Durante más de mil años, hasta la construcción de la cúpula del Duomo de Florencia, la cúpula del Panteón de Agripa (o de Roma) fue mucho mayor que cualquier otra cúpula construida hasta la fecha. Ligeramente de mayor diámetro que la famosa cúpula florentina, fue durante aproximadamente 1600 años la mayor cúpula construida por el hombre.
Descrito por Stendhal como "el más bello recuerdo de la antigüedad romana", el Panteón es considerado uno de los mayores logros de la arquitectura a lo largo de la historia. Sirvió como fuente de inspiración para todas las grandes cúpulas construidas desde el Renacimiento. Así, Miguel Ángel, lo consideraba "construido por ángeles y no por humanos" y fue estudiado al detalle por el mismo Miguel Ángel (quien participó en la construcción de la cúpula de San Pedro del Vaticano), por Filippo Brunelleschi (el constructor de la cúpula de la catedral florentina, de 45 m de diámetro externo y 41 m de diámetro externo) y Bramante (el responsable de San Pietro in Montorio).
Historia
Tal y como recuerda la inscripción en el arquitrabe, el primer Panteón fue mandado construir en el año 27 a.C. por Marco Agripa; quién construyó un templo rectangular para glorificar a la familia del emperador Augusto.
Dicho templo, probablemente consagrado a los dioses de los planetas, fue arrasado por un incendio en el año 80 d.C; y a finales del año 118, el emperador Adriano mandó construir uno nuevo. El responsable de su construcción fue, posiblemente, el arquitecto griego Apolodoro de Damasco (el mismo que construyó el foro, la columna, las termas y el puente de Trajano sobre el Danubio, entre otras construcciones). Apolodoro de Damasco levantó un templo circular dedicado a todos los dioses de Roma, (la palabra “panteón” derivada del griego, significa “todos los dioses").
Ya en el s. VII el Panteón se salvó de la destrucción, al ser regalado por el emperador bizantino Foca al Papa Bonifacio IV, quién un año más tarde lo convertiría en la iglesia de Santa María de los Mártires. Siglos después fue lugar de sepultura de hombres ilustres y reyes de Italia.
Con el paso de de los tiempos, el Panteón ha sido sometido a actuaciones de desmantelamiento tales como la eliminación de los ladrillos de bronce dorado del tejado (trasladados a Constantinopla en el 663 por el emperador Constante II), y la fundición de las planchas de bronce del tejado del antetemplo para usarlas en el baldaquino de Bernini en San Pedro del Vaticano y los cañones del Castillo de San´Angelo. Finalmente, en el siglo XVII se añadieron a los lados del frontón dos campanarios, obra de Gian Lorenzo Bernini, y eliminados en 1893.
Descripción
Antiguamente, una plaza longitudinal enmarcada entre pórticos conducía a través de una escalinata al pórtico de columnas de tres naves, en cuyo frontal se alzaban 8 columnas de granito de capiteles corintios. Las 16 columnas monolíticas del pórtico fueron realizadas con granito egipcio, pórfido, y mármol blanco en las bases. Sobre las columnas del pórtico se alza el entablamento y sobre éste, se fijó el frontón con un tímpano liso. El pórtico está dividido en tres naves: una central abovedada y más ancha que conduce a la entrada al edificio; y dos laterales adinteladas de igual tamaño y terminadas en sendos ábsides, para las estatuas de Augusto y Agripa. El pórtico está cubierto por un techo a dos aguas.
Cruzando las puertas de bronce se accedía al interior circular, provisto de siete nichos y bóvedas circulares dedicados a los diferentes dioses. Es en este espacio donde los romanos llegaron a una perfección técnica nunca alcanzada hasta ese momento, al resolver los problemas de peso y empuje de la enorme cúpula que lo cubre. Su estructura principal es de planta circular de algo más de 43 m de diámetro interior, con muros de ladrillo de 6,2 m de grosor con arcos de descarga empotrados y cavidades en las que reposa un casquete liso de mampostería. En su origen, el exterior de estos muros estaba recubierto de sillares pulidos, y la cúpula por placas de bronce dorado.
