“Recuerdo al primer Villaespesa (1899-1901)”, él y el almeriense se entregaron a un febril recorrido por imprentas, cafés, museos, jardines, calles, plazas, iglesias, paseos, fábricas y cementerios, “recitando versos, cantando, hablando alto” (Jiménez, 1936: 66).
Francisco Villaespesa Martín nació Laujar de Andarax, un pequeño pueblo de la provincia de Almería un 15 de octubre de 1877. Poeta, periodista, dramaturgo y novelista, comenzó la carrera de derecho , que no terminó, en la universidad de Granada y a los 20 años trasladó su residencia a Málaga, donde se unió a la vida bohemia de Narciso Díaz de Escovar, Ricardo León y Salvador González Anaya.
Ese mismo año continuó su vida bohemia en Madrid, donde subsistió dedicado al periodismo y colaborando en numerosas revistas y diarios. Fundó diversas revistas de corte modernista. 'Electra', 'La Revista Ibérica' y 'La Revista Latina'. Escribe su primer libro de poemas Intimidades (1898) y conoce a su futura esposa, Elisa González Columbio. Invita al joven Juan Ramón Jiménez , a venir a Madrid a "luchar por el Modernismo" y, como éste más tarde le recordaría, fue "el paladín, el cruzado, el púgil del modernismo". Además lo introduce en las tertulias de la capital. Su esposa Elisa cae enferma y los lleva de nuevo a su tierra natal, y en Laujar pasan una temporada, hasta la muerte de ella en 1903.
Este hecho sume al poeta en un estado de postración que líricamente se convierte en libros como Tristitiae rerum (1906) o Viaje sentimental (1909), Recorrió varias veces la América española como empresario teatral y recitador de sus poemas.
Ferviente admirador del poeta nicaragüense Rubén Darío, fue su mejor discípulo y el más genuino continuador del estilo modernista iniciado por éste. Villaespesa gozó en vida de una popularidad inmensa.
Su fecundidad fue pasmosa y por ello, algunos críticos reprochan que esa fecundidad y fogosidad en su escritura, le hacían publicar a borbotones por su enorme facilidad para la versificación, pero no depuraba ni seleccionaba sus escritos.
Aquejado de arterioclerosis, de insuficiencia gástrica y de hipertensión, entre otros achaques, enfermó gravemente en 1930 cuando se hallaba en Brasil, y volvió a España, donde sus males se agravaron en 1933; falleciendo en Madrid un 9 de Abril de 1936, a la edad de 59 años, rodeado de los principales poetas y escritores del momento, Machado, Carrero, Ardavin, Dicenta, o Mendizábal, quienes propusieron a la Asociación de Escritores y Artistas el derecho de enterrar al poeta en el Panteón de Hombres Ilustres Lo profano y lo bohemio, lo sensual, lo triste, lo febril y el decaimiento, lo preciosista y lo moroso, tuvieron en este poeta andaluz un intérprete genial.
En ocasiones, la mera sonoridad verbal le arrastró al amaneramiento. Poseyó la gracia voluptuosa y florida de los frondosos jardines árabes.
http://bibliovillaespesa.blogspot.com.ar/2010/11/santiago-auseron-y-juan-carlos-mestre.html
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