Antes toda nuestra energía la dedicábamos a evitar que el grupo se separase pero a partir de ese momento vivíamos en una mayor armonía pese a que manteníamos algunas diferencias”. Pete, además, está en un momento de gran actividad personal y compagina la preparación de “Tommy” con la producción de Thunderclap Newman, una nueva banda que con su single ‘Something in the air’ conseguiría un gran éxito a ambos lados del Atlántico, aunque después nunca más se supiera de ellos.
UN CHICO CIEGO, SORDO Y MUDO
“Tommy” narra la historia de un niño ciego, sordo y mudo (precisamente ese era el título original de la historia (“Deaf, dumb and blind boy”). Estas minusvalías son consecuencia de un trauma que el chaval sufre durante la infancia. Su padre es un oficial británico, el capitán Walker, que es dado por muerto durante la primera guerra mundial. Su esposa estaba embarazada. Da a luz a un niño y poco después entabla relaciones con otro hombre. La tragedia llega a su máxima expresión cuando resulta que el padre de la criatura no estaba muerto (ni tampoco tomando cañas), sino que había sido hecho prisionero de guerra. Vuelve al hogar y encuentra a su esposa cometiendo actos impuros con su nuevo compañero. Los dos hombres se pelean y Walker mata al amante de su mujer, Tommy, que tiene cinco años, lo presencia y sus progenitores lo zarandean, le gritan y le obligan a que olvide todo lo que ha visto y oído y, sobre todo, le exigen que no cuente nada. El crío se lo toma al pie de la letra y se convierte en un niño ciego, sordo y mudo.
El señor y la señora Walker sumidos en el arrepentimiento buscaran una solución para que el crío recupere el habla, la vista y el oído. Pasara por curanderos de inspiración cristiana y de una bruja gitana que intenta recuperarlo a base de drogas y que, además, lo viola para “hacerlo un hombre”. Paralelamente, Tommy sufre abusos por parte de su primo Kevin (que disfruta quemándole con cigarrillos) y su tío Ernie, un pederasta que abusa sexualmente de él (le mete mano por debajo del pijama). Y aunque pueda parecer increíble, el niño tiene una gran habilidad para jugar a la máquina de petacos, el pinball, de la que se convierte en un auténtico experto. Pasan los años y Tommy no sana. Un médico diagnostica que no se curará nunca. Pero el milagro sucede. Un Tommy ya adolescente rompe un espejo que había en su casa y ante el cual durante todos esos años se había detenido delante como si pudiera verse.
Su curación y su condición de rey del pinball le convierten en un ídolo. Miles de jóvenes le encumbran hasta convertirse en un auténtico líder y de ahí a convertirse en un dictador hay solo un paso. El “nuevo” Tommy provoca una revolución de sus seguidores ya que predica la privación sensorial como vía para llegar a la santidad, un mensaje que no acaba de calar entre sus discípulos. El protagonista de la historia debe huir. Se da cuenta de que es un ser normal, minúsculo, y decide emprender una nueva vida.
El repertorio de “Tommy” estaba inspirado directamente en las enseñanzas de Meher Baba, un religioso de origen iraní que pretendía unir todas las religiones del mundo “como si fueran un collar de perlas”. En 1925 decidió permanecer en silencio, una actitud que mantuvo hasta poco antes de su muerte en 1969. “Tommy’ –explicaba Townhsend– es el reflejo de todos los cambios que experimenté en esos años. Estaba decepcionado por la religión tradicional y tenía una gran cantidad de dudas espirituales. Llegué a la conclusión de que el hombre no puede estar limitado a un solo cuerpo, así que me convertí en un místico y un gran conocedor de las obras de Meher Baba. En 1968 eso me ayudó a darme cuenta que la vida no tenía tantas limitaciones como creía”.
El personaje de Tommy es pues un hijo de las enseñanzas de Baba, que afirmaba que vivimos ignorando nuestro yo real y “para penetrar en la esencia de un ser, necesitamos sacar todo el perfume de nuestro talento interior para que sirva de guía en beneficio de otros, por medio del amor, la verdad, la pureza y la belleza. Todas las demás cosas y habilidades de cada uno no tienen realmente importancia”.