Sobre estos muros se apoya la enorme cúpula de 5000 toneladas, como una gigante semiesfera que parece representar la bóveda celeste. En la cúspide de la cúpula se abre un óculode casi 9 m de diámetro que aportaba luz natural. En el interior, la cúpula está adornada por cinco (el número de planetas conocidos por los romanos) hileras concéntricas de 28 cuadrículas cada una. En tiempos de Adriano, el número 28 se relacionaba con la perfección (un número perfecto es aquel número natural que es igual a la suma de sus divisores naturales a excepción de él mismo, 28 = 1+2+4+7+14). Antiguamente, el interior de la cúpula estaba revestido de bronce dorado. El tamaño de estas cuadrículas va disminuyendo a medida que nos elevamos hacia el óculo. Las medidas de la cúpula se corresponden con la altura de todo el edificio, de forma que si la cúpula siguiera su línea circular hasta completar una esfera, dicha esfera cabría justo dentro del templo, con sus algo mas de 43 m de diámetro y altura.
Uno de los recursos usados más importantes fue el cálculo exacto de los huecos, los apoyos y de todos los elementos estructurales, de modo que el tambor, con sus arcos, pudiese soportar el enorme peso de la cúpula.. Aún así, su construcción no hubiera sido posible sin el profundo conocimiento por parte de los romanos de un "nuevo material", el hormigón a base de cenizas de Pozzuoli (cenizas puzolánica). Las cenizas de puzolánicas aportan resistencia a la tracción al hormigón, al mismo tiempo que permite fraguar en ausencia de aire o en presencia de agua. Para facilitar la estabilidad de la cúpula, el material se fue aligerando a medida que se ascendía (en lugar de travertino se usó piedra pómez y tufo). Otro de los recursos fue el ir reduciendo gradualmente el espesor de la cúpula en sentido ascendente, desde los 5,9 m iniciales hasta los 1,50 m.
http://pelandintecno.blogspot.com.ar/2014/12/el-panteon-de-agripa-y-la-cupula.html
Panteón de Agripa
El Panteón de Agripa o Panteón de Roma (en italiano: Il Pantheon) es un templo de planta circular erigido en Roma por Adriano, entre los años 118 y 125 d.C. completamente construido sobre las ruinas del templo erigido en el 27 a. C. por Agripa, destruido por un incendio en el año 80, dedicado a todos los dioses (la palabra panteón, de origen griego significa «templo de todos los dioses»).
En la ciudad, es conocido popularmente como La Rotonda (la Rotonna), de ahí el nombre de la plaza en que se encuentra.
Influencia posterior
El Panteón ha tenido una enorme trascendencia en la arquitectura occidental. Durante el Renacimiento, los artistas y arquitectos que volvieron los ojos hacia la antigüedad clásica no podían pasar por alto uno de los edificios más bellos y mejor conservados de toda Roma. Brunelleschi estudió el Panteón para la construcción de la cúpula del Duomo de Florencia, punto de partida de la arquitectura renacentista. Bramante y Miguel Ángel lo recrearon en obras como el Templete de San Pietro in Montorio o la Basílica de San Pedro. Durante el neoclasicismo italiano,Antonio Canova proyectó un templo en Possagno, su ciudad natal, basándose en el diseño del Panteón.
Su influencia se deja notar en Inglaterra y América del Norte, sobre todo gracias a Andrea Palladio, que fue muy imitado hasta el siglo XIX. Muchas salas cívicas, universidades y bibliotecas reutilizan la forma de cúpula con pórtico: la iglesia del cementerio monumental de Staglieno, la Iglesia de San Francisco de Paula en Nápoles, la villa Capra de Vicenza, la rotonda de Thomas Jefferson de la Universidad de Virginia, la biblioteca de la Universidad de Columbia, el edificio principal de la National Gallery de Washington o la Biblioteca del Estado de Victoria en Melbourne.