“TOMMY”, EL DISCO
Pero “Tommy” no es solo un argumento. Es un disco doble lleno de canciones inmensas. A medida que Townhsend iba presentado las nuevas composiciones el entusiasmo del grupo por ellas crecía de manera exponencial como también aumentaba la ambición sonora de Chris Lambert. El manager-productor quería que en las sesiones de grabación además de The Who, participara también una orquesta con la idea de dar más solemnidad al proyecto pero por cuestiones presupuestarias, porque algunos de los arreglos escritos por Townshend no convencían y porque el guitarrista quería hacer un disco de rock, esta idea se abandonó cuando ya se había registrado buena parte del material (aunque algunos temas, como la ‘Overture’, sí tienen orquestación). Quizás por ello el sonido resultante del conjunto del disco resultó algo decepcionante en el momento de su lanzamiento, independientemente de la calidad de las canciones. La voz de Daltrey suena en un excesivo primer plano, que deja al grupo en un segundo término más apagado, lo que le aleja de un buen sonido profesional estándar y le acerca a una producción amateur. El cuarteto siempre ha reconocido este problema del elepé y quizá por ello sacaron al mercado hace unos años una edición remasterizada en cedé y ahora rematan la jugada con esta edición “Deluxe” de 2013 en la que el elepé suena realmente remozado. Así, Townshend se quejaba durante la década de los setenta de que “cuando escuchabas las maquetas originales, estaban llenas de energía pero el disco sonaba plano. Lambert lo mezcló deliberadamente de esa manera y quedó demasiado blando”. Entwistle, aún era más explicito: “las baterías sonaban como si fueran cajas de galletas. No nos dejó doblar ninguno de los sonidos que teníamos previsto. Quizás porque lo quería tener terminado antes de la gira que iniciábamos a finales de abril del 69”.
Instrumentalmente, “Tommy” está construido sobre los acordes que suenan en ‘Overture’, el tema que abre la ópera rock y que se van modificando a lo largo del disco. Descartada la orquestación, el grupo toca sus instrumentos habituales y además el cuerno francés, guitarras acústicas, piano y el órgano.
Por lo que se refiere a la canciones, en un primer grupo, encontramos los temas que en alguna parte del disco cumplen con una función que podríamos calificar como introductoria de alguna de las partes narrativas de la historia (’1921′, ‘Miracle cure’ o ‘Do you think it’s allright?’) son las más insustanciales, de hecho se encuentran entre las peores que The Who han grabado nunca. Hay otro grupo de canciones de transición como la ya mencionada ‘Overture’, ‘Underture’ y ‘Sparks’, que aunque han sido menospreciadas con frecuencia, en ellas se puede vislumbrar el potencial del grupo a nivel instrumental.
Pero los mejores momentos de la obra se encuentran en temas como ‘Pinball wizard’, en el que la guitarra acústica se funde en un zumbido con la eléctrica hasta explotar. Este tema, que fue el primer single del disco, es el que narra una partida de Tommy contra uno los campeones de la máquina de petacos. La capacidad para enfrentarse a la máquina del millón es una habilidad que Townshend reconoce no haber tenido nunca y que le generaba unas altas dosis de envidia cuando veía jugar a los adolescentes. “Tommy” incluye más temas poderosos como ‘I’m free’, ‘Christmas’, ‘Acid queen’, ‘Cousin Kevin’ o ‘Fidle about’ (estos dos últimas obra de Entwistle) que podrían haber sido composiciones con entidad propia en cualquier otro disco pero que en “Tommy” se acoplan perfectamente para formar un todo. Así ‘Cousin Kevin’ narra las trastadas que sufre el niño ciego, sordo y mudo por parte de su primo; ‘Acid queen’, las experiencias con las drogas, mientras que ‘I’m free’ describe el momento en que el protagonista recupera la vista, el habla y el oído.
“Tommy” salió finalmente a la venta en mayo del 69 y la crítica se deshizo en elogios hacia el disco. Pete Townhsend fue elevado a la categoría de compositor de primera división. Algo parecido ocurrió con Roger Daltrey, un cantante infravalorado hasta la fecha. El disco incluía un libreto con las letras de las canciones, un hecho completamente inusual en esa época. En 1972 apareció un disco con una versión orquestal de “Tommy” en la que participaron Roger Daltrey, Rod Stewart, Merry Clayton, Richie Havens, John Entwistle, Steve Winwood, Richard Harris, Ringo Starr, Maggie Bell, Graham Bell, Pete Townshend, y Sandy Denny. Fue una idea del productor Lou Reizner que, en principio, contó con el apoyo de Townshend que vio la oportunidad de acercarse musicalmente a la idea que inicialmente tenía de “Tommy”, aunque a medida que avanzaban las sesiones de grabación se sintió algo desengañado con el proyecto.
En 1975 se hizo una película basada en el disco, en la que intervenían Elton John, en el papel del “Pinball Wizard”, y Tina Turner como “Acid Queen”. El film fue escrito y dirigido por Ken Russell y también contó con la presencia de Ann-Magret, Jack Nicholson, Eric Clapton y Oliver Reed. Para la banda sonora de la cinta se regrabaron algunas de las partes del disco original de las que el grupo no estaba plenamente satisfecho.
http://www.efeeme.com/la-epopeya-de-tommy/
Opera rock completa
http://www.youtube.com/watch?v=ZfZQLXs72Lo
Tommy - The Whoo película completa
http://www.youtube.com/watch?v=PBNagysBeXE
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